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DESIGNACIÓN DE SEÑORES RODRIGO DELAVEAU SWETT Y ARMANDO JARAMILLO LIRA COMO SUPLENTES DE MINISTROS DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL


La señora RINCÓN.- Señor Presidente, no sabía que existía un acuerdo al respecto. Y doy excusas por ello.
Estaba atendiendo a unos dirigentes por otro asunto cuando escuché la intervención del Senador Elizalde. De modo que no puedo menos que emitir mi opinión en la materia.
Y doy mi parecer, pues mi voto no tiene que ver con la calidad de los postulantes a los cargos de Suplentes de Ministros del Tribunal Constitucional. No tengo nada en contra de ellos. Incluso, a uno lo conozco personalmente y al otro académicamente. Dichos candidatos me merecen el mayor de los respetos.
Hace un tiempo, en mi primer período como Senadora, concurrí con mi voto en contra en la designación de miembros del Consejo Directivo del Servicio Electoral.
Pasado el tiempo, en verdad, no me arrepentí de haber votado de esa manera.
Hoy día nuevamente voy a votar en contra: en esta oportunidad, no por la calidad de los currículums de los postulantes propuestos, sino por el testimonio de que habló el Senador Elizalde.
Creo que ha llegado el minuto de realizar la reforma respectiva del Tribunal Constitucional.
Ello es necesario y urgente.
Hace pocos días vimos cómo su Presidente era pisoteado de una manera brutal.
¡No queremos eso para él ni para nadie que integre alguna institución en nuestro país! No merece el trato de que fue objeto, por muy en contra que estemos de su posición acerca de la materia que se debía resolver en esa oportunidad, o de cualquier otra.
El respeto máximo a su manera de pensar es lo que a mi juicio merecen todas las personas: "No estoy de acuerdo con tu forma de pensar, pero daría mi vida por tu derecho a expresarla".
Creo que estamos en un punto límite en la defensa de las instituciones.
Me parece que el Tribunal Constitucional ha llegado a un punto límite en cuanto a la transgresión al respeto por el Congreso Nacional.
Eso es lo que está en juego hoy día cuando seguimos insistiendo en nombrar a miembros, titulares o suplementes, del mencionado Tribunal.
Por ello voto en contra, y -lo reitero- no por la calidad de los candidatos propuestos a esta Sala.