Norma sobre protección de datos personales será debatida en particular

A la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento volverá e proyecto, iniciado en moción, que consagra el derecho a la protección de los datos personales, el que se encuentra en primer trámite. Allí los congresistas revisarán el articulado luego que la Sala despachara la idea de legislar.

Los senadores aprobaron por 32 votos la propuesta que busca garantizar este derecho humano de cuarta generación, que se encuentra considerado en diversa legislación extranjera.

Durante el debate los parlamentarios ahondaron en el uso de las bases de datos, la necesidad de definir con claridad qué antecedentes serán considerados públicos y privados, la pertinencia de contar con una institucionalidad pública para resguardar este nuevo derecho y los alcances de la llamada autorización expresa.

Hicieron uso de la palabra los senadores Felipe Harboe, Francisco Chahuán, Hernán Larraín, Manuel José Ossandón, Alejandro Navarro, Juan Pablo Letelier, Eugenio Tuma y Juan Antonio Coloma.

El presidente de la Comisión de Constitución, el senador Harboe informó la iniciativa detallando los distintos actores escuchados en las respectivas audiencias, la legislación comparada analizada, los conceptos que se introducen y los alcances de este nuevo derecho. “Uno de los temas que analizamos fue que se carece de una institucionalidad que permita garantizar el control que tendrán las personas de autorizar el uso de su información personal”, acotó.

El senador Chahuán recordó una moción que presentó el año 2008 que iba en una dirección similar. “En esa oportunidad vimos que la protección de datos personales no debe chocar con el uso de esta información con responsabilidad”, declaró junto con precisar que “si el derecho a la intimidad es viable, también debe serlo el tratamiento de antecedentes”. Relató así que esa iniciativa proponía crear una agencia nacional de protección de datos.

Para el senador Larraín, “la tecnología ha generado un cambio significativo de los alcances de la información”. Recordó así que “tradicionalmente se entendía lo privado como lo suscrito a la familia, pero ahora, internet lo ha masificado todo; y las autoridades no son dueñas de ese material”. Explicó que hoy la Constitución da cuenta de la garantía al respeto y protección de la vida privada, pero calificó ello como insuficiente.

Luego el senador Ossandón observó que “hay que tener cuidado puesto que si aprobamos la norma como está, podrían generarse problemas en otros cuerpos legales respecto a la inclusión del consentimiento expreso“. Aclaró, por ejemplo, que hoy existe el consentimiento inequívoco y se pretende establecer que solo los dueños de la información autorizarán su uso, por lo que hizo un llamado a revisar aquello en la discusión en particular.

A su turno, el senador Navarro calificó como autoritaria la Constitución en ejercicio, por lo que no se mostró sorprendido que ésta no consagre la protección de los datos personales. “No me parece que en las audiencias no se haya considerado escuchar a organizaciones sociales que son las que en realidad tienen parte en esto”, consideró abogando por definir por ejemplo, qué se entenderá por datos personales y qué controles habrá para evitar abuso.

El senador Letelier aseguró que “todas las personas tienen derecho a proteger su intimidad puesto se trata de lo esencial de cada uno, nadie se puede apropiar de eso”. Reflexionó en cuanto a los datos que podrían ser considerados en un futuro como los vinculados a lo patrimonial, la salud, lo genético y lo comercial, entre otros ámbitos. “¿Se aplicará aquello a los medios de comunicación, a Wikipedia?, se preguntó.

A juicio del senador Tuma, el peligro estaría en el mal uso que se entrega a los textos e imágenes que se encuentran en internet, los que alimentan una serie de bases de datos. “Incluso se dice que aún existirían bases de datos clandestinos sobre la historia comercial de las personas y ello está prohibido por ley”, mencionó reconociendo que no se dispone  de una institucionalidad acorde ni de una arquitectura jurídica que resguarde este derecho.

Finalmente, el senador Coloma calificó esta discusión como compleja y apasionante. “Es relevante que un país sepa cuántas personas tienen una enfermedad para diseñar políticas públicas pero es delicado que a partir de esa información la persona pueda ser asegurada”, mencionó graficando el delgado equilibrio entre la protección de la intimidad y el procesamiento de antecedentes en pro de un objetivo.