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  Segundo Mensaje Presidencial de Sebastián Piñera coincide con la conmemoración de los 200 años del Congreso Nacional

  Tras la ceremonia del 21 de Mayo se arraiga una profunda tradición republicana que tiene como sustento las distintas Constituciones que han regido los destinos del país.

18 de mayo de 2011

ImagenLa segunda Cuenta Pública del Estado Administrativo y Político de la Nación, tiene además un sello especial: coincide con la celebración del Bicentenario del Congreso Nacional que se celebra el próximo 4 de julio.

Se cumple así una tradición republicana arraigada profundamente en la historia nacional, ya que bajo la Constitución de 1833, desde fines del siglo XIX y comienzos del siglo XX, la Cuenta Anual era una práctica que se realizaba el 1 de junio de cada año en la ceremonia de apertura de la Legislatura Ordinaria del Congreso Nacional.

En la Constitución de 1925 se fijó el inicio de las sesiones ordinarias para el 21 de mayo y se trasladó la tradición de la Cuenta Anual para ese día.

La Carta Fundamental de 1980 no vinculaba el inicio de la Legislatura Ordinaria a la Cuenta del Presidente de la República, pero a partir de 1990 se mantuvo la costumbre de entregar el Mensaje el día de apertura de la Legislatura Ordinaria.

Y tan potente es este rito democrático que el Mensaje o Discurso Presidencial del 21 de Mayo se mantiene hasta hoy, pese a la Reforma Constitucional de 2005, que eliminó la distinción entre los periodos de Legislatura Ordinaria y Extraordinaria. De hecho, el inciso final del artículo 24 de la Carta Fundamental dejó establecido específicamente que "el 21 de mayo de cada año, el Presidente de la República dará cuenta al país del estado administrativo y político de la Nación ante el Congreso Pleno"

De esta forma, el Presidente Sebastián Piñera se apresta a continuar esta costumbre, en el Salón de Honor del Parlamento en Valparaíso, el cual se convertirá en el Mensaje Presidencial número 22 tras el retorno de la democracia en 1990.

PRIMER CENTENARIO

Hace 100 años, cuando se celebraba el Primer Centenario del Congreso Nacional, su predecesor, el Presidente Ramón Barros Luco también concurrió ante el Parlamento pleno, reunido el 1 de junio de 1911, en el Salón de Honor del edificio histórico en Santiago.

La sesión fue presidida por el entonces titular del Senado, Luis Antonio Vergara y allí, el Jefe de Estado agradeció y recordó todos los homenajes que se realizaron con motivo del Centenario de la República conmemorado unos meses antes, en septiembre de 1910.

Junto con dar cuenta del estado administrativo de la nación anunció el envío de importantes proyectos de ley destinados a reorganizar la Oficina Central de Estadísticas y las policías de la República, para convertirlas en una sola, entre otros.

En ese entonces Barros Luco se mostraba preocupado por la alta mortalidad infantil anual, 40 mil niños menores a un año, "cuando  la cifra de mortalidad normal no debiera ser mayor de 10 mil", decía y también por la implantación de la instrucción primaria obligatoria.

Barros Luco se mostró orgulloso de "las profundas transformaciones operadas en el régimen económico e industrial del país", pero advirtió que "nuestra legislación no satisface, todas las necesidades actuales".

Reclamaba "la atención de los legisladores para el estudio de las leyes especiales sobre protección del trabajo de las mujeres y los niños, la reglamentación de las condiciones del trabajo en las fábricas y talleres, sobre la responsabilidad de los patrones en los accidentes del trabajo y sobre la organización del crédito obrero, urbano y agrícola".

Al finalizar su discurso, hace 100 años, el Presidente Barros Luco señaló su certeza de que "en el primer Centenario de nuestra Independencia se ha puesto de manifiesto que el progreso de la República, la coloca en altura digna de los países con un provenir asegurado" y agregó que "nos corresponde continuar con decisión en esta obra de adelanto moral y material".

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