Con presidio de hasta 10 años serían sancionados conductores que incurran en infracciones gravísimas

Hasta 10 años de cárcel y la suspensión por una década de sus licencias de conducir, arriesgarían quienes conduzcan sus automóviles en forma temeraria e incurran en infracciones graves y gravísimas a la Ley de Tránsito.

Así lo propone una moción de los senadores Pablo Longueira y Andrés Chadwick, que fue derivada a la Comisión de Transportes y Telecomunicaciones para su estudio y que tiene como finalidad proteger la vida y la integridad física de las personas.

En lo fundamental, la iniciativa establece sanciones de presidio mayor en su grado mínimo, es decir entre cinco años y un día a diez años, a quienes cometan infracciones graves y gravísimas a la Ley de Tránsito.

También establece penas de presidio menor en su grado máximo, entre tres años y un día a cinco años, a los conductores que produzcan lesiones graves a terceros y los sanciona además, con la suspensión por siete años de la licencia de conducir.

En caso que existan lesiones menos graves, la iniciativa establece una pena de presidio menor en su grado medio, entre 541 días a tres años,  más la suspensión por cinco años de la licencia de conducir.

Según explicaron los autores de la iniciativa, las penas "serán siempre aumentadas en un grado, si el resultado se produce con ocasión de la huida del conductor del vehículo motorizado ante su persecución policial."

Asimismo, los parlamentarios agregaron que "en caso que el conductor del vehículo motorizado, cometiera una o más infracciones gravísimas o graves a la Ley de Tránsito, y que no cause la muerte o lesiones, será castigado con presidio menor en su grado mínimo, entre 61 a 541 días, más la suspensión por tres años de la licencia de conducir vehículos motorizados".