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  Tipificarán delito que contempla el proyecto que sanciona el transporte de desechos hacia vertederos clandestinos

  El Senado acordó devolver la iniciativa que cumple su primer trámite a la Comisión especializada para que realice un nuevo primer informe.

7 de agosto de 2012

Con el fin de precisar la tipificación del delito y proporcionalidad de la pena que establece el proyecto que sanciona el transporte de desechos hacia vertederos clandestinos, la Sala del Senado acordó devolver la iniciativa a la Comisión de Transportes.

 

La iniciativa que tuvo su origen en una moción de los senadores Guido Girardi, Juan Pablo Letelier y Jorge Pizarro propone sancionar con presidio menor en su grado medio a máximo, es decir, entre 541 días y cinco años, a quienes comentan este tipo de delitos.

 

Asimismo establece la suspensión de la licencia de conductor o inhabilidad para obtenerla, hasta por cinco años, con el retiro del vehículo y su depósito en los corrales municipales y multa de 50 a 100 unidades tributarias mensuales,  al quienes realicen tráfico vehicular destinado a transportar y acopiar basura en vertederos y rellenos sanitarios ilegales.

 

Similar pena propone al que mantenga, administre, opere o explote los sitios señalados. La pena anterior se podrá aumentar en uno o dos grados cuando la basura o desechos transportados fueren tóxicos, peligrosos, infecciosos, inflamables o pusieren en grave riesgo la salud de la población o el medio ambiente.

 

Asimismo, se contempla como agravante la realización de actos de agresión, obstrucción o entorpecimiento a la fiscalización por parte de las autoridades. 

 

Durante el debate intervinieron los senadores Guido Girardi, Jorge Pizarro, Juan Pablo Letelier, Jovino Novoa, Eugenio Tuma, Carlos Larraín, Hernán Larraín, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

 

El senador Girardi precisó que con esta iniciativa se busca desincentivar no solo con multas sino con penas más drásticas, tales como la suspensión de la licencia y el retiro de vehículos, a personas inescrupulosas que botan basuras en lugares no habilitados para ello generando focos de insalubridad. Admitió que tras este problema existe una realidad más global y que dice relación con que no existen lugares para establecer estos acopios ilegales.

 

El senador Pizarro aseveró que el problema del "depósito de residuos de todo tipo y sin control" en espacios públicos o sitios eriazos no habilitados es un problema serio que afecta a muchos barrios en diversas ciudades del país. Por lo tanto, este proyecto apunta a generar sanciones más drásticas que inhiban a quienes desarrollen estos procesos".

 

Coincidió con su par, el senador Letelier quien aseguró que el problema de basurales de desechos de todo tipo incluso de procesos de construcción es un problema que afecta a muchos sectores rurales. Por lo tanto, este proyecto apunta a generar un criterio de "tolerancia cero" con quienes arrojan basura en forma irresponsable y otorga mayores facultades a Carabineros y autoridades.

 

En tanto, el senador Novoa destacó  el espíritu de este proyecto porque existe una práctica generalizada de botar residuos en cualquier lugar, "incluso se queman en las riberas del río Mapocho", sin embargo, expresó la necesidad de perfeccionar esta iniciativa porque "no me parece razonable que se contemple una misma sanción tanto para quien opera un vertedero ilegal como para quien transporta los desechos".

 

A su turno, el senador Tuma reconoció que "los autores de la iniciativa han tocado un tema que importa a muchas comunas que tienen falta de regulación y de servicios y que están obligados a improvisar vertederos". Por ello solicitó avanzar en la regulación de las poblaciones, de modo de evitar que existan personas que se sientan incentivadas a prestar servicios en vertederos clandestinos. No obstante, dejó constancia de su preocupación por la ejecución y penalización del delito, así como por la forma como las policías van a perseguir el delito.

 

El senador Carlos Larraín sugirió "reexaminar el proyecto porque tiene algunos problemas de redacción". Agregó que se sanciona por igual a quien conduzca, traslade o deposite residuos y no se precisa el tema de la fiscalización. Advirtió que también hay centros de clasificación de basuras que perfectamente podrían caer en esto.

 

En la misma línea, el senador Hernán Larraín, suscribió las mismas inquietudes aunque coincidió en que los vertederos constituyen un atentado contra el medio ambiente. "La idea en sí misma es buena pero el proyecto es discutible, y adicionalmente, desarrollarlo en la Ley de Tránsito me parece doblemente discutible y sería prudente devolverlo y reestructurarlo con más calma para avanzar".

 

El senador Patricio Walker compartió las mismas aprensiones y dudas sobre "la tipificación de la conducta que se quiere sancionar, ya que existe un problema de proporcionalidad de la pena". Precisó que "no puede ser igual de grave trasladar basura que administrar o tener un vertedero ilegal, las penas tienen que ser distintas".

 

Finalmente, el senador Zaldivar apoyó la idea de devolver la iniciativa a la Comisión ya que "tiene varias deficiencias". Mencionó que hay que avanzar en "la precisión del delito, la proporcionalidad de la pena y lo lógico es que vuelva a Comisión y se revise la redacción como corresponda".

 

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