Click acá para ir directamente al contenido

En emotivo homenaje recuerdan figura del General Carlos Prats

Sala del Senado recordó al asesinado ex comandante en Jefe del Ejército y su esposa, al cumplirse 40 años del atentado que cobró su vida.

30 de septiembre de 2014

Imagen foto_00000015Haciendo énfasis en su compromiso con la democracia y los valores republicanos, así como en su estatura moral, los senadores Isabel Allende, Alberto Espina, Manuel Antonio Matta, Alejandro Guillier, Hernán Larraín y Juan Pablo Letelier rindieron un sentido homenaje a quien fuera Comandante en Jefe del Ejército, el general Carlos Prats, al cumplirse los 40 años del atentado que costó la vida a él y a su esposa Sofía Cuthbert, en Buenos Aires.

 

En la oportunidad, las intervenciones fueron seguidas atentamente desde las tribunas por las hijas del matrimonio y sus nietos, así como familiares y amigos.

 

La Presidenta del Senado, Isabel Allende destacó la impecable trayectoria del general Prats quien sobresalió como mejor alumno de su promoción en la Academia de Guerra y desarrolló una prolífica carrera que combinó tanto su entrenamiento militar como su sólida preparación intelectual. “Sus memorias son clara expresión de su profundidad de análisis e interpretación de los hechos que le tocó vivir”.

 

La senadora hizo alusión a los difíciles y tensos momentos políticos y sociales que le correspondió enfrentar como sucesor del asesinado general René Schneider. “Mantuvo la unidad del Ejército en torno a la denominada ‘doctrina Schneider’ de prescindencia  política”. Y recalcó que “no hay palabras para describir la desesperanza y el dolor que nos provocó la muerte de general Prats y su esposa y valoramos que el Ejército haya repudiado este atentado”.

 

A su turno, el senador Espina junto con saludar a la familia del general Prats y su esposa afirmó que "fue un soldado brillante y así lo señala su trayectoria con especial vocación por la filosofía y la literatura”. Agregó que “podrán haber muchas interpretaciones sobre el difícil periodo que le correspondió vivir pero todos coincidimos en que asesinar a un hombre y su mujer; a un general chileno que defendió los principios democráticos es un acto no solo repudiable sino de cobardía infinita”.

 

Recalcó que “su mayor legado es demostrar que las democracias no se cuidan solas hay que cuidarlas entre todos y también que se construyen con el respeto a las reglas de la democracia y a la dignidad de las personas. Su muerte es un símbolo de que no hay causa ni justificación alguna para la violación de los derechos humanos”.

 

Por su parte, el senador Matta coincidió con sus pares en el sentido de resaltar la trayectoria y el legado del general Prats y, en esa línea dijo que “el libro con sus memorias es fundamental para entender el periodo de la historia que le tocó vivir”. Manifestó además que en su cargo como Comandante en Jefe del Ejército, inició una labor fundamental de modernización y mejoramiento de la institución y su gestión fue fundamental para sofocar el tanquetazo ocurrido el 29 de junio de 1973.

 

Aseveró que “en estos 40 años, el general Prats ha recibido la valoración como defensor de la independencia de las Fuerzas Armadas frente al poder político” y una señal de reconciliación se produjo cuando el propio Ejército repudió el asesinato de su ex Comandante en Jefe”. Espero que “su ejemplo sirva para evitar que el odio vuelva a enquistarse en las relaciones de respeto que debe existir entre todos los chilenos”.

 

El senador Guillier narró cómo se llegó al atentado que culminó con la explosión en pleno barrio Palermo de Buenos Aires, el 30 de septiembre de 1974 y que cobró la vida del general Prats y su esposa. Asimismo manifestó que todavía es materia de debate los esfuerzos que desarrolló para convocar a un plebiscito que resolviera el profundo conflicto político que atravesaba Chile, lamentablemente "ya se había impuesto la verborrea de la violencia y su renuncia a la Comandancia en Jefe solo terminó de cerrar el trágico círculo".

 

Asimismo, el parlamentario valoró “la deuda de honor que cumplió el general Cheyre al repudiar el atentado contra el general Prats” y llamó a avanzar en la reconciliación de los chilenos de modo de evitar que en el siglo XXI “mantengamos una artificial y perjudicial distancia con nuestras Fuerzas Armadas que, gracias al sacrificio de los generales Prats y Schneider, son de todos los chilenos y chilenas”.

 

Por su parte, el senador Larraín resaltó “la justicia de este homenaje a la figura del general Prats cuando se cumplen 40 años de su infame asesinato”. Coincidió también en destacar la estatura intelectual y su legado como un soldado que hizo todos los esfuerzos por “impedir una fractura social que como tragedia griega se cernía sobre Chile”.

 

Indicó que durante su gestión hizo importantes avances en materia de ley de control de armas y fue impulsor del carácter profesional, jerarquizado, obediente y no deliberante de las FFAA. Asimismo expresó a la familia, amigos y cercanos del general Prats “nuestro afecto y solidaridad por un dolor que todavía les acompaña”.

 

Finalmente, el senador Letelier se sumó a las expresiones de sus pares en torno a la impecable trayectoria del general Prats y el difícil rol que debió desempeñar en medio de fuertes presiones y el hostigamiento a las Fuerzas Armadas. Recordó que se retiró del Ejército motivado por “las diferencias con el pensamiento de otros sectores de la institución que, lamentablemente adquirían fuerza”.

 

“Planeaba viajar a Madrid donde una universidad le ofrecía hacer clases, pero se le negó el pasaporte”, dijo el parlamentario y puntualizó que su alevoso asesinato fue parte de la fatídica Operación Cóndor que, “de acuerdo a antecedentes del proceso judicial fue encabezada por el propio general Augusto Pinochet”. Agregó que “hoy cuando las Fuerzas Armadas se han reencontrado con su pueblo, la figura de Prats adquiere relevancia como ejemplo de servicio público y los autores de su muerte no pudieron destruirlo ni vaciar su ejemplo”.

 

Imprimir