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PROMOCIÓN DE ACCESO AL AGUA POTABLE PARA CONSUMO Y SANEAMIENTO


La señora MUÑOZ (Presidenta).- A continuación, corresponde tratar el proyecto de ley, iniciado en moción de los Senadores señor Girardi, señora Goic y señores Chahuán y Quinteros, en primer trámite constitucional, que promueve el acceso al agua potable, con informe de la Comisión de Salud.
--Los antecedentes sobre el proyecto (12.512-11) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican:
Proyecto de ley (moción de los Senadores señor Girardi, señora Goic y señores Chahuán y Quinteros):
En primer trámite: sesión 7ª, en 3 de abril de 2019 (se da cuenta).
Informe de Comisión:
Salud: sesión 16ª, en 14 de mayo de 2019.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Tiene la palabra el señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- El objetivo principal del proyecto es complementar las medidas que ha adoptado el Estado en orden a asegurar el acceso al agua para el consumo y el saneamiento, por la vía de imponer a quienes proporcionan el servicio la obligación de entregar este recurso a la población en cantidad y calidad adecuadas.
La Comisión de Salud discutió la iniciativa solamente en general, y aprobó la idea de legislar por la unanimidad de sus miembros, Senadores señoras Goic y Van Rysselberghe, y señores Chahuán, Girardi y Quinteros.
El texto que se propone aprobar en general se transcribe en las páginas 4 y 5 del primer informe de la Comisión de Salud y en el boletín comparado que Sus Señorías tienen a su disposición en la plataforma de esta sesión y que también ha sido remitido por correo electrónico a todas las señoras y los señores Senadores.
Es todo, señora Presidenta.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Gracias, señor Secretario.
En discusión general el proyecto.
Ofrezco la palabra al Presidente de la Comisión de Salud o a sus autores.
Tiene la palabra el Senador Chahuán.


El señor CHAHUÁN.- Señora Presidenta, Honorable Sala, este proyecto, que trabajamos transversalmente en la Comisión de Salud, donde se aprobó en general, busca garantizar y promover el derecho al agua potable.
Se originó en una moción de los Honorables Senadores señor Guido Girardi, señora Carolina Goic, y señores Francisco Chahuán y Rabindranath Quinteros.
Fundamentalmente, tiene por objeto complementar las medidas que ha adoptado el Estado en orden a asegurar el acceso al agua para el consumo y el saneamiento, por la vía de imponer a quienes proporcionan el servicio obligaciones que aseguren su entrega a la población en cantidad y calidad adecuadas, fortaleciendo así niveles de vida y de salud seguros y congruentes con la condición de derecho humano que evidencia el acceso al agua.
El agua es un elemento esencial para el desarrollo de la vida en el planeta, la cual cubre el 70 por ciento de la superficie de la Tierra, pero solo un 2,5 por ciento corresponde a agua fresca y apenas un 0,62 por ciento es apta para el consumo humano, agrícola e industrial. Por tanto, es un recurso muy escaso cuya asignación, utilización, explotación y distribución no han sido justas ni eficientes.
Para asegurar el acceso al agua para consumo humano como garantía de supervivencia y de salud adecuada es preciso tomar nuevas medidas que vengan a sumarse a las implantadas por las leyes N°s. 20.606, sobre Composición Nutricional de los Alimentos; N° 20.670, Elige Vivir Sano, y N° 20.869, sobre Publicidad de los Alimentos.
La Comisión de Salud aprobó en general el proyecto de ley por la unanimidad de sus miembros, Senadores señoras Goic y Van Rysselberghe y señores Girardi, Quinteros y quien habla.
El artículo 1 introduce enmiendas en la Ley General de Servicios Sanitarios, como la incorporación de un artículo 11 bis, nuevo, que señala: "Las concesionarias de distribución de agua potable estarán obligadas a instalar bebederos de agua en todas las plazas y paseos ubicados dentro de su área concesional".
El artículo 2 inserta un artículo 103 bis, nuevo, en el Código Sanitario, que establece: "Los locales destinados a la venta de alimentos para su consumo dentro del establecimiento o al paso deberán poner a disposición de su clientes, sin previo requerimiento, agua potable en cantidad suficiente. La entrega de agua deberá ser gratuita y complementaria a la oferta del establecimiento".
El artículo 3 agrega un inciso a un precepto del Código del Trabajo que indica que "siempre constituirá una medida de higiene y seguridad mínima, el que todo lugar de trabajo cuente con agua potable destinada al consumo humano y saneamiento, de uso individual o colectivo. En aquellas faenas, instalaciones o campamentos de carácter transitorio deberá mantenerse diariamente una cantidad mínima de 100 litros de agua por persona".
El artículo 4 impone una obligación para los establecimientos educacionales, los que deberán asegurar el acceso al agua potable destinada al consumo humano mediante la instalación de bebederos en los patios donde se recreen los menores y donde se desarrollen actividades físicas.
Por último, el artículo 5 regula los bebederos públicos de agua.
En este contexto, Presidenta, la idea es aprobar en general el proyecto para que vuelva a la Comisión de Salud y establecer un diálogo con el Ejecutivo para el tratamiento particular de las normas.
Por supuesto, llamo a los señores Senadores a votarlo favorablemente en general, ya que dice relación particularmente con el derecho humano al acceso del agua potable, de modo que vuelva a la Comisión para que sea trabajado con el Ministerio de Obras Públicas y el resto de los Ministerios correspondientes.
Gracias, Presidenta.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- A usted, Senador Chahuán.
Ofrezco la palabra al Senador Rabindranath Quinteros.
Tiene tres minutos, que pueden ser cinco si quiere sumar los dos asignados a la fundamentación del voto.


El señor QUINTEROS.- Gracias, Presidenta.
Voy a usar todo el tiempo que sea necesario.
El presente proyecto se sustenta en el principio de que el agua es un derecho humano y que la accesibilidad para consumo es necesaria y fundamental para mantener una salud adecuada. Y aunque pueda parecer una cuestión de sentido común, nuestra legislación no garantiza el acceso al agua potable a las personas en el espacio público, en los locales de venta de alimentos y en los lugares de trabajo y/o faenas.
Esta realidad expresa de manera innegable lo que significó la privatización del agua, donde el servicio se entrega solo a quien pueda pagarlo, sin considerar que es un bien público primordial para la vida y la salud de los individuos.
La presente iniciativa establece responsabilidades para las concesionarias de agua potable, en el caso de la provisión de bebederos en espacios públicos, y a los administradores, dueños y/o empleadores de restoranes, obras y faenas.
En todos los casos, la entrega de agua deberá ser gratuita y a costo del propietario o concesionario respectivo.
No obstante, en este proyecto hay algunas omisiones que creo importante señalar.
Una de ellas es que, si bien asegura el acceso a la población que habita en localidades concentradas o ciudades, deja afuera a toda la población rural, cuyo territorio se encuentra fuera de las áreas de concesión de las empresas sanitarias y de aquellas localidades o ciudades pequeñas que son abastecidas a través del sistema de agua potable rural.
En mi región, cuya población rural bordea el 18 por ciento del total, localidades como Río Negro, Hornopirén, Palena, Queilen y Quemchi, por mencionar algunas, quedarían fuera de los beneficios que busca entregar la presente iniciativa.
Otro aspecto a considerar es el indicador establecido en el proyecto en cuanto a garantizar una dotación mínima de 100 litros de agua por persona diarios en faenas y campamentos transitorios. Tal indicador está determinado por la Organización Mundial de la Salud como un valor mínimo necesario para una calidad de vida aceptable y segura.
En el caso de aquellos lugares de trabajo que se encuentran conectados a la red de agua, la disponibilidad de agua en cantidad y calidad es óptima y no habría problema en cumplir con ese estándar. Sin embargo, para las faenas separadas de los campamentos, más que el indicador de los 100 litros, se requiere garantizar que cada trabajador pueda acceder al agua potable para su consumo en cantidad y calidad requerida para su salud. Y eso podrá determinarse según el tipo de labor que realiza.
En relación con los bebederos en escuelas y liceos, el proyecto no explicita quién es el responsable de dicha obligación: si es materia del sostenedor, de la municipalidad respectiva, de los padres y apoderados, o del concesionario de agua potable.
El mencionado no es un tema menor, porque, en el caso de que estas responsabilidades no estén explícitamente indicadas, es común que las instituciones, especialmente las municipales, aludan a la falta de competencias y de recursos, lo que impediría la ejecución y mantención de dichos bebederos.
En términos generales, Presidenta, hay consenso en cuanto a que esta iniciativa apunta correctamente a promover una cultura de vida más saludable en la comunidad. Sin embargo, su articulado requiere mayor precisión, de modo que resulte en una legislación que pueda ser cumplida de manera efectiva.
Voto a favor.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Gracias, Senador Quinteros.
Tiene la palabra el Senador Girardi.


El señor GIRARDI.- Gracias, Presidenta.
Efectivamente, este proyecto es importante. Y además, como estamos en la votación general, se puede perfeccionar. Por eso la idea es que vuelva a la Comisión.
Tenemos un problema en Chile y en el mundo.
Primero, existe evidencia muy sólida en cuanto a que el agua es fundamental para la vida y la salud de las personas y de todos los seres vivos.
Un ser humano está conformado en un 70 por ciento por agua. Por lo tanto, el agua es el principal contenido del ser humano, que se halla limitado, evidentemente, por su estructura física. Pero es ahí donde se desenvuelven todos los procesos metabólicos.
Y, como les digo, hay evidencia muy sólida que señala que el bajo consumo de agua no ayuda a prevenir sino más bien a causar algunas enfermedades: aumenta el riesgo de patologías cardiovasculares, aumenta el riesgo de padecer diabetes, aumenta el riesgo de manifestar cánceres e incluso aumenta los procesos neurodegenerativos.
Las últimas evidencias le asignan un rol central al agua para mantener el estado de salud y poder difundir los tóxicos que se van acumulando en nuestras células producto del metabolismo.
El problema es que en Chile una fracción pequeña de sus habitantes consume la cantidad de agua recomendada por la Organización Mundial de la Salud.
En los sectores de menores ingresos, solo el 20 por ciento consume la cantidad de agua recomendada, y en los sectores de mayores ingresos, con más de doce años de educación, solo el 30 por ciento lo hace.
No hay una cultura de tomar agua.
Un adulto debiera consumir al menos 2 litros de agua diarios. Yo les aseguro que muchos de los que estamos acá, por distintas razones, no lo hacemos. Y es fundamental ingerir esa cantidad.
Además, Chile tiene un privilegio: a diferencia de muchos países latinoamericanos, aquí se puede tomar agua de la llave, que es barata y está disponible y que, evidentemente, tenemos que promover con más fuerza.
Lo digo porque hace algunos días salió un estudio de la Universidad de Chile con relación al agua embotellada, que es más cara y contiene niveles de arsénico diez veces sobre la norma respecto del agua potable de la llave, y también niveles de acidez muy por sobre lo recomendado.
O sea, no hay ninguna razón para no tomar agua en Chile.
Asimismo, existe evidencia muy sólida en cuanto a que el agua desplaza el consumo de otros líquidos. Por ejemplo, en los hogares chilenos el 74 por ciento prefiere comprar bebidas azucaradas. Y está demostrado, como digo, que la presencia de agua disminuye ese consumo y permite una alternativa: usted puede no comprar bebidas azucaradas, pero tiene agua de muy buena calidad. Eso, evidentemente, es muy importante. Además, el agua desincentiva el consumo de alcohol.
Por lo tanto, acá tenemos un fenómeno muy beneficioso, como es la sinergia que se produce por el consumo de agua. El problema es que culturalmente nuestra población no toma agua en cantidad suficiente. Y por eso el proyecto apunta, por ejemplo, a que en restoranes, como ocurre en muchas partes del planeta -y esta fue una iniciativa presentada también por algunos Senadores de la UDI-, se ofrezca agua en forma gratuita. Eso es muy importante. Al mismo tiempo, e igualmente como sucede en muchos otros países, se establece que haya bebederos de agua gratuitos en los colegios y en lugares donde se producen aglomeraciones de personas, como plazas y otros espacios públicos.
A nosotros nos parece que hay que avanzar en garantizar la salud de la población.
A veces la importancia del agua parece como tan de sentido común que se invisibiliza. Y sin agua no se puede vivir. Cuando las personas hacen huelga de hambre, pueden resistir hasta 60 días, siempre que tengan agua; pero, si es una huelga de hambre seca, una persona no sobrevive más de 48 horas en condiciones adecuadas.
Por lo tanto, en Chile, siendo un país, como señalaba, que tiene agua potable de muy buena calidad, superior al agua embotellada, es fundamental avanzar en promover su acceso. De ahí que el proyecto busque garantizar que en restoranes, colegios, lugares de trabajo y plazas se garantice el acceso al agua.
Se le da una señal a la sociedad, para que los chilenos y las chilenas tomemos más agua, al menos 2 litros, porque está demostrado internacionalmente mediante estudios científicos que tomar esa cantidad produce una suerte de saciedad que hace que las personas tengan, entre comillas, menos apetito por tomar alcohol o bebidas gaseosas dulces.
Quiero recordar que Chile está dentro de los países que tienen las mayores prevalencias de obesidad y de consumo de alcohol en jóvenes y niños...
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Dele dos minutos, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Le vamos a activar el micrófono.
El señor GIRARDI.- Entonces, Presidenta, si bien este proyecto se puede perfeccionar, es muy importante que avancemos en tener un ecosistema saludable.
Chile es pionero en el mundo con la ley de etiquetados, que ya se replicó en México y en una veintena de otros países del planeta, siendo considerada una de las normativas más importantes para enfrentar la obesidad.
Creo que también tenemos que ser pioneros, como ya lo estamos siendo en la regulación del tabaco, en la actividad física. Y por eso le quiero pedir al Senador Pizarro que por favor le ponga prioridad a un proyecto muy transversal que establece una hora diaria de actividad física para los niños y niñas de nuestro país. Hay evidencia de que resulta fundamental para el desarrollo intelectual, para la salud.
Por último, quisiera agregar que el acceso al agua es parte de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud.
Como he dicho, hay que perfeccionar la iniciativa, pero es un gran avance para los derechos de las personas y para tener una mejor calidad de vida a futuro.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Gracias, Senador Girardi.
Tiene la palabra la Senadora Isabel Allende.


La señora ALLENDE.- Gracias, Presidenta.
Sin lugar a dudas, como aquí se ha expresado, este es un proyecto que representa un avance y, en ese sentido, lo vamos a apoyar, pero, claramente, hay que revisarlo con mayor detenimiento.
Lo primero que quisiera expresar, Presidenta, es que lamento que una vez más hayamos sufrido un revés en la petición de reconocer el derecho al agua como un derecho humano. Chile... (falla de audio en transmisión telemática)... en diversos tratados internacionales. Por desgracia, no hemos logrado que el agua, como derecho humano, por lo menos tenga rango constitucional y sea obligación del Estado garantizarla. Me parece lamentable que ni siquiera hayamos podido hacer eso.
Espero que en el nuevo proceso constituyente el agua esté al menos garantizada como un derecho humano. Es más, en esta situación de sequía nosotros propusimos un proyecto de acuerdo, apoyado ampliamente, para que el Gobierno tomara cartas y revirtiera la resolución de la Seremía de Salud de Valparaíso, que duró apenas una semana, de entregar 100 litros de agua en lugar de 50, en condiciones de pandemia, cuando le estamos pidiendo a la gente que se lave las manos, que lave su ropa, que tome una serie de medidas. Lamentablemente, no la logramos revertir, a pesar de que aquella es la cifra que entrega la propia Organización Mundial de la Salud. Aquí hay una deuda del Gobierno y creo que no se ha hecho caso.
Lo otro que quisiera señalar, Presidenta, es que, si bien este proyecto es un avance, claramente no se hace cargo de las realidades rurales. Está enfocado más bien en las áreas urbanas de mayor concentración de población, en las plazas, en los colegios, en los lugares de trabajo. Y bien que así sea, pero, obviamente, esa no es la realidad rural. En mi caso, que represento a la Región de Valparaíso, recibo permanentemente testimonios de nuestros alcaldes, como los de Petorca, Quillota, La Ligua, Cabildo y tantos otras comunas donde existe escasez hídrica, donde realmente se ha sufrido un severo estrés, y donde tenemos muchas localidades en que la gente no accede al agua y solamente lo logra a través de camiones aljibe, que al menos entregan la cantidad que señala la Organización Mundial de la Salud.
Nuevamente, es otra tarea pendiente.
Es doloroso pensar, entonces, que ni siquiera se alcanza a abastecer a nuestras localidades rurales. Por supuesto, están rodeadas de plantaciones de monocultivo de uso intensivo del agua. ¡Otra de las contradicciones que tenemos!
Pero, más allá de esas diferencias, aquí lo que importa es que, a lo menos, como decíamos, en los trabajos, en las escuelas, en las plazas se incorpore el acceso al agua potable, que es sana y es vida.
Pero estas obligaciones tenemos que verlas muy bien. Yo espero que sean de cargo de las empresas sanitarias, que me imagino que no estarán muy contentas; sin embargo, no se las podemos cargar, evidentemente, a los municipios. Y espero que así sea.
Son señales.
A mí me gustaría ver bebederos en las plazas de Petorca, La Ligua, San Felipe, Los Andes, Cabildo y de cualquiera de las localidades nuestras afectadas hoy por la sequía. Sería una señal importante para las personas y, sobre todo, para aquellas a las cuales les ha afectado más el cambio climático, que por supuesto son las más vulnerables.
Entonces, está bien que se adopten medidas de ese tipo, pero son insuficientes.
Alguna vez abordaremos el tema de fondo, que tiene que ver con el mercado del agua, con la gestión del agua y cómo, siendo un bien nacional de uso público, no toda la población tiene acceso a ella. Ni siquiera está garantizada para el consumo humano.
Hay que revisar algunos temas con más cuidado. Desde luego, los de seguridad e higiene. Lo que dice el articulado es muy débil. En tiempos de pandemia, debemos tener extremado cuidado con la estructura pública; evitar cualquier contagio. Al instalarse estos bebederos, el consumidor no puede tener, por supuesto, ningún contacto con la superficie, y tendrían que ser automáticamente desinfectados después de su uso. Si esto no se hace así, claramente corremos el riesgo de que se generen brotes infecciosos, que es lo que menos queremos buscar en espacios públicos.
Es importante, entonces, que se especifique mejor la fiscalización y la sanción en el caso de no cumplimiento de la normativa. Eso podría quedar a cargo del municipio o de las seremías de la región, lo cual, por supuesto, implica el patrocinio del Ejecutivo, que esperamos que esté disponible.
Es importante darles un mayor rol a los municipios. Son las primeras instituciones a las que la gente acude cuando no hay agua. Como ya dije, hemos recibido en la Comisión de Recursos Hídricos denuncias de alcaldes que tienen a su población sin agua. Sin ir más lejos, en El Boco, Quillota, hay cerca de diez localidades y más de 3 mil personas que no tienen acceso al agua. Y eso, Presidenta, se hace cada vez más inaceptable.
Yo voy a votar a favor...
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Dele dos minutos a la Senadora, por favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Ahí está abierto el micrófono.
La señora ALLENDE.- El proyecto, como digo, es un avance, pero resulta completamente insuficiente. ¿Es una buena señal? Sí. ¿Que ayuda a los sectores más bien urbanos? Sí. ¿Que tenemos que perfeccionarlo? Sí. Pero alguna vez, Presidenta, reitero, tendremos que ir al tema de fondo: cómo es el actual modelo del agua; qué ocurre con el agua, y cómo es posible que sigamos aceptando un modelo que deja a muchas localidades del ámbito rural sin acceso al agua potable, que es vida.
Por eso, señora Presidenta, considero que este proyecto es un avance, aunque hay que revisarlo más.
Voy a votarlo a favor, pero siempre nos queda el tema de fondo ya mencionado.
Muchas gracias.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Tiene la palabra el Senador señor García-Huidobro.


El señor GARCÍA-HUIDOBRO.- Muchas gracias, señora Presidenta.
En primer lugar, quiero manifestar mi preocupación porque el proyecto correspondiente al boletín 11.606-11, de fecha 2 de enero de 2018, que obliga a los establecimientos de expendio de bebidas y comidas a ofrecer agua potable gratuita a sus clientes, fue aprobado por unanimidad en la Comisión de Salud y es exactamente igual al que estamos discutiendo hoy día.
Ese proyecto lo presentamos, como bien dije, en enero del año 2018, junto con el Senador Coloma, el actual Ministro de Minería y ex Senador, don Baldo Prokurica, y las Senadoras Van Rysselberghe y Von Baer, y dice lo mismo que el que se está presentando en el día de hoy.
Y eso es complejo, señora Presidenta, porque lo que debiéramos haber visto primero es el proyecto nuestro que dice exactamente lo mismo que el que nos ocupa.
Y lo digo porque me parece muy importante lo que ocurre en muchos países.
Ustedes pueden ver que en Europa, en Estados Unidos, que cuando una persona se sienta a la mesa lo primero que le ponen es un jarro de agua con hielo. ¿Por qué lo hacen? Justamente para incentivar una mejor calidad de vida. ¿Pero qué es lo que ocurre en Chile? Lo primero que un mozo pregunta es "qué va a tomar" y eso significa un incentivo inmediato para consumir bebidas alcohólicas o con azúcar.
Entonces, el proyecto al que me referí debiéramos haberlo votado hace tiempo.
Mi primera preocupación es justamente esa.
Y me gustaría una explicación, porque nuestro proyecto ya fue aprobado por unanimidad, pero se está viendo otro que dice exactamente lo mismo y que fue presentado en forma posterior.
Yo creo que en esto es muy importante el tema educacional.
El agua en cualquier establecimiento, en las casas, en todas partes tiene que ser de buena calidad. Y comparto con el Senador Girardi que el agua potable en Chile, excepto en ciertas localidades del norte donde hemos tenido algunos problemas, es de muy buena calidad.
Por lo tanto, el incentivo es fundamental para tener una salud de acuerdo a lo que espera nuestra sociedad.
Pero si desde pequeños a los niños se les incentiva el consumo de bebidas con azúcar y después alcohólicas, sin duda que estaremos trabajando al revés.
Por eso, señora Presidenta, mi primera preocupación es justamente esa. Y lo quiero hacer notar, porque ese no es el fair play que necesitamos en el Senado.
En segundo lugar, me parece imprescindible valorar todo lo que vaya en apoyo a la salud. Y mientras las personas tomen más agua, y agua de buena calidad, tendrán una mejor calidad de vida. Y si eso es así, este tipo de proyectos debiéramos haberlos puesto en tabla hace mucho tiempo.
Es por eso, señora Presidenta, que quería manifestar mi preocupación por el proyecto que, tal como manifestó el Senador Girardi, Senadores de la UDI y de Renovación Nacional, como el entonces Senador Prokurica, presentamos en su momento.
No sé qué motivo hubo para no ponerlo en tabla hasta el día de hoy, en circunstancias de que se trata de un proyecto que se debió haber aprobado inmediatamente y que ya sería ley, pues estoy seguro de que nadie estaría en contra de lo que proponemos.
Por lo tanto, señora Presidenta, quería manifestar mi preocupación por esa situación.
Muchas gracias.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Tiene la palabra el Senador señor Latorre.


El señor LATORRE.- Gracias, Presidenta.
Creo que este es un proyecto acotado que va en la dirección correcta, pero quiero relacionarlo con la cuestión de fondo.
Hace muy pocos días el relator de Naciones Unidas para el derecho humano al agua, Léo Heller, envió un sendo comunicado refiriéndose a la situación chilena a partir de una serie de informaciones que levantan los movimientos sociales chilenos y una serie de personas vinculadas a la lucha por el derecho humano al agua.
Heller dice que los derechos al agua y la salud deben estar por encima de los intereses económicos. El desarrollo de plantaciones de paltas, por ejemplo, en la provincia de Petorca, en la Región de Valparaíso, o de proyectos de energía eléctrica como Alto Maipo, a costa de las garantías fundamentales de la población, transgrede las leyes internacionales sobre derechos humanos.
Esto lo advierte un grupo de expertos de Naciones Unidas, que se suman a Léo Heller, y que le recuerdan al Gobierno de Chile su obligación de garantizar el suministro de agua, destacando la importancia de esta provisión en el marco de la pandemia de COVID-19.
Asimismo, Heller sostiene que las plantaciones de paltas y la producción de electricidad no deben anteponerse a los derechos a la salud y al agua del pueblo chileno, refiriéndose específicamente al proyecto hidroeléctrico Alto Maipo en Santiago y al agronegocio de exportación de paltas en la Región de Valparaíso.
Léo Heller es respaldado por siete expertos más de la ONU en la defensa de estas garantías fundamentales. Dice que el Gobierno chileno no cumple sus obligaciones internacionales en materia de derechos humanos si da prioridad a proyectos de desarrollo económico por encima de los derechos humanos al agua y la salud. Y el Gobierno tiene la obligación de garantizar un abastecimiento de agua suficiente para toda la población.
Respecto a la escasez de agua y la contaminación, plantea que el proyecto hidroeléctrico Alto Maipo en la Cordillera de los Andes, por ejemplo, genera electricidad mediante el desvío de tres principales tributarios del río Maipo a través de 67 kilómetros de túnel. Y Heller dice que eso no solo podría reducir la principal fuente de agua potable de los residentes de Santiago, sino que también agravaría la contaminación del aire en la Capital, dañando el corredor verde de la cuenca del río Maipo, que ha ayudado a compensar la contaminación.
Por otro lado, el mencionado experto añadió que, pese a que el Gobierno ha investigado los daños ambientales, no se ha tomado ninguna medida para garantizar el derecho al agua de la población afectada por este megaproyecto que empezaría a funcionar en diciembre próximo.
Lo respaldan el relator especial sobre el derecho al desarrollo, el relator especial sobre las obligaciones de los derechos humanos y medio ambiente saludable y sostenible, el relator especial sobre el derecho a la alimentación, la relatora especial sobre el derecho a la salud y el grupo de trabajo sobre los derechos humanos y las empresas trasnacionales.
Yo quise relacionar este proyecto que, insisto, es acotado, avanza en la dirección correcta, por lo que lo voy a apoyar. Pero la cuestión de fondo es cómo en Chile garantizamos el derecho humano al agua y a la salud como base de los derechos humanos por encima del interés económico que generan algunos proyectos privados.
Y creo que es inevitable dar esa discusión en la nueva Constitución, a menos de dos meses del plebiscito del 25 de octubre.
Me parece que uno de los temas centrales del proceso constituyente será recuperar democráticamente el agua como un derecho humano, como un bien común en nuestro país.
Voto a favor, señora Presidenta.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Tiene la palabra el Senador señor Durana.


El señor DURANA.- Gracias, Presidenta.
El proyecto de ley se enfoca en una temática fundamental en estos días, dado que garantizar el acceso al agua potable constituye una prioridad del Estado y un aspecto de vital importancia para toda la población.
En esto sigue la línea de la consagración de un derecho humano al agua y garantiza la dotación de bebederos de agua en plazas y paseos, siempre y cuando sea parte de un proceso en el cual las concesionarias, que se encuentran a cargo de su mantención y cuidado de plazas y parques, reconozcan la necesidad de provisionar este servicio básico dentro de una concesión ya constituida.
Por lo tanto, deberán finalmente asumir las condiciones que permitan que esto efectivamente se pueda cumplir, porque si no estaríamos generando implicancias en concesionarios de distribución de agua potable, que obviamente al menos deberían evaluar su participación en lo que respecta a este proyecto.
De la misma forma, constituye una norma positiva el determinar la provisión gratuita de agua, en especial por parte de establecimientos que venden alimentos, lo cual tendrá una adecuada incidencia en la salud de todos los chilenos.
Además, se incorpora dentro del Código del Trabajo, bajo el criterio de una medida de higiene y seguridad mínima, que los lugares de trabajo cuenten con agua potable, estableciendo un período de transición mientras se instala esa provisión de forma permanente.
Finalmente, la instalación de bebederos en los patios donde se recrean los menores que asisten a establecimientos educacionales en sus distintos niveles constituye una medida de urgente aplicación.
El objetivo detrás de la iniciativa es muy loable. Voy a votar a favor, siempre pensando en la obligación que tenemos de adoptar en la Comisión una serie de medidas que deben ser estudiadas en profundidad; porque, finalmente, aquí participan muchos sectores ciudadanos, muchas autoridades, ministerios y áreas que además deberán fiscalizar el cumplimiento de estas obligaciones.
Voto a favor, por la importancia que tiene el agua en la salud humana. Y ojalá que en la discusión en particular seamos capaces finalmente de evaluar todos los antecedentes que debemos tener a la vista para que sea una buena ley.
Gracias, Presidenta.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Gracias, Senador Durana.
Tiene la palabra la Senadora Ximena Órdenes.


La señora ÓRDENES.- Muchas gracias, Presidenta.
Yo quiero valorar esta iniciativa de los Senadores Girardi, Chahuán, Quinteros y de la Senadora Goic.
El agua es un elemento vital. El 70 por ciento de la superficie del planeta está cubierto por agua. No obstante, solo el 2,5 por ciento corresponde a agua dulce; y si somos más rigurosos, menos del 1 por ciento es utilizable para consumo humano, para usos agrícolas o industriales. Claramente, es un elemento vital, pero también es un elemento escaso.
En ese sentido, la importancia de este proyecto radica en que nos permite hablar desde alguna perspectiva respecto del derecho humano al agua, que está reconocido por la Asamblea General de Naciones Unidas desde el año 2010, cuando, entre otras cosas, se reafirma que el agua potable limpia y el saneamiento son esenciales para la realización de todos los derechos humanos.
Y digo esto porque el planeta también se encuentra en un contexto particular. El fenómeno de cambio climático presenta distintas expresiones. Pero yo diría que, más allá del calentamiento global, los problemas del déficit hídrico y la escasez de agua están marcando situaciones bien complejas en distintas latitudes del planeta. Si lo vemos en Chile, por ejemplo, en la Región de Coquimbo, en la comuna de Monte Patria ya se reconoce a los primeros migrantes por el cambio climático, y ello tiene que ver con el fenómeno de sequía.
Por lo tanto, yo comparto lo que han establecido varios colegas: sin duda existe un tema de fondo, y sobre todo en Chile, porque el resultado es que un elemento tan vital como el agua finalmente se privatiza, ya que cuando el Código de Aguas permite el otorgamiento de derechos de agua, lo que ocurre es que aquellos que realizan el proceso terminan siendo propietarios de ese recurso a través de distintos actos administrativos.
Y lo digo porque vivo en una región que posee grandes reservas de agua; pero también debo agregar con tristeza que muchos de esos derechos han sido otorgados a transnacionales, a una suerte de mano invisible que se apropia de un recurso tan vital, y respecto del cual hay que garantizar al acceso de todos y de todas como se plantea acá, reconociendo que es un derecho humano. El fenómeno de los camiones aljibe, hoy día, es un ejemplo de ello. ¡Claro!, hay acceso al agua, pero todavía existen muchas poblaciones y comunas que deben recurrir a estos u otros mecanismos para acceder a este bien tan fundamental para el ciclo de la vida.
Yo creo que esa conversación se va a abrir en un debate cuando iniciemos el proceso constituyente, en el trabajo que se encuentra realizando la Comisión especial de recursos hídricos y el propio Senado en la reforma al Código de Aguas.
Considero que esta iniciativa avanza en el sentido correcto; esta es una votación en general, y, por lo mismo, su texto puede ser perfectible. Pero creo que ya es hora de reconocer el agua como un derecho humano esencial, garantizando con ello su acceso equitativo para todos los habitantes de nuestro país, entendiendo que sea efectivamente considerado en la práctica como un elemento vital.
Así que voto a favor, señora Presidenta.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Gracias, Senadora Órdenes.
Tiene la palabra la Senadora Ximena Rincón.


La señora RINCÓN.- Gracias, Presidenta.
Sin lugar a dudas, esta moción parlamentaria es importante y hay que saludar y felicitar a sus autores. Pero ella da cuenta de un tema más profundo.
Cuando uno analiza la iniciativa y ve que busca que se garanticen los bebederos públicos, que en los lugares donde haya venta de alimentos el agua deba estar disponible para quienes asistan, que se garantice el agua en los lugares de trabajo y en los recintos educacionales, hay que considerar que eso es algo que debiera ser natural y para lo que no se necesitara una ley. Y, obviamente, quienes proponen esta moción parlamentaria lo hacen porque no es así; porque es un bien que siendo esencial, no se encuentra disponible para todos y para todas.
Y yo quiero hacer un punto, Presidenta. Nosotros presentamos una moción que hablaba de un plan nacional de conectividad digital y conectividad sanitaria, porque hay dos hechos que son fundamentales para el desarrollo de las personas hoy día, en el siglo XXI. Uno es la conectividad digital, y producto de la pandemia lo hemos visto; lo discutíamos la semana pasada, a raíz de la licitación del 5G. Y otro es la conectividad sanitaria: más de un millón de hombres y mujeres en nuestro país no tiene agua potable garantizada.
Entonces, ¡claro!, este proyecto de ley es importante, lo vamos a respaldar. Pero lo dramático es que en nuestro país, Presidenta, ¡más de un millón de personas no accede al agua en sus casas!
La Senadora Órdenes lo decía: el tema de los camiones aljibe nos debiera dar vergüenza. Nos debiera dar vergüenza porque hay cientos de miles de personas en nuestro país que dependen de un camión aljibe. Alguien hace un negocio con él; y en lugar de garantizar que contemos con todos los sistemas de agua potable rural o derechamente de agua potable como prioridad en el Presupuesto de la nación, seguimos aportando recursos a los camiones aljibe.
Entonces, la pregunta es: ¿Por qué hemos llegado a una situación en que la ciudadanía nos dijo "¡Basta!"? Por este tipo de cosas; porque hemos permitido que esto ocurra.
Y no es un tema de mercado o Estado, ya que uno puede entender que el Estado le entregue a una concesionaria el tratamiento y la distribución del agua; pero no se puede entender que esto pase a ser un negocio en que más de un millón de personas se queden fuera del sistema, o que se lucre con este bien y no se limite solamente al costo de tratar las aguas y entregarlas a la población.
Ese es el tema sobre el cual debemos preguntarnos: ¿Por qué nos cuesta tanto avanzar en estas materias?
Este proyecto se encuentra detenido desde abril de este año, cuando fue despachado tras su discusión en general por la Comisión. Y, asimismo, está la reforma al Código de Aguas, con el tema del agua como un bien nacional de uso público, y usted misma, Presidenta, cuántas veces ha insistido en estas materias. ¡Qué nos pasa!
Creo que estamos ad portas de tener la última oportunidad como país para realizar un cambio en el modelo de desarrollo que queremos, en que tengamos un modelo de desarrollo económico social sostenible, en que estas cosas sean naturales y no forzadas, en que no necesitemos legislarlas, porque son obvias y evidentes.
Yo celebro a mis colegas por este esfuerzo. Pero creo que estamos demasiado atrasados en lo que la ciudadanía espera de nosotros como sus representantes.
Voto a favor, Presidenta.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Gracias, Senadora Rincón.
Voy a entregar la palabra al Senador Sandoval, y solicito el acuerdo de la Sala para abrir la votación.
¿Habría acuerdo para ello?
El señor GUZMÁN (Secretario General).- La Senadora Von Baer creo que se oponía.
El señor SANDOVAL.- ¡Hay acuerdo, hay acuerdo!
El señor GUZMÁN (Secretario General).- El Senador Coloma también se opone.
El señor SANDOVAL.- ¡Hay acuerdo, Coloma y Von Baer!
La señora MUÑOZ (Presidenta).- ¿Hay acuerdo o no?
No lo hay.
Senador Sandoval, tiene la palabra.


El señor SANDOVAL.- Bien, muchas gracias, Presidenta.
Lamento que en proyectos de esta naturaleza no demos el acuerdo cuando, a pesar de las diferencias que podamos tener, estamos hablando de una necesidad superior.
Además, es una iniciativa que, tímidamente, trata de buscar respuesta a una realidad que está afectando a las personas.
En su texto, como bien se ha señalado acá, se habla precisamente de posibilitar el acceso al agua en plazas, plazoletas y paseos; en todos los lugares de trabajo; en los campamentos, sean permanentes o transitorios, en cantidad suficiente para atender las necesidades de las personas que están allí, y en los establecimientos educacionales.
En el artículo 4 probablemente habrá que hacer una serie de modificaciones durante el análisis en particular, pues se hace mención a ciertos niveles educacionales que desaparecieron en Chile hace harto tiempo. Se refiere a establecimientos de educación "preescolar, primaria, secundaria y media superior", denominaciones que ya no están en la nomenclatura de los niveles educativos actuales de nuestro país.
¡Son bebederos públicos!
Sin duda, vamos a estar absolutamente de acuerdo en aprobar la idea de legislar. Esta iniciativa está en su discusión en general y después va a requerir todos los ajustes que sean necesarios.
Reitero: tímidamente, trata de hacerse cargo de un problema que es mucho más profundo.
Lo señalaba la Senadora Ximena Rincón: "Hemos permitido". Creo que en esta materia todos debemos reconocer una responsabilidad absolutamente política, todos los gobiernos. Como bien se ha dicho, ¿por qué tenemos que legislar para que se realice una acción de esta naturaleza?
Tenemos que reconocer que en muchas cosas hemos sido copartícipes, por acción u omisión, permitiendo que se mantengan algunas situaciones.
La Senadora Ximena Órdenes, representante de mi Región, se refirió al problema del agua ahí para las personas, pese a que tenemos el agua multiplicada de muchas maneras: sólida, líquida, el lago más grande de Chile, entre muchos otros, lagos binacionales, en fin.
¡Esas son las vergüenzas que estamos cargando! Así como en materia de vivienda cargamos el peso de los campamentos, en esta materia están los camiones aljibes o -lo que es peor todavía- la ausencia de agua en poblaciones a las cuales no hemos sido capaces de llevarles el más vital elemento.
Durante años y décadas hemos sido parlamentarios de muchas de esas zonas, y seguimos hoy día con el discurso de denuncia diciendo que ahí no hay agua, que tenemos poblaciones donde hay gente que está limitada en el acceso a ese elemento tan vital.
Yo mismo soy autor de un proyecto de reforma constitucional que busca garantizar precisamente el acceso al agua, y habrá que juntarlo con esta iniciativa, al igual como lo señalaba legítimamente el Senador Alejandro García-Huidobro respecto de la moción (boletín Nº 11.606-11) del 2018 que habla del acceso al agua en los locales de venta de comidas. El proyecto en estudio es un poco más grande, pero igual habrá que fusionarlos. Seguramente, ello será parte de los acuerdos que habrá que tomar.
Debemos reconocer que hay urgencia por avanzar de una manera mucho más proactiva. Tenemos que ver por qué no hemos sido capaces de resolver esta situación. Todavía existen poblaciones con racionamientos, con dificultades, con problemas, en circunstancias de que el acceso al agua debería consagrarse -así lo hemos manifestado todos; yo mismo, reitero, soy autor de uno de los proyectos de reforma constitucional en la materia- como un derecho absolutamente, ¡absolutamente!, esencial.
El Estado tiene que hacer todos los esfuerzos para solucionar aquello.
Muchos hemos sido parlamentarios de regiones que han vivido con este drama durante muchos años, ¡muchos años! Y hemos visto que los gobiernos no han sido capaces de enfrentar el problema de fondo.
Votaré a favor de este proyecto, Presidenta. Creo que, tímidamente, se aproxima al fondo del problema y busca procurar el acceso al agua a toda la población de nuestro país, desde Arica hasta Magallanes. A algunos nos sobra, a otros les falta. Debemos resolver ese problema de fondo.
Pienso que, evidentemente, tendremos que hacernos cargo de ese punto en las próximas discusiones de esta y otras materias.
Voy a votar absolutamente a favor, Presidenta.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Gracias, Senador Sandoval.
Tiene la palabra el Senador Coloma.
El señor COLOMA.- Gracias... (falla de audio en transmisión telemática)...
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Se quedó sin micrófono, Senador.
El señor COLOMA.- ¿Ahí sí?
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Sí.


El señor COLOMA.- Gracias, Presidenta.
Quiero tranquilizar al Senador Sandoval, a mi amigo David. La razón por la cual yo dije "no" -y fue una exageración: coloqué como veinte "o" porque se me trancó el teclado- respecto de la votación tiene un significado muy claro. Y lo quiero decir con mucho respeto. Creo que el planteamiento del Senador García-Huidobro tiene que ser asumido de alguna manera, lo cual no es responsabilidad de la Presidencia, sino de cómo enfrentamos y resolvemos los asuntos en el sistema de procedimiento del Senado.
Simplemente quiero graficarlo, y creo que todos los colegas me van a encontrar razón.
Me parece que este es un tema superrelevante.
Nosotros, el día 2 de enero de 2018, presentamos una moción que obliga a los establecimientos de expendio de comidas y bebidas a ofrecer agua potable gratuita a sus clientes, iniciativa que se remitió a la Comisión de Salud. ¡Eso fue el 2 de enero de 2018! Posteriormente, el 3 de abril de 2019, más de un año después, un proyecto muy similar es presentado por los autores que ya han sido señalados. Ambos ingresaron a la Comisión de Salud.
Lo que a mí no me calza es que en dicha instancia al final se apruebe el proyecto de algunos y no el de otros, en circunstancias de que, según entiendo, entre nosotros tiene que haber una lógica de ir respetando una forma en la presentación de las iniciativas. La otra opción, Presidenta, es tener que pedirle a usted cuarenta y dos veces -y no es la lógica- que se respete una manera de trabajo que es para todos igual.
No tengo ninguna objeción respecto del proyecto en debate, pero deseo hacerle una petición, Presidenta: que la moción que nosotros ingresamos un año antes y que tuvo tramitación en la misma Comisión se pueda ver la próxima semana. Yo no entendería una manera distinta de actuar; de lo contrario, daría la impresión de que algo no cuadra.
No me nace andar buscando que me aprueben una cosa antes que a otros, pero nosotros también hicimos un esfuerzo, particularmente -y quiero destacarlo- el Senador García-Huidobro. Por eso hago uso de la palabra ahora. Fue él quien hizo todo tipo de estudios y el esfuerzo para decir que tenemos que innovar en materia de acceso al agua, mediante una cosa cultural, una medida ciudadana, que en su momento incluso nos criticaron. Creo que es muy razonable instalar culturalmente el tema del agua en restoranes y distintos lugares como una forma de acceder a ella rápidamente.
Entonces, quiero pedirle, Presidenta -no quise que votáramos sin antes decirle esto a usted-, que nos comprometamos para que el proyecto que he señalado, que es de la misma identidad y que fue presentado un año antes, también pueda tener un despacho rápido y así seguir su tramitación.
Esa es la forma en que a uno le gusta hacer las cosas. Si fuera al revés, lo reconocería con la misma hidalguía.
Eso quería manifestar. Por eso me opuse a que se votara esta iniciativa. Si no, me iban a decir que no hice el planteamiento en su momento.
Reitero: no tengo objeción respecto de este proyecto de ley -en todo caso, creo que es mejorable y, en su texto, hay algunas cosas que no comparto y otras que comparto mucho-, pero me parece que la lógica de accionar las iniciativa según se vayan presentando es sana para todos nosotros.
Es todo lo que quería pedir, Presidenta, ante de la votación, lo cual me parece razonable y sereno.
¡Así que, don David, no se ponga nervioso...!


La señora MUÑOZ (Presidenta).- Muy bien.
Me parece atendible lo planteado por el Senador Coloma, lo cual había sido señalado también por el Senador García-Huidobro al inicio.
Creo que hay una situación de origen en la Comisión de Salud, donde no se tramitaron los dos proyectos juntos, no se fusionaron.
Hoy está en curso la tramitación de una iniciativa, la que estamos discutiendo en general.
Una alternativa para resolver el punto sería volver este proyecto a la Comisión, y ahí fusionar ambas iniciativas.
A mí me parece legítimo el reclamo que ha hecho el Senador Coloma, pero aquí hay un proyecto que ya está en tabla y respecto de la cual ya se ha iniciado el debate. Entonces, hay que ver de qué manera se puede ir avanzando para lograr un encuentro de las dos iniciativas.
Tiene la palabra el Senador Girardi.


El señor GIRARDI.- Presidenta, creo que no hubo ninguna mala intención en el procedimiento. Seguramente, no advirtió la Secretaría que había un proyecto anterior.
Yo no tengo ningún problema en acceder a lo solicitado. De hecho, lo hacemos siempre. Ha sido regular el criterio de las Comisiones de fusionar las iniciativas.
Propongo que aprobemos en general este proyecto, que vuelva a la Comisión y que rápidamente aprobemos el otro. Podemos ponerlo en tabla de Fácil Despacho para agilizar su trámite, y luego fusionar las dos iniciativas.
Pienso que no hay ningún ánimo desfavorable en ese sentido. No ha existido de parte de nadie la idea de impedir o limitar que se aborde otro proyecto. Por eso digo que la práctica nuestra ha sido más bien de fusionar todas las iniciativas, y no veo inconveniente en que lo hagamos ahora.
Me parece justa la petición que hacen los Senadores García-Huidobro y Coloma. Yo estaría en la misma postura si fuera al revés.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Tiene la palabra la Senadora Von Baer.


La señora VON BAER.- Gracias, Presidenta.
Pienso que estas dos iniciativas tienen complejidades muy distintas.
El proyecto presentado por el Senador García-Huidobro es bastante simple, pero muy relevante. Significa que cada vez que uno va a un restorán le tienen que poner una jarra con agua sobre la mesa. Eso es todo; no es más que eso.
La iniciativa que ahora estamos discutiendo, en cambio, es mucho más compleja, porque implica un cambio de infraestructura en las plazas, en las calles, en los colegios. Hay ahí un aspecto superrelevante relativo a la infraestructura: no queda claro quién se hará cargo de ello, si es el municipio o las concesionarias. En consecuencia, es un tema mucho más complejo.
Fusionar las iniciativas no creo que sea el camino, precisamente porque el proyecto que estamos debatiendo ahora es complejísimo y va a demorar en su trámite.
Por consiguiente, pido que no se fusionen, sino que se voten indistintamente.
Además, el proyecto que estamos viendo hoy contiene entre sus normas, básicamente, lo que propone el presentado por el Senador Alejandro García-Huidobro. Solicito que veamos esta última iniciativa separadamente, porque es mucho más simple. Así podremos conseguir lo que todos queremos: que se tome más agua y se inhiba tomar otro tipo de bebidas, porque ello es bueno para la salud. Esta medida se usa en muchos países europeos y es muy importante como señal para la población.
Por eso, Presidenta, pido que no se fusionen las iniciativas. Es mejor que la propuesta del Senador García-Huidobro se vea en su propio mérito. En verdad, va a salir mucho más rápido, porque es más simple.
El proyecto que estamos viendo ahora es mucho más complejo. Ya lo plantearon varios Senadores: no queda acá claro quién se hará cargo de los bebedores, cómo va a operar el tema sanitario, quién va a pagar la infraestructura para que existan los bebederos. Porque, para instalarlos, va a tener que ejecutarse una construcción en cada una de las plazas. No queda claro quién los pagará y tampoco quién los mantendrá.
Entonces, es una situación mucho más compleja.
Pido, Presidenta -y también lo voy a plantear en la Comisión de Salud-, que discutamos aparte el proyecto del Senador García-Huidobro, pues insisto en que es mucho más simple de resolver.
Gracias.


La señora MUÑOZ (Presidenta).- Muy bien. Entonces, es mucho más simple la situación.
Tenemos que seguir con la tramitación de este proyecto. Se encuentra en discusión y luego se abrirá la votación. Por su parte, la Comisión de Salud pondrá urgencia en su mérito al proyecto del Senador García-Huidobro. Ese sería el procedimiento.
Yo pensé que era más complejo, que había más puntos en común que fusionar. Pero si ese no es el camino, mucho más simple.
Se continúa con el tratamiento de este proyecto y se le pone urgencia al otro en la propia Comisión de Salud. Aquí hay integrantes de dicho órgano, quienes pueden comprometerse a poner en tabla, con un fácil despacho, la referida iniciativa.
Creo que ese es el camino que hay que seguir.
Senador Chahuán, usted es miembro de la Comisión y podría asumir algún compromiso.
Sigamos, entonces...
El señor CHAHUÁN.- Presidenta.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Tiene la palabra, Senador.


El señor CHAHUÁN.- Presidenta, simplemente quiero señalar que nuestro compromiso es sacar adelante ese proyecto. Para ese efecto, puedo hablar con el resto de los integrantes de la Comisión, con los Senadores Quinteros y Girardi y con la Senadora Goic. Por supuesto, tenemos la mayor disposición para sacar adelante esa iniciativa.
Además, lo que propone está contenido en parte del proyecto en examen.
El Senador García-Huidobro había pedido en reiteradas ocasiones que viéramos ambas iniciativas conjuntamente, pero parece mejor tratarlas por separado, porque comprendo que el proyecto que debatimos hoy es más complejo. Podemos aprobar el otro rápidamente; no hay ninguna dificultad en ese sentido.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Muy bien.
Dejamos en manos de la Comisión que lo ponga sobre tabla.
El señor CHAHUÁN.- Me comprometo a eso.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Senador García-Huidobro, tiene la palabra.


El señor GARCÍA-HUIDOBRO.- Señora Presidenta, lo que pasa es que este proyecto ya está aprobado por la Comisión de Salud, pero no se ha puesto en tabla en la Sala.
Tendría que ser aprobado por la Sala para que vuelva a la Comisión para su discusión en particular, si es que se pretende presentar alguna indicación.
Por tanto, la situación es distinta. Ya está aprobado por la Comisión.
Más que un reclamo, es una inquietud, señora Presidenta, ya que esta iniciativa perfectamente podría haber estado aprobada hace rato, a lo mejor hace un año. Entendamos que no es necesaria la aprobación de la Comisión de Salud, porque ya la aprobó por unanimidad.
Gracias.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Me informa el señor Secretario que la iniciativa está en el lugar 55 de la tabla. Faltó una gestión de los Comités o de los interesados para que se hubiese puesto en un lugar más arriba de la tabla. Es un tema aún más simple.
En definitiva, es una cuestión de gestión de los interesados de no haber ido a los Comités o a la Mesa, cuando correspondía, a pedir que dicho proyecto se agregara entre los primeros lugares de la tabla.
El acuerdo que puedo tomar ahora es mover esta iniciativa desde el número 55 a una ubicación más preferente en la tabla, para poder tratarla en la próxima sesión. Es más simple todavía.
Senador Bianchi, tiene la palabra.


El señor BIANCHI.- Gracias, señora Presidenta.
¡Qué bueno que el tema está resuelto! La cosa era bastante más simple, pues el proyecto ya había sido votado en la Comisión. Me alegro, porque conozco el trabajo del Senador Alejandro García-Huidobro en esta materia y su compromiso. ¡Qué bueno que se vaya a colocar en un lugar preferente de la tabla en los próximos días!
Presidenta, creo que todos y todas hemos hecho algo respecto a intentar que el agua sea considerada un derecho humano. Yo recuerdo que, habiendo asumido recién como Senador, allá por el año 2008, propuse una reforma constitucional para lograr que el agua sea efectivamente un derecho humano.
Ese proyecto estaba planteado de una manera distinta al que aquí se está debatiendo, pues tenía relación un poco con la realidad que se vivía en mi región, donde la empresa distribuidora de agua cortaba el suministro, en caso de que un adulto mayor no pudiera pagar su consumo. ¡Se le cortaba el agua, un elemento vital, de vida! Y mientras no se pagaba, no había absolutamente nada que hacer.
Muchas familias de Punta Arenas, en la Región de Magallanes, se veían en la complejidad de no poder contar con este recurso para la vida humana. Era así de indolente la situación, ¡y es así de indolente aún!
Por lo tanto, me sumo a aprobar este proyecto en general. Y también voy a apoyar la iniciativa del Senador García-Huidobro, porque creo que son avances significativos.
Pero aquí tenemos que ir al tema de fondo, que dice relación en alguna medida con la discusión de la nueva Constitución. Los constituyentes tendrán que estudiar el punto, para que de una buena vez podamos revertir la injusta situación existente, cual es, que hoy día en nuestro país el agua es un negocio. En efecto, al agua no todos pueden acceder. Hay propietarios de derechos de aguas, legítimamente; pero en realidad tales derechos se usan para determinados fines comerciales. Por tanto, lo que debiera ser un derecho humano hoy no lo es.
Alguien preguntaba aquí: "¿Por qué tenemos que estar legislando sobre esto?". Porque, desgraciadamente, tenemos que hacerlo, dado que en nuestro país el agua tiene un valor; el agua implica un tema económico. Por tanto, no todos tienen derecho al acceso al agua para consumo humano. Efectivamente, en muchos locales o lugares rurales este proyecto no va a alcanzar.
Lo que estamos haciendo hoy día es votar la idea de legislar.
Felicito a los autores de la iniciativa, en particular al Senador Girardi, pues lo propuesto va en la misma línea de sus convicciones humanas respeto de los derechos; en este caso, del agua.
Voy a votar favorablemente en general.
Si bien las iniciativas no se van a refundir, estoy contento de que el proyecto del Senador García-Huidobro se pueda colocar en tabla.
Además, Presidenta, creo que es muy necesario avanzar en lo que yo hice por allá por el año 2008, cuando las sanitarias se me tiraron en contra. Pasaron varios años intentando sacar el proyecto, ponerlo en tabla. Después lo dejaban guardado por mucho tiempo, porque efectivamente hubo presiones de las sanitarias.
Yo espero que el suministro de agua potable no sea cortado por las sanitarias, pues constituye un derecho concreto y real para las familias de nuestro país.
Votaré favorablemente este proyecto, Presidenta.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Gracias, Senador Bianchi.
¿Es posible abrir la votación ahora?
¿Hay acuerdo?
Acordado.
En votación.
--(Durante la votación).
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Senador Quinteros, ¿usted había solicitado la palabra por reglamento?
El señor QUINTEROS.- Señora Presidenta, había pedido la palabra por el tema anterior. Estábamos en la votación de un proyecto y la otra iniciativa era totalmente diferente. Pero ya quedó aclarado eso.
Y también quería adelantar mi voto, que es a favor de este proyecto.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Está abierta la votación.
Vota a favor el Senador Quinteros.
La Senadora Sabat también está pidiendo votar.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- El Senador señor Quinteros vota a favor.
Senadora señora Sabat, ¿cómo vota?
La señora SABAT.- A favor, Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Los Senadores Insulza y Pizarro también piden votar.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Senador señor Insulza, ¿cómo vota?
El señor INSULZA.- Voto a favor, Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
El Senador señor Insulza vota a favor.
Senador señor Pizarro, ¿cómo vota?


El señor PIZARRO.- Señora Presidenta, muy breve.
Voy a votar a favor la idea de legislar.
Efectivamente, el proyecto es acotado, tiene artículos que se refieren a materias distintas, desde obligaciones que se les estarían entregando a las sanitarias hasta los buenos deseos de atención en restoranes o lugares de consumo de comidas, donde se establece la obligación de colocar agua de la llave, como decimos en buen chileno. Eso se hace en muchísimas partes del mundo y yo creo que sin necesidad de ley, más bien por costumbre y por entender que lo lógico y natural es que cualquiera que desee tomar agua potable pueda tener acceso a ella.
Ahora, la iniciativa tiene otras implicancias, sin duda, y yo espero que en la discusión en particular podamos clarificar bien cuáles van a ser las obligaciones, quiénes las van a asumir, qué rol jugarán los municipios. Por ejemplo, se plantea una muy buena idea: que en las plazas públicas puedan existir bebederos o fuentes de agua, o acceso al agua. En este sentido, se establece una obligación a las empresas que tienen concesiones en determinados lugares. Pero hay que determinar bien cómo se va a garantizar eso, porque en algunos casos, en nuestras regiones, donde el agua es sumamente escasa, aunque haya concesión de agua, ni siquiera está garantizada actualmente la cantidad de agua necesaria para el consumo humano, y en algunas partes obviamente que incluso se tiene que racionar y moderar el consumo de agua.
Entonces, creo que ahí hay un debate un poquito mayor.
Me llama la atención sí que se establezca lo mismo para los establecimientos educacionales, porque es de Perogrullo. Creo que debería ser parte de las exigencias de construcción de cualquier establecimiento educacional que estén los recintos sanitarios habilitados, el acceso al agua habilitado, porque, si no, no puede funcionar; es una norma sanitaria. No tengo claro cómo se coordina eso, cómo se regula o se complementa con lo que ya pueda existir.
Pero, sin duda, son buenas todas las señales que se puedan entregar para ir ampliando el concepto de que el agua es un derecho humano, cuyo acceso se debe garantizar a todas las personas, obviamente que de acuerdo con las condiciones propias existentes en cada lugar.
Y eso es algo que, en la discusión en particular del proyecto, se tendrá que abordar, porque también a veces tenemos la mala costumbre de aprobar ideas que son muy buenas, pero que después cuesta mucho implementar, o no se implementan, y despertamos expectativas que llevan con posterioridad a la gente a reclamarnos porque se le ofrece algo que luego no podemos cumplir.
Voto a favor, Presidenta.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
El Senador señor Pizarro vota a favor.
Vamos a consultar a quienes solicitaron adelantar su voto, en el orden que está en el chat, sin fundamentar.
Senador señor De Urresti, ¿cómo vota?
El señor DE URRESTI.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Bianchi, ¿cómo vota?
El señor BIANCHI.- A favor, estimado Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
El Senador señor Insulza ya votó.
Senador señor Prohens, ¿cómo vota?
El señor PROHENS.- A favor, Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Letelier, ¿cómo vota?
El señor LETELIER.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Ossandón, ¿cómo vota?
El señor OSSANDÓN.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Quintana, ¿cómo vota?
El señor QUINTANA.- Voto a favor, Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor García Ruminot, ¿cómo vota?
El señor GARCÍA.- Voto a favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Guillier, ¿cómo vota?
El señor GUILLIER.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senadora señora Aravena, ¿cómo vota?
La señora ARAVENA.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senadora señora Rincón, ¿cómo vota?
La señora RINCÓN.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Castro, ¿cómo vota?
El señor CASTRO.- A favor, Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Chahuán, ¿cómo vota?
Senador señor Coloma, ¿cómo vota?
El señor COLOMA.- En general, a favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Durana, ¿cómo vota?
El señor DURANA.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senadora señora Ebensperger, ¿cómo vota?


La señora EBENSPERGER.- Voy a fundamentar brevemente mi voto.
Yo me voy a abstener en este proyecto, no obstante estar de acuerdo con la idea de legislar. Creo que es importante, que en términos generales va por la línea correcta, sin embargo, tiene muchas cosas que corregir en su estudio en particular, y espero que ello se logre. Creo que así se hará.
No obstante, ha habido otros proyectos en los que de repente se pierde el espíritu, Presidenta, de lo que es la votación en general, y cuando uno no termina conforme con como llega un proyecto en particular, son los propios colegas los que empiezan a enrostrarles que han cambiado el voto a algunos Senadores que aprobaron en general a favor un proyecto y que luego no están de acuerdo con como quedó en particular.
Así que al no estar muchos temas claramente resueltos y, como también decía otro Senador que me antecedió en la palabra, para no crear falsas expectativas, me voy a abstener, esperando que el proyecto llegue en particular con la solución a esos vacíos, porque en términos generales si ello ocurre será un muy buen proyecto.
Me abstengo.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- La Senadora señora Ebensperger se abstiene.
Ha solicitado adelantar su voto, sin fundamentar, el Senador señor Huenchumilla.
Senador señor Huenchumilla, ¿cómo vota?
El señor HUENCHUMILLA.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias, Senador.
Vota a favor.
Senador señor Elizalde, ¿cómo vota?
El señor ELIZALDE.- Voto a favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Galilea, ¿cómo vota?
Senador señor García-Huidobro, ¿cómo vota?
El señor GARCÍA-HUIDOBRO.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Girardi, ¿cómo vota?
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Está sin micrófono.
El señor GIRARDI.- A favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senadora señora Goic, ¿cómo vota?
Senador señor Harboe, ¿cómo vota?
Senador señor Kast, ¿cómo vota?
El señor KAST.- A favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Vota a favor.
Senador señor Lagos, ¿cómo vota?
Senador señor Latorre, ¿cómo vota?
El señor LATORRE.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Vota a favor.
Senador señor Montes, ¿cómo vota?
Senador señor Moreira, ¿cómo vota?
Senador señor Navarro, ¿cómo vota?


El señor NAVARRO.- ¿Aló?
Ahí sí.
Voy a fundamentar, señor Secretario.
Este, al parecer, es un proyecto simple. Podría derivar en el proyecto de "la jarra de agua" o en "el bebedero de agua". Sin embargo, refleja un tema muy profundo, como aquí ha sido señalado.
Recuerdo que mi abuela siempre decía: "A nadie se le niega un vaso de agua". Pero esta realidad está cambiando progresivamente por el precio del agua, porque ahora hay que pagar el saneamiento y el agua cada día es más cara.
La gente en Chile no bebe agua. Un sector muy importante ha optado por el agua mineral. Sin embargo, como señaló el Senador Girardi, un estudio del Departamento de Geología y del Centro de Excelencia en Geotermia de los Andes, de la Universidad de Chile, detectó que en diez marcas había arsénico sobre la norma chilena, sobre la norma de la Organización Mundial de la Salud y también sobre la norma de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos.
Por tanto, tenemos un problema de opción de los chilenos, pues no están tomando agua de la llave cuando sí lo pueden hacer.
Pero, Presidenta, el problema no es solo de poner una jarra de agua en los restoranes. Aquí hay un problema con el uso del agua.
Santiago tiene su agua amenazada por el proyecto hidroeléctrico Alto Maipo. En estos momentos hay una protesta en el Alto Maipo en contra de este proyecto, que dejará sin agua a Santiago, como nos pasó en Petorca con los paltos.
Hay una situación a la cual no hacemos caso.
Decimos que queremos proteger el agua, discutimos si ponemos agua en una mesa de restorán, sin embargo, están utilizando el agua de Santiago y la dejarán sin agua, como ya ha ocurrido en varias oportunidades, porque Aguas Andinas ha sido incapaz de garantizar el uso del agua potable para la Región Metropolitana, con 7 millones de habitantes.
Entonces, quiero señalar que hay una definición de fondo. ¿Utilizaremos el agua para proyectos hidroeléctricos como Alto Maipo y dejaremos a la Región Metropolitana, creciente megalópolis de 7 millones de habitantes, sin agua, o nos preocuparemos de declarar el agua como un bien nacional de uso público?
El 20 de marzo votamos en la misma Sala del Senado, por 24 votos a favor y 12 en contra, que el agua pasara a ser un bien nacional de uso público, pero se perdió el proyecto. O sea, no todos estamos de acuerdo en que efectivamente exista la posibilidad de disfrutar de este bien nacional de uso público, que espero recuperemos con la Nueva Constitución.
Y la carretera hídrica -18 mil millones de dólares, mil kilómetros- amenaza a ocho ríos del Alto Biobío y al recurso hídrico a lo largo de todo Chile.
¡Seamos francos! Aquí se votará a favor. Este es un proyecto simple. Pero cuando tuvimos que pronunciarnos acerca de la esencia respecto de que el agua fuera un bien nacional de uso público, la Derecha, neoliberal, votó en contra, y no hubo reforma...
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Dele dos minutos, Secretario, por favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Le vamos a activar el micrófono.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Active el micrófono, Senador.
El señor NAVARRO.- ¿Aló?
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Sí, ahí se escucha.
El señor NAVARRO.- Estamos con dificultades, señora Presidenta. VTR tiene muchos problemas en Penco, Región del Biobío.
Entonces, señalaba que la definición es de fondo. La Sala del Senado votó si convertíamos al agua en un bien nacional de uso público y perdimos esa votación: 24 a 12.
Entonces, hoy día todos dicen: "Votaré a favor de que haya agua en jarras en un restorán o bebederos en una escuela". Pero el tema de fondo, el cuidado se expresa en la tolerancia a un proyecto destructor para la Región Metropolitana, como la hidroeléctrica de Alto Maipo. Y en esas circunstancias, señora Presidenta, este proyecto nos abre un debate.
Todos queremos que el agua esté a disposición de todos, pero primero hay que preservarla y Chile no lo está haciendo. En el mayor momento de sequía, histórico, Alto Maipo sigue en faenas y se encuentra en un 85 por ciento de avance.
Por tanto, hay una grave incoherencia entre un país que dice que padece una sequía histórica, con un Presidente que llama a cuidar el agua para preservarla para el consumo humano, y la realización de proyectos de esta envergadura ahí, al lado de 7 millones de habitantes, en la cuenca del río Maipo, en Alto Maipo, lo que yo lamento profundamente.
Creo que las definiciones las vamos a tomar dentro de la Nueva Constitución. Y me parece que no es tarde, vamos a avanzar.
Voto a favor de este proyecto, pues nos permite apuntar a los temas de fondo y valorizar mucho más el agua potable, tan escasa, tan cara hoy día en Chile.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Gracias, Senador Navarro.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
El Senador señor Navarro vota a favor.
Senadora señora Órdenes, ¿cómo vota?
La señora ÓRDENES.- Voto a favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senadora señora Provoste, ¿cómo vota?
La señora PROVOSTE.- Voto a favor.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Pugh, ¿cómo vota?
El señor PUGH.- Me abstengo, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- El Senador señor Pugh se abstiene.
Senador señor Sandoval, ¿cómo vota?
El señor SANDOVAL.- Voto a favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Soria, ¿cómo vota?
El señor SORIA.- Voto a favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senadora señora Van Rysselberghe, ¿cómo vota?
Senadora señora Von Baer, ¿cómo vota?


La señora VON BAER.- Señor Secretario, voy a fundamentar mi voto.
Primero, quisiera llamar la atención respecto de lo señalado por el Senador Girardi.
Él planteó que en Chile podemos abrir la llave del agua y beber de ella sin ningún problema. Sin embargo, siempre criticamos mucho el sistema de concesiones. Y la pregunta que nos debemos hacer es por qué en nuestro país existe la posibilidad de abrir la llave y obtener agua limpia que se puede tomar directamente, que incluso es de mucho mejor calidad que varias de las aguas embotelladas.
Creo que eso hay que ponerlo sobre la mesa sin temor de lo que ha significado este sistema para la calidad del agua, más allá de todos los desafíos que todavía tenemos por delante.
El hecho de que nuestro país posea la calidad del agua que se reconoce actualmente se relaciona con el sistema que hemos implementado entre todos, porque esto ha sido también herencia de gobiernos de Centroizquierda. Y me parece que hay que decirlo. Creo que no es un valor menor que en un país como el nuestro, donde no necesariamente en todas partes se dispone de flujo de agua constante y abundante, no tengamos ningún problema con la calidad del agua. Es un valor que hay que cuidar, ya que es muy relevante.
Es muy relevante también todo el sistema de tratamiento de aguas servidas, que significa una mejora para los sistemas de agua de ríos y de lagos.
Existe un desafío pendiente en lo que respecta a los aliviaderos de tormentas que sufrimos acá, en el sur, especialmente en la Región de Los Lagos, y en lo que eso significa en nuestro sistema y en lo limpio que son nuestros lagos.
Ese es el desafío que tenemos por delante.
También está el desafío de llegar a todas partes de Chile con agua.
Ahora bien, en cuanto a este proyecto en particular, señora Presidenta, debo señalar que tengo las mismas aprensiones que la Senadora Luz Ebensperger. Me parece que está bien inspirado, pero en la discusión en particular vamos a tener que ver con mucho detalle no solo cómo se implementa sobre todo el sistema de bebederos. Creo que ahí tenemos un desafío más o menos importante; no basta con la manera en que está puesto simplemente en esta iniciativa, por lo que la forma como se resuelva esto no es menor.
Por lo tanto, voy a esperar a ver cómo zanjamos este asunto en la Comisión de Salud, y en esta etapa de la tramitación me voy a abstener.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- La Senadora señora Von Baer se abstiene.
Senadora señora Allende, ¿cómo vota?
La señora ALLENDE.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
Senador señor Alvarado, ¿cómo vota?


El señor ALVARADO.- Yo me voy a abstener, señor Secretario.
Ello, básicamente porque me parece que el proyecto en su inspiración tiene un sentido y una connotación correctos; sin embargo, se establecen una serie de obligaciones o de cargas en que hay que definir de mejor manera cómo sacarlas adelante, y no simplemente con una declaración de carácter general, en la cual todos coincidimos.
En tal sentido, confío en que mediante el esfuerzo que se haga en la Comisión técnica se pueda precisar cómo materializar esa idea general y de contexto que tiene este proyecto, que comparto.
Pero por la forma en que viene actualmente el articulado, me abstengo, a la espera de las precisiones que emanen del trabajo de la Comisión de Salud.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
El Senador señor Alvarado se abstiene.
Senador señor Araya, ¿cómo vota?
Senador señor Chahuán, ¿cómo vota?
El señor CHAHUÁN.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
La Presidenta, Senadora señora Muñoz, ¿cómo vota?
La señora MUÑOZ (Presidenta).- A favor, Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Vota a favor.
¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador aún no ha emitido su voto?
Senadora señora Goic, ¿cómo vota?
La señora GOIC.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
¿Alguna señora Senadora o señor Senador aún no ha emitido su voto?
Senador señor Araya.
Senador señor Galilea.
Senador señor Harboe.
Senador señor Lagos, ¿cómo vota?
El señor LAGOS.- A favor, señor Secretario.
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Gracias.
Senador señor Montes.
Senador señor Moreira.
Senadora señora Van Rysselberghe.
Si lo estima pertinente, señora Presidenta, puede dar por cerrada la votación.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Terminada la votación.
--Se aprueba en general el proyecto (33 votos a favor y 4 abstenciones).
Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Aravena, Goic, Muñoz, Órdenes, Provoste, Rincón y Sabat y los señores Bianchi, Castro, Chahuán, Coloma, De Urresti, Durana, Elizalde, García, García-Huidobro, Girardi, Guillier, Huenchumilla, Insulza, Kast, Lagos, Latorre, Letelier, Navarro, Ossandón, Pizarro, Prohens, Quintana, Quinteros, Sandoval y Soria.
Se abstuvieron las señoras Ebensperger y Von Baer y los señores Alvarado y Pugh.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- Queda aprobado en general el proyecto, y vuelve a la Comisión de Salud para su discusión particular. De modo que hay que fijar fecha para la presentación de indicaciones.
¿Alguna propuesta de parte de la Presidenta de la Comisión, Senadora Carolina Goic?
La señora GOIC.- Pueden ser dos semanas, señora Presidenta.
La señora MUÑOZ (Presidenta).- ¿Habría acuerdo para ello?
El señor GUZMÁN (Secretario General).- Podría ser el jueves 17 de septiembre, hasta las 12 horas.
La señora GOIC.- Perfecto: ¡justamente antes del Dieciocho...!
La señora MUÑOZ (Presidenta).- ¡Van a estar endieciochadas las indicaciones...!
¿Les parece a Sus Señorías?
Acordado.