Click acá para ir directamente al contenido
SUSPENSIÓN DE EVALUACIÓN DOCENTE Y SISTEMA SIMCE
DEBIDO A COVID-19
El señor GUZMÁN (Secretario General).- El señor Presidente pone en discusión en particular el proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que suspende la aplicación de la Evaluación Docente y de las pruebas del Sistema de Medición de la Calidad de la Educación (Simce), correspondientes al año 2020, debido a la pandemia del COVID-19, con segundo informe de la Comisión de Educación y Cultura.
--Los antecedentes sobre el proyecto (13.554-04) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican:
Proyecto de ley:
En segundo trámite: sesión 44ª, en 24 de junio de 2020 (se da cuenta).
Informes de Comisión:
Educación y Cultura: sesión 55ª, en 27 de julio de 2020.
Educación y Cultura (segundo): sesión 85ª, en 9 de septiembre de 2020.
Discusión:
Sesión 77ª, en 27 de agosto de 2020 (se aprueba en general).
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Esta iniciativa fue aprobada en general en sesión de 27 de agosto de 2020.
La Comisión de Educación y Cultura deja constancia en su segundo informe, para los efectos reglamentarios, de que no hay artículos que no hayan sido objeto de indicaciones ni de modificaciones.
La Comisión efectuó tres enmiendas al proyecto de ley aprobado en general por la Sala del Senado. Las dos primeras sustituyeron los artículos 1° y 2° del proyecto, respectivamente, en tanto que la tercera agregó un artículo 3°, nuevo.
Las dos primeras modificaciones fueron acordadas por la unanimidad de los miembros integrantes de la Comisión y la última, por mayoría de votos, por lo que será puesta en discusión y votación oportunamente.
Cabe recordar que las enmiendas unánimes deben ser votadas sin debate, salvo que alguna señora Senadora o algún señor Senador manifieste su intención de impugnar la proposición de la Comisión a su respecto o que existan indicaciones renovadas.
Se hace presente que la enmienda aprobada por mayoría de votos, consistente en agregar un artículo 3°, nuevo, requiere de 25 votos favorables para su aprobación, por tratarse de una norma de rango orgánico constitucional.
Su Señorías tienen a su disposición un boletín comparado en el que se transcriben el proyecto aprobado en general, las enmiendas introducidas por la Comisión de Educación y Cultura y el texto como quedaría de aprobarse dichas modificaciones.
Es todo, señor Presidente.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Gracias, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Ha solicitado la palabra en la Sala la Senadora señora Ebensperger.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Escuchemos primero la relación del Presidente de la Comisión.
Tiene la palabra, señor Senador.


El señor QUINTANA.- Señor Presidente, en rigor, este no es un informe, porque el texto correspondiente ya fue presentado por la Comisión en la primera discusión en Sala. Pero, como unánimemente en ese momento se acogió una petición que hizo el Ejecutivo para abrir un nuevo plazo muy breve de indicaciones, que venció hace más de una semana, ocho días, quiero señalar que prácticamente la totalidad de este debate se llevó a cabo en un tono muy distinto -debo reconocerlo- al que se dio con anterioridad en este Hemiciclo, donde hubo diferencias. Finalmente, fue fácil concordar, prácticamente en su totalidad, la iniciativa que hoy día presentamos y que paso a relatar.
Se trata del "Proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que suspende la aplicación de la Evaluación Docente y de las pruebas del Sistema de Medición de la Calidad de la Educación (Simce), correspondientes al año 2020, debido a la pandemia del COVID-19".
En la discusión en particular se abrió un nuevo plazo de indicaciones a petición del Ministro, quien se comprometió a entregar una propuesta que recogiera las inquietudes planteadas durante el análisis del proyecto en la Comisión de Educación.
Las modificaciones propuestas son las siguientes:
En el artículo 1° se asegura que sea una facultad de los profesores decidir llevar a cabo su proceso de evaluación o postergarlo, obligando al sostenedor a dar curso a cualquier solicitud que se presente, quedando suspendida la evaluación de pleno derecho. Este es un aspecto bien importante.
También se asegura la suspensión de pleno derecho de las evaluaciones cuya solicitud se haya presentado antes de la publicación de la ley en discusión. Esta fue una propuesta concordada entre los distintos miembros de la Comisión de Educación y el Ejecutivo.
En el artículo 2° se agrega la siguiente frase: "para los profesores que hayan voluntariamente decidido someterse a la evaluación", con el fin de asegurar que los profesionales que actualmente se encuentren inscritos en el proceso lo hayan hecho de forma voluntaria, propuesta también concordada entre el Ejecutivo y los Senadores.
En seguida, se agrega un artículo 3°, nuevo, donde se repone la suspensión de la realización de las pruebas del Sistema de Medición de la Calidad de la Educación para el año 2020 debido a que no se han efectuado clases presenciales por la pandemia COVID-19. Lo anterior no impide que aquellos establecimientos que quisieran realizar evaluaciones de tipo muestral solicitadas voluntariamente las puedan hacer valer.
Esta indicación, como se ha señalado en la relación, fue aprobada por voto de mayoría. No obstante, nos parece fundamental que la medida que propone, al igual que la suspensión de la Evaluación Docente, quede en una ley y no dependa de una señal del Ejecutivo, porque como se ha demostrado, y el Ministro lo corroboró, había sostenedores que estaban aplicando criterios diferenciados respecto de solicitudes de los profesores sobre evaluarse o no evaluarse.
Ello perfectamente podría ocurrir, lo mismo que un sostenedor o un servicio local de educación podría también instaurar un tipo de prueba, no realmente Simce, porque el Ejecutivo ha señalado que ella no se aplicará este año, pero claramente esta es una certeza que necesitan las comunidades educativas. Así lo ha solicitado también el Colegio de Profesores.
En consecuencia, la recomendación que hacemos es aprobar este proyecto tal como lo despachó la Comisión.
Es todo, señor Presidente.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Gracias, señor Senador.
Ofrezco la palabra.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Está solicitada la palabra en la Sala por la Senadora señora Ebensperger, por el Senador señor José García, y también, de manera remota, la han solicitado la Senadora señora Allende y el Senador señor Alvarado.
Ha pedido también la palabra el Ministro Raúl Figueroa, que está participando en la sesión.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Le vamos a dar la palabra primero al señor Ministro de Educación.
Tiene la palabra, Ministro.


El señor FIGUEROA (Ministro de Educación).- Muchas gracias, Presidente.
Como señalaba el Senador Jaime Quintana, este proyecto fue modificado en la Comisión en virtud de una indicación que presentó el Presidente de la República y que apunta precisamente a consensuar un mecanismo para asegurar el cumplimiento del objetivo de esta iniciativa.
Lo que se busca es lo mismo que, utilizando mecanismos administrativos, el Ministerio de Educación ya estaba impulsando. De hecho, lo hicimos presente en la discusión en general de este proyecto, donde en virtud de la normativa existente se le estaba dando curso a la solicitud de suspensión de la Evaluación Docente que cada profesor o profesora hace llegar a su respectivo sostenedor.
Teniendo en cuenta que el proyecto se había aprobado en general, era necesario compatibilizar lo que ya se estaba haciendo desde el punto de vista administrativo con esta iniciativa legal que está en curso. Por tanto, se optó por sugerirle a la Comisión de Educación -y fue muy bien recibido por todos sus miembros- un mecanismo que asegurara el objetivo tanto del Ejecutivo como de la moción parlamentaria, para que aquellos docentes que por razones evidentes del COVID-19 no estuviesen en condiciones de someterse al proceso de evaluación pudiesen suspender este procedimiento.
En definitiva, consensuamos una modalidad que asegura por el presente año el derecho a suspender la evaluación docente, reconoce las solicitudes de suspensión que ya se han presentado para evitar que se generen distorsiones, y faculta al CPEIP del Ministerio de Educación para resguardar las acciones que permitan, en el caso de aquellos profesores que sí deseen evaluarse, llevar adelante el proceso, ajustado a las características específicas a que obliga la pandemia.
Por lo tanto, esperamos que este proyecto, que en sus dos primeros artículos asegura un mecanismo que permite entregar a los profesores el derecho a suspender la evaluación docente por este año, como consecuencia del COVID-19, y posibilita las adecuaciones necesarias para garantizar el proceso respecto de quienes sí deseen evaluarse, sea respaldado por la Sala en aquello que unánimemente despachó la Comisión de Educación.
En cuanto al tercer artículo, que apunta a la suspensión de la prueba Simce y a la posibilidad de tener pruebas muestrales, con un mecanismo que la misma norma señala, el Ejecutivo tiene una posición diferente.
Primero, quiero señalar que la misma materia fue sometida a votación en la Cámara de Diputados y no contó con los votos necesarios para su aprobación en general. Por lo tanto, aquí se está reponiendo una indicación que, en la práctica, se refiere a un aspecto que ya fue rechazado en general en la otra rama del Parlamento.
En tal sentido, consideramos que no hay espacio, desde el punto de vista constitucional, para que en este mismo proyecto se pueda dar continuidad a la tramitación de ese asunto.
Además, se trata de una materia de iniciativa exclusiva del Ejecutivo, considerando que se le otorgan atribuciones específicas a un órgano del Estado, en este caso la Agencia de Calidad de la Educación.
Por último, y a mi juicio lo más relevante, quiero dejar en claro que, tal como lo señalé en su oportunidad, cuando se discutió el proyecto en general, no existe duda alguna de que el Simce, como prueba censal, no se va a realizar este año. Así lo ha señalado el Ministerio de Educación y, específicamente, la Agencia de Calidad de la Educación, que es la entidad encargada de llevar adelante ese proceso.
La misma Agencia ha indicado que, en la medida en que sea posible, se llevará adelante un proceso muestral, el cual, evidentemente, debido a su misma naturaleza, dependerá de la voluntad de los establecimientos que quieran adherir a él y siempre que las condiciones sanitarias así lo permitan.
Por lo tanto, a diferencia de la suspensión de la evaluación docente, donde fue necesario consensuar una solución legislativa que evitara cualquier tipo de conflicto con lo que ya se estaba implementando, en el caso del Simce no hay ninguna duda de que este año no se llevará adelante como sistema censal.
Considerando, entonces, que esta es una materia que ya se rechazó en general a propósito de este mismo proyecto en el primer trámite constitucional; que se trata, además, de un asunto de iniciativa exclusiva no ratificado por el Ejecutivo, que -insisto- ya ha sido despejado y en el cual no existen dudas por parte del Gobierno, creemos que no corresponde legislar sobre este punto.
Por consiguiente, el Gobierno está plenamente de acuerdo con la postergación de la evaluación docente y, en lo relativo al artículo 3°, manifestamos las aprensiones a las cuales me acabo de referir.
Muchas gracias, Presidente.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- A usted, señor Ministro.
Tiene la palabra la Senadora Luz Ebensperger.
La señora EBENSPERGER.- Gracias, Presidente.
Había pedido la palabra porque al Senador Alvarado, que es el encargado de nuestra bancada en estas materias, se le había caído la conexión, pero ya la ha recuperado, motivo por el cual, Presidente, le pido por favor que le conceda la palabra a él.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Muy bien.
Tiene la palabra el Senador Claudio Alvarado.
El señor ALVARADO.- Gracias, Presidente.
¿Se escucha bien?
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Perfectamente, Senador.


El señor ALVARADO.- Muy bien.
Tal como indicó el señor Ministro de Educación, la indicación que ingresó Su Excelencia el Presidente de la República permitió armonizar este proyecto para que cumpla con el objetivo de postergar la evaluación docente durante el año 2020 y, al mismo tiempo, adecuar las normas reglamentarias o de procedimiento interno del Ministerio que hicieran posible que la ley fuera efectivamente aplicable. En caso contrario, podríamos haber quedado con una normativa muy bien intencionada, pero con dificultades para su aplicación y convertida en letra muerta. Esa indicación fue consensuada con todos los integrantes de la Comisión de Educación y se aprobó por unanimidad.
Paralelamente, el artículo 3° establece normas que dicen relación con el Simce. Pero, a nuestro juicio, el Ministerio ya tiene habilitados procedimientos para circunstancias especiales conforme a los cuales perfectamente se puede resolver el tema que allí se plantea.
Adicionalmente, es necesario hacer presente que el artículo original, tal como se expresó, fue rechazado en general, por lo que no podría ser repuesto hasta un año después. Habría que verlo con Secretaría.
Y, finalmente, se estableció que es un precepto de quorum de cuatro séptimos, por lo que habría que votarlo separadamente.
Concluyo, señor Presidente, señalando que nuestra bancada va a votar favorablemente los artículos 1° y 2° del proyecto, concordados de manera unánime en el Senado, y que tiene diferencias indudables con el artículo 3° desde el punto de vista de la forma, pues no debería haberse incorporado y, además, debe ser aprobado con quorum especial. Por tal motivo, si es admitido a votación, lo vamos a rechazar.
He dicho, señor Presidente.
Muchas gracias.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- A usted, Senador.
Ofrezco la palabra a quienes están participando a distancia.
Tiene la palabra la Senadora Provoste.


La señora PROVOSTE.- Presidente, quiero señalar que nosotros nos alegramos de que el Ejecutivo, después de varios meses, se haya allanado a presentar una indicación que busca entregar certezas y terminar con el agobio que estaba significando para muchos profesores y profesoras a lo largo del país la exigencia de mantener el proceso de evaluación docente. Es obvio que la pandemia, tras la suspensión de las clases en todo el territorio, ha generado también enormes dificultades para todos los docentes.
Ya en el mes de mayo en la Comisión del ramo escuchábamos a la Decana de Educación de la Pontificia Universidad Católica de Santiago señalar que no daba lo mismo señalar en los mensajes "que este año se podría someter a algunos profesores al proceso de evaluación docente" que expresar que "el proceso de evaluación docente se debía suspender para todos, con excepción de aquellos que voluntariamente quisieran someterse a él".
En una carta que suscribimos transversalmente los parlamentarios de la Comisión de Educación a fines del mes de mayo, comienzos de junio, le propusimos al Ministerio un conjunto de medidas para dar certezas en un tiempo de tanta incertidumbre, entre las cuales estaba la suspensión del proceso de evaluación docente, tanto para los profesores cuya evaluación forma parte de las exigencias de la ley 19.070, de Carrera Profesional Docente, como para aquellos sujetos al Sistema de Desarrollo Profesional Docente, de manera que no quedara ninguna duda de que las condiciones especiales que se están viviendo por la interrupción del año escolar han alterado por completo la vida de los profesores y de los estudiantes.
Esta moción se hace cargo del agobio que hoy día están viviendo miles de docentes cuyos sostenedores o responsables comunales del proceso de evaluación han rechazado las solicitudes para suspender la realización del proceso de evaluación durante este tiempo.
En esto cabe recordar que la evaluación docente propiamente tal se establece en el marco de una planificación en la sala de clases. Y por lo tanto la pregunta era qué se pretendía evaluar a los profesores y profesoras.
Sin embargo, a pesar del atraso y de la demora, valoro que el Ejecutivo se haya hecho parte de esta moción. Nos parece que las modificaciones que ha presentado dejan absolutamente claro lo que ella perseguía desde un comienzo, como era suspender la evaluación para los docentes, salvo para aquellos que voluntariamente quisieran participar del proceso durante este año.
En tal sentido, nos parece que las facultades de flexibilidad que se le entregan al CPEIP son también importantes.
No obstante, Presidente, quiero hacer algunas precisiones, pues se han expresado cosas que no se ajustan a la realidad.
En cuanto al artículo 3°, relacionado con la postergación del Sistema de Medición de la Calidad de la Educación, nosotros no estamos reponiendo nada. La norma, efectivamente, se cayó en la Cámara de Diputados, pero, en estricto rigor, no fue rechazada, ya que obtuvo 88 votos a favor, 44 en contra y 19 abstenciones. Era de quorum y le faltó un voto. Sin embargo, llamo la atención sobre la magnitud y la contundente votación que concitó la disposición relativa a la suspensión del Simce.
La norma presentada en la Cámara establecía la suspensión total. Y la indicación que hemos presentado, junto con los Senadores Jaime Quintana y Carlos Montes, va en la línea de lo que ha planteado el propio Ministerio. Por eso, nos cuesta entender que no se allanen a sumarse a la iniciativa de realizar durante este año evaluaciones de tipo muestral, pero mientras sean solicitadas voluntariamente por los establecimientos educacionales, lo cual debe constar en los registros del propio consejo escolar de cada establecimiento.
Nos parece que eso refleja claramente la realidad particular que puede estar viviendo cualquier unidad educativa. La pregunta que uno se debe hacer es por qué el Estado va a incurrir en un gasto para realizar una prueba, aunque sea muestral, del Sistema de Medición de la Calidad de la Educación, cuando lo que debiéramos plantearnos es qué va a medir. ¿Va a medir el patrimonio y la calidad de conectividad de la familia? ¿Va a medir el capital cultural? ¡Qué va a medir, si hoy día estamos en una situación extremadamente compleja, donde el propio Ministerio de Educación ha señalado que un porcentaje...
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Dele otro minuto a la Senadora, Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Sí.
Le vamos a dar la palabra.
La señora PROVOSTE.- Muchas gracias, Presidente.
El Ministerio ha señalado que un porcentaje altísimo de estudiantes no puede continuar hoy día sus estudios porque no tienen conectividad.
Las preguntas que uno se debe hacer, desde el punto de vista ético de la inversión, es qué se va a medir, por qué el Estado va a realizar este gasto.
Entonces, dado que el Ministerio insiste en aquello, hemos señalado que esto debe ser voluntario y contar con una solicitud de los establecimientos educacionales y con la aprobación del consejo escolar respectivo. Acá no estamos reponiendo la norma de la Cámara de Diputados, que iba en un sentido distinto.
Quiero agradecer al Colegio de Profesores; a su Presidente, Mario Aguilar; también a Guido Reyes, y a todos quienes han contribuido con esta moción parlamentaria, que busca hacer justicia y entender que no es posible que en la actual situación se mantenga un calendario que lo único que hace es aumentar el agobio de los profesores y profesoras de Chile.
He dicho, señor Presidente.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Gracias, Senadora.
Tiene la palabra el Senador García Ruminot.


El señor GARCÍA.- Muchas gracias, Presidente, muy buenas tardes.
En primer lugar, quiero señalar que los artículos 1° y 2° de este proyecto, referidos a la evaluación docente, los vamos a votar favorablemente, porque mediante la indicación que presentó el Ejecutivo en la Comisión de Educación del Senado se refuerza la idea que siempre manifestamos en esta Sala, cual es que, dada la situación de emergencia sanitaria que vive el mundo y que, por supuesto, también vive nuestro país, la evaluación docente debía tener carácter eminentemente voluntario para el presente año.
El profesor que desee llevar adelante su proceso de evaluación docente, que lo haga y se respete su voluntad. Y aquel profesor o aquella profesora que, con buenas razones, resuelva no someterse a dicho proceso este año, que se le suspenda la evaluación si así lo solicita. De manera que, si se presenta una solicitud en tal sentido, sea acogida favorablemente, sin ninguna discusión.
Pues bien, los artículos 1° y 2° del texto que estamos votando esta tarde lo consagran así, tal como lo he señalado: respeto a la voluntad de las profesoras y los profesores. Quienes desean suspender la evaluación, lo hacen; se les respeta su voluntad. Y quienes desean llevarla adelante, también lo pueden hacer, facilitando las normas de cumplimiento existentes sobre la materia en razón de la situación de emergencia sanitaria que vive nuestro país.
En relación con el artículo 3°, relativo a la suspensión de las pruebas del Sistema de Medición de la Calidad de la Educación para el presente año, hay buenas razones, por supuesto, para aquello. Así lo ha entendido el Ministerio de Educación y lo ha dicho el Ministro, don Raúl Figueroa, quien ha expresado que, en lugar de ser una prueba de carácter obligatorio para el 2020, será una prueba de índole muestral, pues, aun en situación de pandemia, es necesario contar con información respecto de lo que está ocurriendo en el sistema educacional de nuestro país.
Bien sabemos que hay estudiantes que han podido conectarse, porque tienen los medios para ello, y que, por tanto, están recibiendo enseñanza en sus hogares. Pero hay otros estudiantes, en el extremo opuesto, que, por su situación de ruralidad y también, en muchos casos, por su condición de pobreza, no tienen los medios para conectarse. Y salvo algunos ejemplos, realmente heroicos, de profesores que salen a visitar, explicar y entregarles material educativo a sus alumnos, en muchos otros casos simplemente esto no ha sido posible y, en consecuencia, hay niños y jóvenes que se están quedando prácticamente sin ningún acceso a la educación.
Recoger tal información puede ser muy útil. Y por eso el hecho de que el Simce 2020 sea muestral, como lo ha indicado el Ministerio de Educación, me parece que es la forma de abordar la evaluación del año.
Sin embargo, señor Presidente, incorporar la suspensión del Simce vía indicación parlamentaria nos plantea, en mi opinión, un problema de admisibilidad. Quiero recordar que la Agencia de Calidad de la Educación es un servicio público, y que el Sistema de Medición de la Calidad de la Educación (Simce) es el sistema de evaluación de la Agencia de Calidad de la Educación; es una de sus funciones. Y, de acuerdo con nuestro ordenamiento constitucional, artículo 65...
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Dele otro minuto, Secretario.
El señor GARCÍA.- Decía, Presidente, que, de acuerdo con nuestro ordenamiento constitucional, artículo 65, relativo a la formación de la ley, segundo numeral, es facultad exclusiva del Presidente de la República crear nuevos servicios públicos y determinar sus funciones o atribuciones.
La Agencia de Calidad de la Educación, reitero, es un servicio público y el Simce es una de sus principales funciones.
Siento que esta indicación, incorporada por iniciativa parlamentaria, no procede, es inadmisible.
Por lo tanto, yo al menos me abstendré en el artículo 3°.
Muchas gracias, señor Presidente.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Muchas gracias, señor Senador.
Tiene la palabra el Senador señor Montes.
Se prepara el Senador señor Elizalde.


El señor MONTES.- Gracias, Presidente.
La verdad es que considero que las cosas sobre el proyecto ya están dichas. Pero deseo hacer ver que en la educación debemos tener una mirada distinta respecto a lo que estamos viviendo.
La educación es una dimensión demasiado importante de la vida en sociedad, especialmente en la coyuntura actual. Como país tenemos muchos recursos invertidos, ¡muchos recursos! Es harto más que el Fondo COVID. Muchos niños, entre tres y cuatro millones. Muchos profesores, muchos asistentes o personal de apoyo a la educación. Instituciones que tienen un potencial en todos los territorios del país. Distintas experiencias educativas.
No comparto en absoluto el criterio de que la única experiencia educativa valorable es aquella que lleva la escuela a la casa, tal como si fuera presencial.
Hay muchos aprendizajes de otras maneras, de otras dimensiones de la vida, de las complejidades de lo que vive un ser humano.
Yo quisiera un Ministerio de Educación que se preocupara de procesar y potenciar eso.
Ha habido muchos aprendizajes logrados que no son los objetivos curriculares clásicos. Y considero que hay mucho profesor potenciando estas otras formas de educación; hay muchos.
Ojalá pudiéramos tener más apertura para ver de otra manera el desafío que tiene el Estado, el Gobierno en una coyuntura como la actual.
¿Qué ha hecho el Gobierno? Ha hecho muchas cosas y de eso no tengo duda.
Cada vez que citamos al Ministro nos lee una larga lista de cosas que se hacen. Y considero que sí se hacen. El problema es que hay que evaluar si son pertinentes, si son las más productivas y si realmente responden a las posibilidades que tenemos.
Sin duda, el Ministerio nació en este Gobierno muy marcado por la conflictividad. La Ministra Cubillos dejó una huella de confrontaciones estériles que han hecho daño y han marcado mucho a la Cartera.
Por eso mismo, valoro bastante la manera de conversar del proyecto en la Comisión. Porque fue una forma de buscar acuerdos mucho tiempo después, como decía la Senadora Provoste. Si desde el comienzo el Gobierno hubiera asumido la realidad que se le estaba planteando, a lo mejor habríamos dedicado el tiempo a reflexionar sobre otras cosas, de otras maneras.
Creo que esto nos ha ocurrido con el kínder obligatorio. ¡Si es obligatorio y está cumpliéndose eso de distintas maneras! Y seguimos planteándolo. Hasta el Presidente habla en su cuenta a la nación como si fuera un tema que está abierto. Lo mismo en otras cosas en educación parvularia y en educación superior.
Me parece, además, que para aquellos a los que nos preocupa la educación habrá un desafío: la tendencia ahora será disminuir su presupuesto, y debemos tener mucho cuidado, porque llegar a contar con aquello de que disponemos hoy día en educación ha costado mucho.
Pinochet dejó a la educación con un presupuesto de mil millones de dólares al año. ¡Mil millones de dólares al año! En la actualidad estamos, dependiendo del valor que se ponga, en 17 mil.
Si lo empiezan a bajar, producto de la caída en los ingresos públicos, será un tremendo retroceso. Pero quizás lo más importante es cómo potenciamos la educación, principalmente la de los niños.
Discrepo del Senador García cuando señala que el Simce es una función de la Agencia de Calidad de la Educación.
Quiero decirle al Senador García que el Simce no es una función de nadie. El Simce es un instrumento para cumplir una función, la de evaluación, para lo que se necesita tener mecanismos apropiados. Y el Simce es uno de ellos, tanto es así que cuando se creó el Sistema de Aseguramiento de la Calidad de la Educación, hicimos ver que era un mecanismo caduco en el mundo entero. Se discutía en todos lados que las pruebas psicométricas, de la manera en que se hacían, había que cambiarlas, ir hacia otras formas de evaluación.
Por eso logramos incorporar que al menos un tercio de la evaluación no fuera con estas pruebas psicométricas, sino con otras variables que permitieran captar otras dimensiones del avance o retroceso de los alumnos, de los niños y de las escuelas.
Así que llegamos al famoso dos tercios, un tercio, que hemos tratado de cambiar todavía. Y no ha habido la voluntad ni del Ministerio, ni de la Derecha, ni el Parlamento, de probar otras maneras.
El mundo entero está, justamente en esta coyuntura, probando otras maneras de evaluar y de trabajar.
Sé que me queda muy poco tiempo. Y solamente voy a terminar diciendo: Ministro Figueroa, en los dieciocho meses que le quedan a este Gobierno -a lo mejor estoy exagerando, de puro susto- sería bastante bueno que se constituyera un equipo para pensar qué hacemos en la educación todos, cómo sumamos, cómo tenemos un entendimiento de aprovechar el tiempo, los recursos, hacer las cosas...
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Dele un minuto más, Secretario, por favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Sí, Presidente.
Le vamos a activar el micrófono.
El señor MONTES.- La evaluación docente se aprobó porque ya no tenía sentido seguir gastando tiempo en discutir algo que la vida decía que era obvio.
Y ahora respecto al Simce, existen muchas formas de hacer evaluación. Pregúntenles a los países desarrollados cómo están evaluando en este momento. Ellos consideran que la evaluación principal es la que asume la realidad específica que viven los niños, que es muy diversa.
Como nunca, los instrumentos estandarizados ya no sirven. Pero, en fin. Aquí ha habido dificultad para abrirnos con flexibilidad ante las nuevas realidades.
Yo le diría al Ministro Figueroa: "Ministro, constituya un equipo". Lo que ocurrió con el proyecto demuestra que tenemos la capacidad de conversar.
Estaba el Presidente del Colegio de Profesores presente. Y hay ánimo de hacer lo mejor por los niños, por la educación, más allá de un gobierno o no. La finalidad es lograr los objetivos fundamentales.
Entonces, solo quiero pedirle que en los dieciocho meses que le quedan tratemos de hacer las cosas de otra manera, con otra mirada, pensando en el país y en los niños.
Gracias, Presidente.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Senador señor Elizalde, y se prepara el Senador señor Quintana.


El señor ELIZALDE.- Gracias, Presidente.
Solo quiero comentar que me llama la atención cuánto ha costado que se apruebe esta iniciativa.
Porque si uno hace una revisión de lo que hemos aprobado durante este año en razón de la pandemia, hay una serie de proyectos que fueron aprobados con mucha celeridad a organizaciones sociales y a la prolongación de la vigencia de sus directivas respecto de los consejeros de la Conadi, y en esta misma sesión, sin ir más lejos, vimos un proyecto relacionado con las cooperativas.
Por tanto, es evidente que en condiciones de pandemia la aplicación de la evaluación docente y las pruebas del Simce (Sistema de Medición de Calidad de la Educación) no pueden ser aplicadas conforme a tiempos normales.
Obviamente, votaré a favor de este proyecto.
Eso no obsta a que hay una discusión de fondo, a la cual hizo referencia el Senador Carlos Montes: la necesidad de evaluar los mecanismos, de manera tal de contar con instrumentos adecuados para poder realizar todos los mejoramientos que sean imprescindibles dentro de nuestro sistema educacional.
Y, evidentemente, los instrumentos que se aplican en la actualidad también debieran ser evaluados para realizar las modificaciones correspondientes.
Pero eso ya forma parte de una discusión más de largo plazo y es un tema mucho más sustantivo.
Voto a favor de esta iniciativa.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Gracias, Senador.
Tiene la palabra el Senador Quintana.


El señor QUINTANA.- Muchas gracias, Presidente.
Lo primero que quisiera decir es que en las palabras del Ministro Figueroa hay una interpretación errónea del artículo 68 de la Carta Fundamental.
Claramente, esta no es de las normas que no puedan ser presentadas sino hasta después de un año. También lo señalaba la Senadora Yasna Provoste. En la Cámara de Diputados no es que esta norma fuera rechazada técnicamente, sino que no alcanzó el quorum requerido. Pero tuvo una amplia votación mayoritaria. Me refiero a la del nuevo artículo 3°.
Pero más allá de ese aspecto de forma, si se quiere, quiero agregar que en la Comisión de Educación no fue puesta en votación, ni pedida la votación de la inadmisibilidad.
Por eso es que llega en estos términos a la Sala.
Asimismo, deseo sumarme a lo que han planteado varios colegas respecto del tono que debe primar en estos debates educativos. Porque nosotros desde marzo, desde el inicio de la pandemia, convocamos en la Comisión a distintos especialistas y, por supuesto, también al Ejecutivo (el Ministro nunca ha dejado de estar presente en las reuniones); diálogo ha habido. Pero el problema es que muchas veces sentimos que no ha habido posibilidad de consensuar aspectos esenciales.
Creo que en Chile han pasado demasiadas cosas en los últimos diez o doce meses como para seguir atrincherados en determinadas barreras ideológicas.
Y la evaluación es un tema bien de fondo.
Este propio Senado tiene en discusión un proyecto que justamente lo que hace es promover las evaluaciones cualitativas y basadas en la retroalimentación, no en tiempos de pandemia sino que en épocas normales -¡con mayor razón en pandemia!-, para superar los sistemas basados en escalas numéricas al menos durante el primer ciclo básico.
Toda la evidencia mundial apunta en esa dirección. Incluso Senadores de Renovación Nacional -y lo quiero decir- apoyaron con entusiasmo el proyecto en su votación general.
Sin embargo, el Ejecutivo, escuchando a un grupo cada vez más reducido de sostenedores -quiero decirlo claramente-, insiste en no dar lugar a un debate absolutamente conectado con el Chile de hoy.
Este año todos los niños van a tener que ser promovidos, sin notas, sin escalas numéricas, sin ningún tipo de evaluación. Ese es un tema que en marzo varios especialistas en la propia Comisión le plantearon al Ministro.
Entonces, nosotros hubiésemos esperado que a la misma situación, la misma disposición. Las razones que hoy día se han dado para apoyar los artículos 1 y 2, que básicamente lo que hacen es suspender la evaluación docente, apuntan a que esta sea la regla general y no que el profesor ande probando que no puede someterse porque, además, está preocupado de sus clases presenciales en aula.
Eso está bien. Pero claramente me gustaría que el Ministro lo hubiera hecho extensivo también al Simce.
¡Si aquí el Ministro ha señalado que no va a haber Simce censal este año y podría haber pruebas muestrales!
¡Si el propio Gobierno lo ha dicho! ¡Si vemos que el Ejecutivo ha hecho intentos y esfuerzos ingentes por volver a clases en marzo, abril y mayo -todos sabemos- y durante el transcurso del año ha habido varios intentos por retomar las clases presenciales! El Ministro se ha preparado para eso. Lo ha dicho en todos los tonos.
Entonces, siento que hoy día este es el momento de la certeza.
Más aún, el Ejecutivo acaba de prorrogar por 90 días más el estado de catástrofe.
Creo que este es el momento de dar certeza a las comunidades educativas. Los Senadores que están aquí -varios han sido alcaldes- saben perfectamente cuánto estresa el Simce a las comunidades educativas, más allá de los cuestionamientos que tiene esta prueba estandarizada, como se señalaba recién. Con resultados, ¿para qué? Para seguir segregando la educación, para el semáforo que se le ocurrió a un alcalde por ahí alguna vez y para resultados, como terminar cerrando colegios, discusión que este Senado ya hizo hace algunas semanas.
Entonces, francamente nosotros hubiésemos esperado, dado que no ha habido esa posibilidad con el actual Ministro de Educación, quien tiene mucha similitud con su antecesora, lograr consensos mínimos, del todo razonables y pedidos por todas las comunidades educativas, por el Colegio de Profesores, en materias como estas.
Reitero, la señal de que no va a haber Simce y establecerlo por ley nos parecería un tremendo paso.
Creo que aún es tiempo.
Yo espero que transversalmente todos los colegas, que conocen muy bien sus territorios, que visitan escuelas, porque son profesores y porque han sido alcaldes, comprendan que este es un tema muy central y me parece que, en medio de todas las incertidumbres, tenemos que dar mínimas certezas como la que nos ocupa y establecer por ley que el Simce tampoco se aplicará durante el 2020.
Es todo, señor Presidente.
Gracias.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Senador Rodrigo Galilea.


El señor GALILEA.- Gracias, Presidente.
En este tema a mí me gustaría hacer algunas distinciones. Y haré las mismas que hace este proyecto de ley.
En primer lugar, los artículos 1° y 2° hablan de lo que tiene que ver con la evaluación docente.
Cuando discutimos el proyecto en general, yo planteé que a mi juicio no era necesario hacer una ley para establecer lo que propone este proyecto de ley. ¿Por qué? Porque la propia evaluación docente contempla que el proceso no puede llevarse a cabo cuando hay razones de fuerza mayor, y ya la Contraloría General de la República dijo que el COVID era una causal de fuerza mayor para estos efectos.
Por lo tanto, no era estrictamente necesario hacer esto.
Pero, bueno, yo valoro que se haya aprobado en general y, más allá de mi opinión personal, me alegro de que el Ministerio haya buscado los términos, las condiciones, la redacción para que esto sea legal y para que hubiera unanimidad en la Comisión, en el Poder Ejecutivo y, en general, en todos los parlamentarios respecto de este tema.
En consecuencia, doy por buenos los artículos 1 y 2, más allá de las prevenciones que había hecho yo anteriormente respecto de su necesidad, las cuales vuelvo a reiterar.
En cuanto al tema del Simce, que es el que más acapara la atención, se alude mucho a tener la certeza de que no va a haber Simce.
Yo quiero recordarles a todos los estimados Senadores que el año pasado tampoco se hizo Simce. ¡Tampoco se hizo Simce! Se hizo una prueba voluntaria y muestral, y nadie tuvo mayores dramas. Dadas las circunstancias que vivía el país, el Ministerio tomó el acuerdo de no hacer el Simce en los términos normales en que se venía haciendo y eso operó... (falla de audio en transmisión telemática)... sostenedores, en fin, y se hizo una cuestión de orden muestral para saber cómo la crisis del año pasado había impactado en la educación de los niños.
Por lo tanto, dentro de sus facultades y de la facultad de la Agencia de Calidad, este año también se informó exactamente lo mismo, ¡exactamente lo mismo!
Entonces, aquí no hay ninguna subjetividad, ninguna ansiedad de parte de nadie. Esto está completamente informado y asumido por todos los colegios del país. No va a haber Simce. Y tal como se dijo el año pasado -y ocurrió-, este año también está dicho y así va a ocurrir.
Ahora, alguien decía: "Bueno, ¿pero qué vamos a medir aquí? ¿Para qué vamos a medir?". Más allá de las aprensiones en cuanto al tipo de mediciones a que aludía el Senador Montes, que es de lo que quiero hablar, ¿qué vamos a medir? Y a mí me parece importantísimo tener información respecto de lo que ha ocurrido este año.
No quiero que ninguno de nosotros minimice el impacto negativo que este año ha tenido en la educación de los niños, particularmente, por supuesto, en la de los niños más vulnerables.
Entonces, debemos tener información de qué ocurrió en matemáticas en quinto básico, en séptimo, en fin, en todos los cursos; qué pasó en lenguaje, ¿hubo lectura o no hubo lectura? La verdad es que esa es una cosa absolutamente trascendental.
Entonces, ¿cómo vamos a dejar a ciegas o pretender dejar a ciegas al Ministerio de Educación y sin la posibilidad de obtener esa información? El Ministerio debe saber bien cómo puede medir en varios sectores; saber bien cuál fue el impacto en las áreas rurales y en la ciudad; saber cuál fue el impacto en los sectores más marginales, en los sectores medios y en los sectores más acomodados, para adecuar los contenidos del próximo año si, Dios mediante, podemos tener un año educativo normal.
Y más allá de si el Simce es un instrumento válido en parte o no; si es muy métrico o debiéramos optar por uno de otro tipo -y sé que existe una discusión que ha ido produciendo cambios en el Simce, así como también estamos entrando a una PSU de transición-, creo que son cosas que se van adecuando en el tiempo y todos estamos superabiertos a tomar las mejores experiencias internacionales para medir bien y mejor.
Pero lo que no podemos hacer bajo ningún punto de vista es renunciar a lo que es una necesidad imperativa este año: saber cuánto fue el daño y la profundidad que tuvo la crisis en la educación de nuestros niños en un año absolutamente anormal.
Entonces, dejando eso claro, nos enfrentamos...
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Dele un minuto, Secretario, por favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Sí. Le vamos a activar el micrófono.
Ahí está activado, Senador.
El señor GALILEA.- Decía que tenemos que resolver un tema de legalidad en esto.
Si se vota, efectivamente creo que no hay duda alguna de que esta es ley orgánica y, por tanto, se aplican los cuatro séptimos.
Sin embargo, quiero mencionar que la indicación incorporada por algunos Senadores en el inciso primero apunta a la suspensión del Simce, que es lo mismo que se rechazó en la Cámara, y después agrega el tema de que los colegios o los sostenedores que pidan ser evaluados puedan hacer una evaluación muestral.
Entonces, en la práctica, buena parte del artículo 3° es el corazón de lo que ya se rechazó en general en la Cámara de Diputados no porque hubiera una mayoría, sino porque simplemente no alcanzó el quorum requerido, y le agregó este otro aspecto de decir: "Bueno, si alguien solicita, puede hacerlo".
La verdad es que no me gusta tanto eso de "si alguien solicita", porque creo que el propio Ministerio -es tan importante contar con esa información- debe generar los incentivos para lograr las muestras que desea y obtener la información necesaria para enfrentar el año que viene.
Para terminar, le pido a la Secretaría que indique cómo debemos enfrentar lo relativo al artículo 3. Quiero saber si el inciso primero está completamente rechazado y no se puede reponer, quedando solo votar el inciso segundo. En definitiva, qué vamos a hacer.
Presidente, solicito la opinión de la Secretaría respecto de ese punto.
Muchas gracias.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Gracias, Senador.
Ofrezco la palabra.
Ofrezco la palabra a los colegas que se encuentran conectados a distancia.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- En la Sala el Senador señor Navarro ha solicitado la palabra, señor Presidente.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Tiene palabra, don Alejandro Navarro.


El señor NAVARRO.- Gracias, Presidente.
Se ha elegido debatir este importante proyecto, que afecta esencialmente a la primera línea de la defensa de la educación y la formación de nuestros escolares (tres y medio millones de niños y adolescentes), con relación a si se cumple o no el artículo 3, a si tiene admisibilidad.
¡Toda idea es admisible si es por el bien superior de los niños! ¡Los niños primero!
La pregunta para el señor Ministro de Educación es: ¿cuántas muestras se necesitan para saber que estamos en un período excepcional? ¿Qué resultados espera evaluar en esta contingencia?
Señor Ministro, tiene a 445 mil niños abandonados. Usted mismo lo reconoció. El 13 por ciento de los estudiantes no cuenta con conexión, con computador, con tablet o celular; y reciben guías una vez a la semana. Esos niños vulnerables sufren el abandono en que este Gobierno y usted los tienen.
¡Y usted sigue discutiendo cómo gastarse 22 mil millones de pesos en una evaluación que los profesores no quieren!
¡Ministro, gástese la plata en conectividad!
¡Cómpreles computadores a los niños pobres, que usted tiene abandonados!
Insiste en que haya evaluación. ¡Qué contrato hay detrás! Voy a ir a la Contraloría para saber cuáles son las empresas a cargo de eso. ¡Por qué se insiste tanto en ello!
Considerando que pedagógicamente este año ha sido complicado, la verdad es que los resultados que usted quiere evaluar no van a ser aplicables.
Hagamos el debate, si quiere. Pero no insista en hacer la prueba Simce.
Ahora, los profesores que quieran evaluarse, ¡bueno, que lo hagan! Usted dice que hay algunos que quieren hacerlo por los bienios.
Yo lo emplazo a que actúe y dé dos años en uno, porque igual en el año escolar de 2021 va a tener dos en uno. ¡Y usted no lo quiere aceptar!
Entonces, más allá de la formalidad, yo le pido un criterio de realidad. ¡Realismo, Ministro! Dese cuenta de lo que está haciendo, del daño que está causando a los niños que tiene abandonados, sin computadores ni conectividad. Y usted insiste en preocuparse de aplicar el Simce.
¡No sea porfiado, Ministro!
¡Hágale caso a la realidad, hágales caso a los profesores!
Ministro, ¿ha estado en una sala de clases?, ¿ha hecho un día de clases?, ¿ha planificado una clase?, ¿ha intentado estudiar con sus hijos en medio del agobio?
Pero sus hijos, al igual que los hijos de quienes estamos aquí, poseen un computador, una tablet, y cuentan con conectividad y padres que han estado en la educación superior. La pregunta es qué está haciendo por los niños cuyo padre o madre no puede brindarles la atención suficiente. Y, además, no tienen nada de conectividad.
Este proyecto, que debiera ser de fácil resolución, nos consume tiempo y preocupación, y no apunta a la esencia. Ministro, la esencia es que no va a haber clases presenciales, aunque usted porfiadamente insista. Las madres ya lo decidieron.
Entonces, preocúpese de invertir en eso y, también, en nuestros profesores.
¡Piñera ha abandonado a los niños! ¡No les compra computadores!
Vamos a terminar el año trabajando para que vuelvan, ¡y usted me pone como ejemplo para el retorno un montón de islas: Isla de Pascua, Puerto Ibáñez! La Región Metropolitana no tiene islas. Coronel tiene una, Isla Santa María, pero posee solo 3 mil residentes; en mi región somos 1,5 millones de habitantes, y en Chile hay 3,5 millones de niños.
Se opta por confrontar, pelear, enfrentarse a los profesores, y no hacerlos sus aliados.
Usted recibió la herencia de Marcela Cubillos y equivocó el camino: ¡ideologizó el Ministerio de Educación! ¡La UDI ideologizó el Ministerio de Educación! Lo volvió confrontacional, y no quiere aplicar la reforma de Bachelet. En definitiva, eligió la tarea para poder boicotear todo el sistema de educación pública gratuita.
Esto es solo una muestra más de tozudez, de porfía y de falta de criterio, que a mí me sorprende.
Una vez la UDI fue popular, y usted, como militante de la UDI, era un militante popular. ¡Hace mucho rato que no le queda nada de eso en lo absoluto! Porque si supiera lo que es popular, estaría preocupado por la conectividad para los niños vulnerables: 445 mil niños que usted tiene abandonados.
¡Deje el Simce! ¡Postérguelo para el próximo año!
Vayamos a los temas que nos unen, para salvar lo que la ONU ha calificado como la tragedia de una generación, porque va a haber un daño tremendo. Y, ante eso, el Gobierno está haciendo poco y nada, casi nada para poder enfrentarlo.
Por ello, voy a votar a favor, señor Presidente.
Creo que el argumento de la inadmisibilidad del artículo 3° no tiene fundamento, y yo espero que los Senadores lo aprueben.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Gracias, Senador.
Ofrezco la palabra.
Ofrezco la palabra.
Sometamos a votación el proyecto, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias, señor Presidente.
La primera votación son las enmiendas unánimes, que corresponden a los artículos 1 y 2.
Luego correspondería votar el artículo 3, que fue aprobado por mayoría en la Comisión y es una norma de carácter orgánico constitucional.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- En votación las modificaciones unánimes.
--(Durante la votación).
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Vamos a iniciar la consulta de votos a quienes se encuentran participando de la sesión a distancia.
La Senadora señora Rincón ha solicitado adelantar su voto, sin fundamentar. ¿Cómo vota, señora Senadora?
La señora RINCÓN.- Voto a favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor García-Huidobro, ¿cómo vota?
El señor GARCÍA-HUIDOBRO.- A favor, Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Guillier, ¿cómo vota?
La Senadora señora Allende solicita adelantar su voto, sin fundamentar. ¿Cómo vota?
La señora ALLENDE.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
El Senador señor Alvarado también quiere adelantar su voto. ¿Cómo vota?
El señor ALVARADO.- A favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
La Senadora señora Órdenes solicita adelantar su voto, sin fundamentar. ¿Cómo vota?
La señora ÓRDENES.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
El Senador señor Prohens también desea adelantar su voto. ¿Cómo vota?
El señor PROHENS.- A favor, Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
El Senador señor Araya ha solicitado adelantar su voto, sin fundamentar. ¿Cómo vota?
El señor ARAYA.- Voto a favor, Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
La Senadora señora Sabat también solicita adelantar su voto. ¿Cómo vota?
La señora SABAT.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Senador señor Guillier, ¿cómo vota?
Senador señor Harboe, ¿cómo vota?
Senador señor Huenchumilla, ¿cómo vota?
El señor HUENCHUMILLA.- A favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Insulza, ¿cómo vota?
Perdón, el Senador señor Insulza se encuentra pareado con el Senador señor Kast.
Senador señor Latorre, ¿cómo vota?
El señor LATORRE.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Montes, ¿cómo vota?


El señor MONTES.- Voto a favor.
Simplemente quiero decir que no podemos comprarnos una idea reduccionista de la educación.
En estos cinco meses, ¿qué ha pasado con los niños? A lo mejor, han tenido un retraso en el currículum, pero han generado un desarrollo en la parte emocional, en la relación con los padres -sea buena o mala-, en la forma de mirarse a sí mismos. Ha habido otros desarrollos.
Necesitamos una educación que entienda que en el centro están los niños, están los alumnos. Por lo tanto, debemos buscar formas de evaluar el proceso que se ha vivido en este tiempo.
Las simplificaciones nos llevan a decir cuánto han retrocedido los niños en estos meses. Veamos qué ha pasado con ellos, porque puede ser bastante más rico y más contradictorio que lo que, por ejemplo, cree el Senador Galilea.
Voto a favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senadora señora Provoste, ¿cómo vota?
La señora PROVOSTE.- Voto a favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias, Senadora.
El Senador señor Bianchi pide adelantar su voto, sin fundamentar. ¿Cómo vota?
El señor BIANCHI.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias, Senador.
Senador señor Soria, ¿cómo vota?
Ahí tiene activado el micrófono.
¿Cómo vota?
El señor SORIA.- Voto a favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Senador señor Quintana, ¿cómo vota?
El señor QUINTANA.- A favor, Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Senadora señora Van Rysselberghe, ¿cómo vota?
La Senadora señora Aravena se encuentra pareada con el Senador señor De Urresti.
Senador señor Durana, ¿cómo vota?
El señor DURANA.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Galilea, ¿cómo vota?


El señor GALILEA.- Presidente, me veo obligado a precisar una afirmación que hizo al pasar el Senador Montes.
Es evidente que también hay que medir los impactos emocionales, familiares, etcétera, que han tenido los niños en este año. Nadie discute eso. Y estoy seguro de que el Ministerio, a través de sus psicopedagogas y todo su equipo, está midiendo esos elementos, como también se halla en la obligación de ver qué pasó en los conocimientos -llamémoslos así- más duros. El desafío de este año es doble -en realidad, siempre es doble e intenso-: saber que ha ocurrido en los contenidos duros y, además, qué ha pasado en el alma, en el corazón, en la educación de carácter emocional de todos los niños de nuestro país.
Aquí nadie ve las cosas como una u otra. Creo que ese es el gran problema que tienen algunos: tienden a pensar que lo uno va en contra de lo otro, o lo otro en contra de lo uno. Eso no es así. Tenemos que ser capaces de diseñar y medir ambos aspectos en la vida escolar de la totalidad de los niños. Todos debemos caminar en ese mismo sentido. Estoy seguro de que es lo que quieren el Senador Montes, el Ministro Raúl Figueroa y todos aquí.
Pero no planteemos las cosas binariamente: que es blanco o negro; que tú quieres lo otro y no quieres lo uno. ¡No! Ese es un mal camino. Aquí tenemos el desafío de medir ambas cosas correctamente.
Voto a favor de los artículos 1 y 2, Presidente.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
El Senador señor Galilea vota a favor.
Senador señor Guillier, ¿cómo vota?
El señor GUILLIER.- Voto a favor, señor Secretario.
Disculpe. Rato atrás estaba medio dando vueltas.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias, Senador.
Vota a favor.
¿Senador señor Harboe?
Como señalé, se encuentran pareados la Senadora señora Aravena con el Senador señor De Urresti, el Senador señor Letelier con el Senador señor Coloma y el Senador señor Insulza con el Senador señor Kast.
Senadora señora Van Rysselberghe, ¿cómo vota?
¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Le falta votar a quien está haciendo de Presidente, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Señor Presidente, ¿cómo vota?
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Voto a favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Terminada la votación.
--Se aprueban las enmiendas unánimes, que corresponden a los artículos 1 y 2 del proyecto (30 votos a favor y 3 pareos).
Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Ebensperger, Órdenes, Provoste, Rincón y Sabat y los señores Alvarado, Araya, Bianchi, Chahuán, Durana, Elizalde, Galilea, García, García-Huidobro, Guillier, Huenchumilla, Lagos, Latorre, Montes, Moreira, Navarro, Ossandón, Pizarro, Prohens, Pugh, Quintana, Quinteros, Sandoval y Soria.
No votaron, por estar pareados, la señora Aravena y los señores Insulza y Letelier.


El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- La siguiente votación es el artículo 3, que es una norma de quorum orgánico constitucional. No olvidemos que, en este caso, los pareos no corren.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Señor Presidente, en la Sala, los Senadores señores Lagos y Pugh han solicitado abrir la votación inmediatamente.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Muy bien.
En votación el artículo 3.
--(Durante la votación).
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Está abierta la votación en la Sala, y procederé a consultar la opción de voto a los señores Senadores que están conectados a través del sistema telemático.
Senador señor García-Huidobro, ¿cómo vota?
El señor GARCÍA-HUIDOBRO.- En contra, Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Vota en contra.
Senador señor Guillier, ¿cómo vota?
¿Senador señor Guillier?
El señor GUILLIER.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Harboe, ¿cómo vota?
Senador señor Huenchumilla, ¿cómo vota?
El señor HUENCHUMILLA.- A favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Insulza, ¿cómo vota?
Senador, tiene que activar su micrófono desde allá.
El señor INSULZA.- Voto a favor, Secretario.
Entiendo que no hay pareos cuando se vota una norma de quorum especial.
Gracias.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Efectivamente, en tal caso, no corren los pareos.
Vota a favor.
¿Senador señor Kast?
Senador señor Latorre, ¿cómo vota?
El señor LATORRE.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Montes, ¿cómo vota?


El señor MONTES.- Yo voto a favor.
Quiero simplemente decir que en su momento llegamos a tener diecisiete pruebas Simce al año, ¡diecisiete! Gracias a que le bajamos el presupuesto al Simce, logramos disminuir esas pruebas. Ahora se ha ido generando un concepto más amplio.
Pero la verdad es que lo único que importaba era el resultado, el ranking. En las comunas se decía: "Este colegio tiene tanto"; "Este otro tanto".
Entonces, el hecho de que se tome al niño como un ser integral, al que se evalúe globalmente, no al que se le mida, es algo respecto de lo cual ha costado mucho abrirse camino. Y falta todavía mucho por andar.
Yo voto a favor de este artículo, señor Presidente.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senadora señora Órdenes, ¿cómo vota?
La señora ÓRDENES.- Voto a favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Harboe, ¿cómo vota?
El señor HARBOE.- A favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Senador señor Prohens, ¿cómo vota?
El señor PROHENS.- En contra, Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
En contra.
Senadora señor Provoste, ¿cómo vota?
La señora PROVOSTE.- A favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Quintana, ¿cómo vota?
El señor QUINTANA.- Voto a favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- A favor.
Senadora señora Rincón, ¿cómo vota?
La señora RINCÓN.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
A favor.
Senadora señora Sabat, ¿cómo vota?
La señora SABAT.- Abstención.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Se abstiene.
Senador señor Soria, ¿cómo vota?
El señor SORIA.- Voto a favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senadora señora Van Rysselberghe, ¿cómo vota?
Senadora señora Allende, ¿cómo vota?
La señora ALLENDE.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Alvarado, ¿cómo vota?
El señor ALVARADO.- Voto en contra.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- ¿Vota en contra?
El señor ALVARADO.- En contra.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Ya.
Gracias.
Senadora señora Aravena, ¿cómo vota?
Senador señor Araya, ¿cómo vota?
El señor ARAYA.- Voto a favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Bianchi, ¿cómo vota?
El señor BIANCHI.- Voto a favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Castro, ¿cómo vota?
El señor CASTRO.- A favor, Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- A favor.
Senador señor De Urresti, ¿cómo vota?
Senador señor Durana, ¿cómo vota?
El señor DURANA.- En contra, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Vota en contra.
Senador señor Galilea, ¿cómo vota?
El señor GALILEA.- En contra.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota en contra.
Senador señor Quinteros, ¿cómo vota?
El señor QUINTEROS.- A favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Vota a favor.
¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador aún no ha emitido su voto?
¿Senador señor De Urresti?
El señor KAST.- En contra.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- ¿Senador señor Kast?
El señor KAST.- En contra.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- En contra.
¿Senador señor De Urresti?
¿Senadora señora Van Rysselberghe?
¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador aún no ha emitido su voto?
¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador aún no ha emitido su voto?
Señor Presidente, si lo estima pertinente, puede dar por terminada la votación.
El señor QUINTEROS (Vicepresidente).- Terminada la votación.
--Se rechaza el artículo 3°, nuevo (21 votos a favor, 9 en contra y 3 abstenciones), por no cumplirse el quorum constitucional requerido.
Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Muñoz, Órdenes, Provoste y Rincón y los señores Araya, Bianchi, Castro, Elizalde, Guillier, Harboe, Huenchumilla, Insulza, Lagos, Latorre, Montes, Ossandón, Pizarro, Quintana, Quinteros y Soria.
Votaron por la negativa la señora Ebensperger y los señores Alvarado, Durana, Galilea, García-Huidobro, Kast, Moreira, Prohens y Pugh.
Se abstuvieron la señora Sabat y los señores García y Sandoval.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Consignamos la intención de voto a favor del Senador señor Navarro.
--Queda aprobado en particular el proyecto y despachado en este trámite.