Proyectos habitacionales y su impacto en la integración social y territorial: “Vivienda debe contar con más autonomía para avanzar”

Si bien “con matices”, la Comisión de Vivienda y Urbanismo concordó en la necesidad de avanzar en la integración social y territorial, a través de los diversos proyectos habitacionales; además de “entregar más autonomía al Ministerio, lo que pocas veces se ha solicitado en una sesión”, precisó el senador Alejandro Navarro, presidente de la Comisión, quien agregó que esperan que se cuente con un organismo regulador que haga contrapeso al mercado.

La instancia parlamentaria analizó en profundidad la materia en conjunto con el ministro Cristián Monckeberg y las experiencias de los alcaldes Joaquín Lavín, de la Municipalidad de Las Condes y Daniel Jadue, de la Municipalidad de Recoleta.

“Con los elementos que hemos visto en debate está claro que si no hay una ley que posibilite incentivar la integración, ya sea a través de mecanismos tributarios, de incentivos para empresas constructoras, de incentivos para quienes buscan viviendas, la integración va a retardarse muchos años. Como lo que ocurrió en el sector Boca Sur, de la comuna de San Pedro de la Paz”, señaló el legislador.

“El Ministerio de la Vivienda –agregó el senador Navarro- tiene una gran tarea y ha planteado que esto está siendo debatido por el Gobierno. Que han presentado ideas preliminares al Presidente Piñera, donde el Ministerio está trabajando en un proyecto de ley para facilitar e intensificar la integración social en el desarrollo inmobiliario y también urbanístico, lo que nos parece positivo”.

Durante la sesión los senadores valoraron el debate y la participación y el senador Carlos Montes recordó que este es un tema que, a su juicio, “cada cierto tiempo vuelve y la causa no es algo menor; hoy tiene que ver con una identidad tan desigual, la gente no quiere integrarse y eso debemos reconocerlo”.

El parlamentario reflexionó que lo más grave partió con la segregación en educación, “en que los niños fueron separados de acuerdo al nivel de ingreso de sus familias (…) Acá hay un tema de fondo”.

Asimismo, el senador David Sandoval indicó que esto es “un gran desafío como país” y llamó a detallar los incentivos y a proyectar el tema en los próximos 50 años. Para la senadora Carmen Gloria Aravena, se  requiere, además, una visión desde regiones.

El alcalde Lavín detalló su proyecto en la rotonda Atenas, “que quiere transformar como un ejemplo, aunque las reticencias siguen, pero creo que son más bien prejuicios”, enfatizó el legislador, sobre el proyecto emplazado en la comuna con una alta plusvalía, en terrenos de propiedad del municipio y que beneficiará a 85 familias.   

Estas reservas de los vecinos están orientadas, entre otras, porque se podría ver disminuido el valor del paño con viviendas sociales alrededor, paradigma que fue desmitificado por el alcalde de Recolecta, comuna que en los últimos años ha tenido un aumento sostenido de la plusvalía de sus terrenos, y que –además- cuenta con sendos proyectos de viviendas sociales.

Además, los ediles marcaron sus diferencias al explayarse sobre cómo enfrentar la integración social, pues para el representante de Las Condes, “al ritmo de los recursos públicos, al ritmo del Serviu y del Ministerio de la Vivienda, es absolutamente insuficiente si nosotros queremos dar un giro en política habitacional. Por eso pienso que la manera de avanzar más rápido en la integración social es permitiendo en ciertas zonas que uno podría definir como zonas de inclusión social cambios en el plan regulador que permitan incentivos a las propias inmobiliarias para que a cambio de esos incentivos entreguen una cuota de viviendas sociales”.

Postura contraria detalló el alcalde Jadue, para quien se requiere “empoderar mucho más a los municipios y hay que darle mayor autonomía, mayor financiamiento y llegar, ojalá, en algún plazo lo más breve posible, a que todos los ciudadanos valgan lo mismo para el Estado de Chile y que los municipios en ese sentido tengan la misma cantidad de recursos por habitantes en todo el país”.

Además, continuó, “la integración social no es sólo vivir cerca, sino que además estudiar juntos, ir a los mismos centros de salud, jugar en las mismas plazas y parques. Y esto requiere no sólo de una inversión en vivienda, sino que además en la infraestructura básica; porque lo que hace intolerable la falta de integración social es precisamente la asimetría que existe en términos de lo que es el espacio público en las comunas donde vive la clase más vulnerable, y en donde vive la clase que más tiene”.

Desde el Ministerio se resaltó que el “unir la ciudad no es un slogan si no que nos interesa que sea una realidad”, expresó el ministro de la cartera, Cristian Monckeberg. “La idea es que el Ministerio tenga connotación de políticas sociales, de poner temas sobre la mesa y eso se ha ido alcanzando con el trabajo en conjunto con los con alcaldes, con las familias (...) Es bueno que se produzca esta discusión y hay diagnóstico compartido, aunque con visiones distintas, claramente”,  

“Nadie está pensando en la erradicación, ni en cosas distintas que no sean integración”, aclaró y reconoció los esfuerzos de las administraciones anteriores.

A juicio del encargado de la cartera de vivienda, “comparto que a este ritmo no lograremos una integración grande, ha sido más bien boutique, muy acotada (…) y al presidente le interesa que esto sea potenciado, tenemos que generar incentivos más fuertes, nueva política habitacional, diversos formas de tenencia de arriendo o dominio, mayor oferta para hogares de ingresos medios, pensando en propietarios diversos”, explicó.

Asimismo, señaló que se busca una densificación controlada en ejes de transporte y otras fórmulas que puedan contribuir al fin.