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RECHAZO A INSTALACIÓN DE RELLENO SANITARIO EN FUNDO LOS MILLANES DE SAN ANTONIO DE HUELDEN. OFICIOS


El señor QUINTEROS.- Señor Presidente, desde hace tiempo la provincia de Chiloé y, muy especialmente, la comuna de Ancud vienen experimentando serios problemas con la disposición de sus residuos domiciliarios.
Luego de que en marzo del presente año colapsara definitivamente el vertedero ancuditano ubicado en Huicha, y ante el fracaso del proyecto de relleno sanitario provincial para Chiloé que originalmente se construiría en Castro, el Gobierno determinó, de modo unilateral, la instalación de un relleno sanitario provisorio en el Fundo Los Millanes de San Antonio de Huelden, al norte de la ciudad de Ancud.
La comunidad del lugar se opuso desde un principio y se manifestó con fuerza en contra del proyecto.
Lejos de atender sus demandas, se les hizo ver ante la opinión pública como un pequeño grupo que defendía determinados intereses particulares.
Sin embargo, los argumentos para rechazar la instalación del relleno en ese lugar son mucho más profundos.
Don Juan Manuel Huentelicán, coordinador de la mesa territorial indígena Senda Chacao, y la doctora Mariela Núñez Ávila, Directora Ejecutiva de la Fundación Senda Darwin, expusieron hace pocos días y con total claridad un conjunto de antecedentes sobre este tema ante la Comisión de Medio Ambiente del Senado.
En esa presentación dieron cuenta de la vulnerabilidad de los acuíferos subterráneos tanto para consumo humano como para la agricultura; del riesgo al que se sometería el río Huicha, principal fuente de agua permanente para el noreste de Chiloé; de la existencia de áreas de conservación de la naturaleza; del potencial turístico de la zona, cubierta mayoritariamente de bosque nativo, y -no menos importante- de su condición de territorio ancestral para las comunidades originarias del sector.
Hace algunos días me reuní con la comunidad de San Antonio de Huelden, con representantes de la mesa territorial de Chacao y con científicos de Senda Darwin, y juntos recorrimos el terreno en el que está proyectada la instalación de este relleno.
Allí pude constatar que, en efecto, el lugar está cubierto de bosque nativo y que posee numerosos cursos de agua subterránea, que son afluentes del río Huicha y que incluso contribuyen al abastecimiento de los programas de agua potable rural del sector.
Más de un millar de especies que hoy están en riesgo conviven en el valioso ecosistema existente en San Antonio de Huelden. La comunidad ha acusado reiteradamente falta de información por parte del Gobierno, y recién en los últimos días el Ejecutivo se ha sentado a dialogar con los vecinos y las vecinas. Las explicaciones, sin embargo, no han sido suficientes.
Los estudios científicos existen. Senda Darwin los tiene y los ha hecho públicos para quienes desean conocerlos. El Gobierno, a través del Ministerio de Obras Públicas, insiste en hacer sus propios estudios y sondajes, e incluso ha llegado a la justicia a denunciar a quienes presuntamente han impedido el ingreso de las maquinarias al fundo Los Millanes.
Estamos frente a un problema especialmente complejo. Es cierto: nadie quiere tener un vertedero en el patio trasero de su casa. Y ello obliga a buscar soluciones serias, de largo plazo y coherentes con el cuidado medioambiental y la protección de la salud pública.
Actualmente, Ancud está depositando sus residuos en el relleno de Dalcahue y tiene contrato para ello hasta el 31 de diciembre.
Es evidente que existe premura por resolver este problema, pero esta premura no puede llevar a la autoridad a cometer un error ambiental de la naturaleza y magnitud que implicaría intervenir el ecosistema de San Antonio de Huelden, aunque sea amparado en la existencia de una alerta sanitaria.
El gobernador de Chiloé ha señalado que la instalación del relleno es transitoria y que no se extenderá por más de cinco años. Pero, por resolver una emergencia, no podemos darnos el lujo de provocar un daño irreversible.
Hoy Ancud enfrenta la oportunidad histórica de implementar un nuevo modelo de recolección y tratamiento de los residuos domiciliarios. Existen estudios que demuestran que es perfectamente posible hacer operativo un modelo de recolección selectivo, con separación de los desechos en su origen, vale decir, en el que cada domicilio disponga los residuos orgánicos de los inorgánicos en contenedores diferentes. Ello permitiría hacer un tratamiento diferenciado y mucho más eficiente.
Es sabido que los residuos orgánicos son los que provocan los mayores problemas: se descomponen, generan mal olor, percolan y atraen vectores. Estos desechos, no obstante, pueden ser tratados tanto en forma mecánica como de manera natural a través de la lombricultura para generar compostaje. En tanto, los residuos no orgánicos -ya sea plásticos, vidrios u otros- pueden incorporarse a la cadena de reciclaje y generar un nuevo valor.
Estoy seguro de que de este modo es posible avanzar no solo hacia nuevas formas de tratar la basura doméstica, sino hacia una nueva manera de pensar y comprender nuestra relación con el medio ambiente y generar conciencia respecto de la responsabilidad que tiene la comunidad en la producción y el manejo de su propia basura.
Por cierto, no se trata de un proceso barato. Pero tampoco es barato manejar la basura de la manera en que hoy se hace, y con costos ambientales mucho mayores.
Ancud podría dejar de ser la ciudad emblema del mal manejo de la basura y transformarse en una comuna modelo en el tratamiento sustentable de los residuos.
El punto es que ha faltado voluntad política por parte del Gobierno y ha sobrado improvisación.
No podemos enfrentar los problemas de siglo XXI con soluciones del siglo XX. No se puede planificar una intervención de esta naturaleza sin considerar a las comunidades afectadas, sean estas originarias, de campesinos o pescadores, ni desatender los argumentos científicos de las instituciones que llevan años trabajando en este territorio, como ocurre con Senda Darwin.
Sobre esta base, señor Presidente, solicito que se oficie a la Intendencia de la Región de Los Lagos y al Ministerio de Obras Públicas a fin de que informen sobre los antecedentes técnicos y científico-ambientales que han tenido a la vista para avalar la idea de este relleno. Asimismo, pido que se requiera al Sernatur un informe respecto del valor y potencial turístico del lugar, así como del estado de su declaración de zona de interés turístico, y otro a Conadi, en relación con la condición de territorio ancestral del fundo Los Millanes.
He dicho.
--Se anuncia el envío de los oficios solicitados, en nombre del señor Senador, conforme al Reglamento