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Nuevas facultades para el Banco Central: ¿Cómo inyectar mayor liquidez?

Créditos directos al Estado o permitir la transacción de bonos en el mercado secundario. Esas fueron las alternativas estudiadas por los senadores de la Comisión de Hacienda, en el marco del estudio de dos mociones que fortalecen el instituto emisor.

20 de abril de 2020

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Dos mociones que apuntan a entregar una nueva facultad del Banco Central (BC), de manera que se le permita otorgar créditos al Estado en el actual contexto de crisis económica producido por la pandemia del Coronavirus, fueron materia de análisis en la Comisión de Hacienda.

 

Junto a un panel de economistas y ex presidentes del instituto emisor (Roberto Zahler, José de Gregorio y Rodrigo Vergara); el actual titular del organismo, Mario Marcel; además del ministro de Hacienda, Ignacio Briones, los legisladores analizaron los pros y contras de dos propuestas.

 

Se trata de las siguientes iniciativas:

 

  1. (Boletín N° 13399-05) Proyecto de reforma constitucional que regula la facultad del Banco Central para otorgar créditos a entidades públicas. El texto es de autoría de los senadores Carlos Montes, Isabel Allende y Álvaro Elizalde. El proyecto modifica el inciso tercero del artículo 109 de la Carta Fundamental, en el siguiente tenor: “El Banco Central podrá obtener, otorgar o financiar créditos al Estado y entidades públicas o privadas en los siguientes casos: a) de guerra externa o de peligro de ellas, que calificará el Presidente de la República habiendo oído al Consejo de Seguridad Nacional; b) en caso de alerta sanitaria decretada y con previo acuerdo del Presidente de la República”.
  1. (Boletín N° 13400-05) Proyecto de reforma constitucional que autoriza al Banco Central para obtener, otorgar y financiar créditos al Estado y a entidades públicas o privadas en el caso que indica. El autor de la moción es el senador Jorge Pizarro. La propuesta plantea que “El Banco (BC) quedará igualmente habilitado a ejercer las facultades a que se refiere el inciso anterior cuando se declare estado de excepción constitucional de catástrofe, en los términos del artículo 41 de la presente carta fundamental, siempre que dicha declaración abarque todo el territorio nacional, afectando el normal funcionamiento del país, con clara disminución o paralización de la actividad económica”.

 

Luego de un largo debate, donde se dejó en evidencia la importancia de cuantificar la gravedad de la actual crisis económica en términos de déficit fiscal versus inestabilidad financiera, y las implicancias prácticas que tendría entregar al BC la facultad de otorgar créditos al Estado, la Comisión acordó retomar la discusión cuando las circunstancias lo ameriten.

 

En tal sentido, los senadores Ricardo Lagos, Juan Antonio Coloma y José García Ruminot estimaron que no era el momento de resolver esta controversia, argumentando que “debían abocarse a estudiar los proyectos relacionados directamente con la crisis sanitaria”. En tanto, el senador Carlos Montes insistió en que era pertinente tramitar estas propuestas, tras lo cual el senador Jorge Pizarro concitó el acuerdo para continuar con el estudio de otras iniciativas.

 

EXPOSICIONES

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Coincidencia hubo entre Mario Marcel y los economistas Roberto Zahler, José de Gregorio y Rodrigo Vergara, respecto a la inconveniencia de hacer este cambio constitucional en este minuto. Algunos de los argumentos expresados ante la Comisión se pueden resumir en las siguientes ideas:

 

  • “Esta facultad comprometería la autonomía del BC porque al entregar créditos al Estado, estaría supeditado a las necesidades del gobierno de turno. También se asegura que la medida tendría efectos en la estabilidad financiera, por lo que se recomienda solo en los casos extremadamente indispensables (no ahora)”.
  • “En la legislación vigente existirían instrumentos suficientes para financiar un mayor gasto fiscal. Por ejemplo, hacer uso de las provisiones del Tesoro Público, generar endeudamiento autorizado, y utilizar bonos soberanos, lo que se conoce como Fondo de Administración Económico Social”.
  • “Hoy el BC no ha tenido impedimento para ejecutar la política monetaria pese a los anuncios de alza en el desempleo y por tanto, una baja productividad e inversión. El nivel de deuda sería bajo y el ahorro, alto; por lo que el escenario no sería tan desolador”.
  • “De hacerse, el resto del mundo –y los potenciales compradores- no entenderían por qué Chile entrega crédito al Estado siendo que su situación económica aún se mantiene en números azules”.
  • “De concretarse esta nueva facultad en lo microeconómico, se observaría un alza de la tasa de interés, encareciendo el costo del financiamiento”.

 

Al mismo tiempo, todos incluidos el ministro Briones fueron de la idea de permitir la transacción de bonos en el mercado secundario (Bolsa de Valores, por ejemplo) Actualmente tampoco el BC está autorizado para hacerlo, contrario a lo que ocurre en la mayoría de los países del mundo.

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En tal sentido, Marcel estimó como positiva la opción de “permitirnos comprar bonos en el mercado secundario, solo en casos excepcionales. La idea es estabilizar las finanzas. Esto debería ser ratificado por el Consejo del BC con un alto quorum”.

 

DEBATE SENADORES

 

Tras escuchar a los expositores, el senador Coloma explicó que “la contigencia no es buena compañera para tomar decisiones. Acá no estamos frente a un escenario de déficit. Estamos hablando de inestabilidad financiera. La política monetaria es expansiva en materia de tasas de interés, y eso ayuda a detener el deterioro de la actividad económica, y si los riesgos son aún mayores, deben generarse más instrumentos”.

 

Para el senador Lagos, “es peligroso poner en entredicho la autonomía del BC. Creo que abrirse al mercado secundario es una buena opción. No creo que este sea el mejor momento para hacer este debate por la contingencia, además que en el Órgano Constituyente debería analizarse el rol del ente emisor”.

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Luego el senador Montes hizo ver que “valoro el tono más flexible del debate que hoy se ha dado. Cuando hubo la presentación del IPoM y esbozamos las mociones inmediatamente se nos dijo que era mala idea y además que era inadmisible. Esto no es así. Quiero aclarar que nunca hemos puesto en duda la autonmía del Banco, pero sí creemos en generar nuevas atribuciones”.

 

Preocupado por los efectos que puede tener la discusión en la economía, se mostró el senador García Ruminot. “Creo que la idea de entregar créditos al Estado provoca movimiento que se ve en las tasas de interés, y en la estabilidad en general. Creo que hay que ser cautos”, manifestó.

 

Finalmente, el presidente de la Comisión, el senador Pizarro reconoció que “nos inspiramos en estas mociones porque no podemos cerrarnos a los efectos de la crisis. Estoy hablando de la ciudadanía que ver cómo queda cesante y el Gobierno nos dice que no tiene más recursos. Esta es una salida extraordinaria para liberar fondos. Por lo demás se trata de un instrumento que el BC podría usar o no”.

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