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  Legislar con urgencia

  Por Jovino Novoa, senador por la Región Metropolitana

9 de junio de 2011

ImagenEl proyecto que regula la instalación de antenas de telecomunicaciones considera un grado muy alto de acuerdo entre todos los miembros de la Comisión de Transportes y Telecomunicaciones, que presido, en la resolución de temas que no son para nada fáciles, porque existe un conflicto entre intereses muy legítimos: el interés que tiene la comunidad en poder tener acceso a las telecomunicaciones e Internet, con el interés que tiene esa misma comunidad de que su entorno urbano no sea afectado y de que el valor de sus propiedades no sea perjudicado por la instalación de antenas.

 

Para nuestro país es particularmente importante el contar con este sistema si consideramos que la telefonía móvil es la que usa prácticamente la totalidad de los chilenos. Hoy día la telefonía fija no cubre un porcentaje muy importante del país. No cubre para nada las zonas más populares. Las compañías de teléfonos no están haciendo tendidos de cable en las poblaciones. Y eso por muchas razones: no es económicamente rentable, hay robo de cables. Y eso está significando una limitación muy severa para sectores ampliamente mayoritarios de la población.

 

Como senador de la zona poniente de la Región Metropolitana, se me han acercado grupos de vecinos para que pueda interceder frente a las compañías telefónicas para que hagan tendidos. Porque hay zonas que están calificadas como zonas rojas, donde no entran las empresas a hacer tendidos de cable. Y me señalaban que, por ejemplo, para los niños que viven ahí el no tener acceso a Internet los pone en una desventaja evidente con respecto a niños que viven en otras zonas de la ciudad, que sí pueden tener acceso.

 

Nuestro país tiene en su gran parte una construcción horizontal. No es como otros países u otras ciudades más desarrolladas, donde prácticamente los edificios de altura son los que priman, entonces, las antenas se ponen arriba de los edificios y no molestan. Pero acá, en Chile, desgraciadamente, los sectores populares son sectores donde no existen construcciones en altura. Entonces, para cubrir esos sectores se requiere la instalación de antenas.

 

Esas necesidades hay que compatibilizarlas con el interés de la comunidad, con el interés de los propietarios de los predios vecinos a las antenas, porque existen estudios y cálculos que avalan un deterioro en el precio de la propiedad cuando se instala una antena.

 

Dentro de la complejidad de este tema, en la Comisión de Transportes y Telecomunicaciones prácticamente logramos unanimidad en torno a un proyecto. Por supuesto que hay algunos temas que debemos pulir durante su trámite en particular.

 

No obstante, quisiera que le demos una cierta urgencia en la tramitación a este proyecto, porque mientras nosotros estamos discutiendo esta ley, se están instalando cientos y quizás miles de antenas sin cumplir con esta normativa, que es mucho más exigente.

 

Nosotros en la Comisión de Transportes nos comprometemos a despachar las indicaciones que se presenten a la mayor brevedad posible, de manera de darle tranquilidad a la población en cuanto a que las futuras instalaciones de antenas se van a hacer cumpliendo con las normas de esta ley, que son más exigentes que la legislación actual y que en nuestra opinión resguardan mejor los intereses de la comunidad.

 

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