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INCUMPLIMIENTO DE COMPROMISOS GUBERNAMENTALES EN HOSPITAL INTERCULTURAL COMUNITARIO "PU MULEN", DE QUILICAHUÍN. OFICIO


El señor QUINTEROS.- Señor Presidente, en noviembre del año pasado inició su funcionamiento el Hospital Intercultural "Pu Mulen", en la localidad de Quilacahuín, comuna de San Pablo, provincia de Osorno, Región de Los Lagos.
Este nuevo centro asistencial, que remplazó al antiguo Hospital del Perpetuo Socorro de Quilacahuín, posee salas de acogida y farmacia, salas de hospitalización, de visitas a pacientes, de urgencias, box de atención, reanimación y procedimientos de urgencia. Además dispone de un vacunatorio, boxes ginecológico y dental, salas IRA y ERA, laboratorio y sala de rayos X.
La obra tuvo un costo cercano a los 8 mil millones de pesos y su objetivo era el de acercar la atención de salud a los habitantes de los sectores rurales de la comuna, mayoritariamente pertenecientes a los pueblos originarios, y que se estima superan las 8 mil personas.
Para lograr el cumplimiento de esta promesa se propusieron varios ejes de acción.
Uno de ellos tenía que ver con la implementación de un modelo de salud intercultural territorial, que aseguraba la presencia de lawentuchefes -o personas con conocimiento sobre uso de plantas medicinales- y de machis, de modo que los usuarios pudiesen elegir la incorporación de conocimientos de los pueblos ancestrales tanto a su diagnóstico como a su tratamiento.
Otro aspecto considerado era la participación con derecho a voz y voto de un representante de las comunidades originarias en el directorio del centro de salud.
Un tercer elemento, no menos relevante, era el de asegurar servicios de traslado para los usuarios, en su mayoría vecinos de localidades dispersas geográficamente.
La semana recién pasada, en una ronda de conversaciones con integrantes del Consejo de Comunidades Originarias de San Pablo, recibí denuncias sobre el incumplimiento de estos tres compromisos. Vecinos de las localidades de Cofalmo, Pupañimo, Purrucalhue y sus alrededores coincidían en señalar que dichos compromisos fueron quedando de lado con el paso de los meses.
Al día de hoy, no existen prestaciones de medicina alternativa y el servicio de traslado no funciona. En algunos casos, los usuarios deben caminar hasta dos horas para llegar al hospital, porque el transporte público tampoco considera rutas diarias al referido centro de salud.
Las comunidades acusan problemas internos en el hospital, falta de empatía con los usuarios y desapego con las tradiciones de los pueblos originarios.
En la actualidad, dicho recinto hospitalario cuenta con siete médicos, pero los usuarios siguen refiriendo falta de horas médicas, debiendo trasladarse incluso hasta Osorno para ser atendidos.
Adicionalmente, un dictamen emitido por el nuevo Servicio de Salud de Osorno, en marzo de este año, le quitó el derecho a voto al representante de las comunidades originarias en el consejo directivo del centro de salud, dejándolo solo con derecho a voz.
Este hecho constituye un serio atropello a los derechos de los pueblos ancestrales, en tanto invisibiliza y menosprecia a sus representantes, atentando de paso contra el sentido original para el que dicho centro de salud fue construido.
Señor Presidente, un hospital rural no funciona bajo la misma lógica que uno urbano, y menos aún si su propósito era el de ofrecer un modelo con enfoque multicultural, que respete tradiciones y usos de los pueblos originarios.
El rol del Estado es el de prestar asistencia a quienes, por sí solos, no pueden acceder a servicios vitales como la atención en salud.
No va a ser el mercado el que evite que adultos mayores deban caminar por horas bajo la lluvia para realizarse un examen o recibir atención de especialistas.
Es el Estado y no el mercado el que debe hacerse cargo de equilibrar las condiciones para garantizar la atención en salud a las comunidades originarias.
Sobre esa base, y atendiendo a la preocupación y malestar expresado por los vecinos de los sectores rurales de la comuna de San Pablo, solicito -por su intermedio- que se oficie al Ministerio de Salud, a fin de que informe las razones justificadas por las cuales se puso término a la atención multicultural en el Hospital de Quilacahuín, al igual que los argumentos para suprimir el servicio de traslado a los pacientes, y la motivación para quitar el derecho a voto al representante de las comunidades originarias en el consejo directivo de este centro de salud, así como las medidas que se adoptarán para reestablecer los servicios suprimidos.
He dicho, señor Presidente.
--Se anuncia el envío del oficio solicitado, en nombre del señor Senador, conforme al Reglamento.