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CREACIÓN DE SUBSECRETARÍA DE LA NIÑEZ


El señor ZALDÍVAR, don Andrés (Presidente).- Corresponde tratar el proyecto de ley, en primer trámite constitucional, que otorga nuevas atribuciones al Ministerio de Desarrollo Social en materia de niñez y crea la Subsecretaría de la Niñez, dependiente de dicha Cartera, con segundo informe de la Comisión de Gobierno, Descentralización y Regionalización, informe de la Comisión de Hacienda y urgencia calificada de "suma".
--Los antecedentes sobre el proyecto (10.314-06) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican:
Proyecto de ley:
En primer trámite: sesión 55ª, en 29 de septiembre de 2015 (se da cuenta).
Informes de Comisión:
Gobierno, Descentralización y Regionalización: sesión 33ª, en 20 de julio de 2016.
Gobierno, Descentralización y Regionalización (nuevo): sesión 88ª, en 8 de marzo de 2017.
Gobierno, Descentralización y Regionalización (segundo): sesión 24ª, en 20 de junio de 2017.
Hacienda: sesión 24ª, en 20 de junio de 2017.
Discusión:
Sesión 2ª, en 15 de marzo de 2017 (se aprueba en general).
El señor ZALDÍVAR, don Andrés (Presidente).- Tiene la palabra el señor Secretario.
El señor LABBÉ (Secretario General).- Hago presente que este proyecto fue aprobado en general en sesión de 15 de marzo del año en curso.
La Comisión de Gobierno deja constancia, para los efectos reglamentarios, de que los numerales 1), 2), 3), 4), 6), 7) y 8) del Artículo Único y los artículos primero, segundo, tercero, cuarto y quinto transitorios no fueron objeto de indicaciones ni de modificaciones, por lo que tales disposiciones deben darse por aprobadas, salvo que alguna señora Senadora o algún señor Senador, con acuerdo unánime de los presentes, solicite su discusión y votación.
No obstante, cabe señalar que todos los numerales mencionados del Artículo Único y el artículo primero transitorio son normas de rango orgánico constitucional, por lo que requieren el voto conforme de 21 señores Senadores para su aprobación.
Además, el mismo órgano técnico declaró inadmisible la única indicación formulada al proyecto, que buscaba modificar el numeral 5) del Artículo Único.
La Comisión de Hacienda, por su parte, se pronunció acerca de las normas de su competencia: Artículo Único, numerales 2), letras c) y g); 3) y 5), y artículos primero, segundo, cuarto y quinto transitorios, e introdujo una modificación unánime respecto del numeral 5) del Artículo Único.
Cabe recordar que las enmiendas acordadas por unanimidad deben ser votadas sin debate, salvo que alguna señora Senadora o algún señor Senador manifieste su intención de impugnar la proposición de la Comisión respecto de alguna de ellas o existan indicaciones renovadas.
Por tratarse de una norma de carácter orgánico constitucional, la modificación recaída en el numeral 5) también requiere 21 votos favorables para su aprobación.
Sus Señorías tienen a la vista un boletín comparado que transcribe el texto aprobado en general, la enmienda efectuada por la Comisión de Hacienda y el texto como quedaría de aprobarse tal modificación.
El señor ZALDÍVAR, don Andrés (Presidente).- En discusión particular.
Tiene la palabra el Senador señor Quinteros.


El señor QUINTEROS.- Señor Presidente, con fecha 29 de septiembre de 2015, Su Excelencia la señora Presidenta de la República ingresó al Senado el mensaje que dio origen al proyecto que otorga nuevas atribuciones al Ministerio de Desarrollo Social en materia de niñez y crea la Subsecretaría de la Niñez, dependiente de dicha Cartera (boletín Nº 10.314-06).
Hago presente que encontrándose el primer informe de la iniciativa en tabla para ser visto en Sala, el proyecto fue devuelto a la Comisión para un nuevo primer informe, facultándose a dicho órgano técnico para discutir el asunto en general y en particular, en virtud del acuerdo adoptado por los Comités el 2 de agosto de 2016.
Es del caso señalar que en el referido primer informe el proyecto de ley fue aprobado en general por la unanimidad de los miembros presentes de la Comisión, Senadores señor Bianchi, señora Von Baer, señor Zaldívar y quien les habla.
Durante la nueva discusión general y particular del proyecto, concurrieron especialmente invitados a exponer sus puntos de vista las siguientes autoridades, entidades y especialistas en la materia:
-El señor Ministro de Desarrollo Social, don Marcos Barraza.
-La Subsecretaria de Evaluación Social, señora Heidi Berner.
-La Secretaria Ejecutiva del Consejo Nacional de la Infancia, señora María Estela Ortiz.
-Del Bloque por la Infancia (Mesa Temática de Infancia de la Presidencia del Senado): los representantes señoras Nury Gajardo, Delia del Gatto, Nicole Romo, Ximena Calcagni, Alejandra Riveros, Raquel Morales y Paulina Solís y señores Luis Riquelme, Raúl Heck y Jorge Martínez.
-De la Corporación Opción: la socióloga señora Francisca González.
-De la Asociación de Funcionarios del Ministerio de Desarrollo Social, su Presidenta Nacional, señora Delia Arneric, y la abogada señora Alejandra Miranda.
-De la Asociación de Funcionarios del SENAME (AFUSE), la Presidenta, señora Alicia del Basto; el Secretario Nacional, don Christian Araya, y el Director señor Julio Rodríguez.
-De la Asociación Nacional de Trabajadores del SENAME (ANTRASE), el Presidente, señor Walter Arancibia; la asesora jurídica señora Alejandra Miranda y los dirigentes nacionales señora Pamela Ramírez y señor Jorge Borreda.
Todas las exposiciones recibidas fueron debidamente consideradas por los miembros de la Comisión y se contienen en el primer informe que despachó esta en su oportunidad, copia de la cual se encuentra disponible en el Sistema de Información Legislativa (SIL).
Esta iniciativa, que crea la Subsecretaría de la Niñez, es parte de un conjunto de reformas legales que tratarán materias tales como las garantías de derechos de los niños y la Defensoría de los Derechos de la Niñez, donde el primer paso es instaurar una nueva institucionalidad para los menores, estableciendo un rol de rectoría, que ejercerá el Ministerio de Desarrollo Social, sobre los nuevos servicios que asumirán las tareas de promoción y protección de los derechos de los niños.
Asimismo, el proyecto de ley se hace cargo del área de gestión estratégica del sistema y de su articulación a nivel nacional, que tiene como función el diseñar la estrategia nacional para la niñez, denominada "Política Nacional de la Niñez", que establece las prioridades y directrices del sistema.
Es necesario tener en consideración que la institucionalidad existente se basa en el paradigma de la "situación irregular de los niños" y la doctrina tutelar, lo que ha generado que los problemas de los niños se tiendan a explicar a partir de las carencias individuales de los afectados, siendo, en la práctica, un sistema de protección de menores altamente judicializado, en que la Administración solo cumple un rol de prestador de servicios.
En ese contexto, el área de articulación es importante para que la protección de los derechos de la infancia sea integral y universal, tal como lo destacó el Comité de Derechos del Niño de Naciones Unidas. En dicho ámbito, el rol de la Subsecretaría de la Niñez será crucial, tanto por su carácter de secretaría técnica del Comité Interministerial de Desarrollo Social de la Niñez, como por su relación con organismos públicos y privados que presten servicios vinculados a esta área.
Por último, se debe destacar que, de acuerdo al diagnóstico que se ha realizado en esta materia y a las propuestas realizadas por órganos nacionales e internacionales, es indispensable dotar a Chile de una institucionalidad para la infancia que permita situar en el centro de las políticas públicas a dicho sector.
Posteriormente, en la discusión particular, solo fueron objeto de debate los numerales 1) y 3) del artículo primero transitorio, los que finalmente fueron aprobados por la mayoría de los miembros presentes de la Comisión, conforme a las votaciones que se consignan en el informe respectivo.
Es cuanto puedo informar.
El señor ZALDÍVAR, don Andrés (Presidente).- Tiene la palabra el Senador señor Montes.


El señor MONTES.- Señor Presidente, como ya se ha dicho, el objetivo del proyecto es crear, en el Ministerio de Desarrollo Social, la Subsecretaría de la Niñez.
Sus contenidos principales son:
1) Modificaciones a la ley N° 20.530, que crea dicho Ministerio, incluyendo dentro de su objeto la obligación de velar por los derechos del niño.
2) Establecimiento de disposiciones transitorias para la implementación de la Subsecretaría.
3) Divisiones al interior de la Subsecretaría de la Niñez y funciones del Comité Interministerial.
4) Nuevas funciones y atribuciones para el Ministerio de Desarrollo Social:
-Asesorar al Presidente de la República en la promoción y protección integral de los derechos del niño.
-Proponer al Presidente de la República la Política Nacional de la Niñez y su Plan de Acción.
-Administrar, coordinar y supervisar los sistemas de gestión intersectorial que tengan por objetivo la protección integral de los niños (por ejemplo, el Sistema Chile Crece Contigo).
-Impulsar acciones de difusión, capacitación o sensibilización para la promoción y protección integral de los derechos de la niñez.
-Promover el fortalecimiento de la participación de los menores.
-Colaborar en las adaptaciones necesarias para la medición y seguimiento de las condiciones de vida de los niños.
-Desarrollar estudios e investigaciones sobre niñez.
-Colaborar con el Ministerio de Relaciones Exteriores en la elaboración de informes para comités especializados de la ONU y de la OEA.
En cuanto al efecto fiscal del proyecto, el mayor gasto que irrogue la aplicación de la ley durante el primer año presupuestario de su entrada en vigencia, considerando su efecto año completo, será de aproximadamente 1.344 millones de pesos, el cual se financiará con cargo al presupuesto del Ministerio de Desarrollo Social y, en lo que falte, con recursos provenientes de la Partida Tesoro Público.
En relación con el mayor gasto que se derive de la aplicación de las nuevas plantas y dotación de personal que se fijen y del encasillamiento que se practique, incluido en el monto anterior y considerando su efecto año completo, este no podrá exceder de 1.062 millones de pesos.
Los puntos más debatidos o en que hubo más diversidad de opiniones y preocupaciones en la Comisión de Hacienda fueron los siguientes:
-¿Cuáles son las 23 comunas a las que se extiende el programa Chile Crece Contigo para niños hasta 9 años o cómo se definirá cuáles serán?
-¿Existe una evaluación de lo que ocurre cuando tantos ministerios forman parte de un Comité Interministerial como el que se describe para el Desarrollo Social de la Niñez?
-¿Por qué se optó por un sistema basado en una Subsecretaría y no otra fórmula, y lo mismo respecto del Comité Interministerial?
-Lo relativo a la planta y dotación de la Subsecretaría, dado que ello se deja entregado a la regulación de un decreto con fuerza de ley en el artículo primero transitorio.
-Qué está ocurriendo con los niños en la sociedad actual. El proyecto aborda especialmente la dimensión de la protección, pero existe la necesidad de conversar, discutir y obtener respuestas acerca de la realidad más integral de los niños. No se trata solo de la protección, sino también de qué perspectivas y proyectos tienen en la sociedad actual, qué propuestas les hace esta, qué se espera de ellos.
-El rol de los padres, que es muy importante enfatizar en el sistema de garantías y en la Subsecretaría.
-Algunos miembros se preguntaron qué está haciendo el Estado para fortalecer la familia como base de los roles respecto de los niños. No basta lo que haga el Estado; también es importante la acción de la familia y el papel que juegue el Congreso en esta discusión.
-Inquietud en cuanto a si se puede esperar que se cumpla lo proyectado en el Sistema de Garantías y en la Subsecretaría. La preocupación es si esto se va a poder cumplir completamente o no.
-Por último, la relación entre esta Subsecretaría, estos objetivos, esta política y todo lo referido a educación. En definitiva, una parte significativa de su tiempo los niños la pasan vinculados a las políticas públicas a través de la escuela, la cual debería ser un lugar que se preocupara muy integralmente tanto de lo relativo a su protección, en ciertas dimensiones, como de su prevención, promoción y desarrollo, más allá de los objetivos cognitivos y del aprendizaje de conocimientos. Eso está fallando en el sistema educacional. El vínculo entre ambas cosas no está presente, aunque sí implícito en muchos trabajos que se han realizado. Y en la Comisión de Hacienda se plantearon preocupaciones al respecto.
Dicho organismo considera que el proyecto es importante y que debe ser aprobado.
El señor ZALDÍVAR, don Andrés (Presidente).- Tiene la palabra la Senadora señora Von Baer.


La señora VON BAER.- Señor Presidente, este proyecto, que crea la Subsecretaría de la Niñez, es uno de varios otros que está impulsando el Ejecutivo en torno a esta materia. En este momento el Senado también está discutiendo el relativo al sistema de garantías de los derechos de la niñez. Pero todos responden al mismo enfoque.
Hasta ahora, la preocupación del Estado por los niños ha estado canalizada, como lo planteaba el Senador Montes, especialmente a través de Educación, y, en el caso de aquellos que han sido vulnerados en sus derechos, por intermedio del SENAME.
Por eso, los nuevos proyectos plantean una visión distinta. Hay un cambio que es importante hacer notar, porque, de otra manera, no se entendería la razón para estarlos estudiando primero sin antes preocuparnos por los niños en situación de vulnerabilidad mayor que atiende el Servicio Nacional de Menores.
El Gobierno está planteando una mirada en virtud de la cual el Estado no solo debe preocuparse de estos últimos, sino tener una preocupación general de todos los niños, incluidos los que pertenecen a familias normales y se encuentran bien.
Por eso se crea la Subsecretaría de la Niñez, dentro del Ministerio de Desarrollo Social, con tareas tan amplias como asesorar al Presidente de la República en materias relativas a la promoción y protección integral de los derechos de todos los niños y no solo de aquellos vulnerados en sus derechos.
Este es un tema que, en mi opinión, no hemos discutido mucho. Le hemos prestado poca atención al cambio que se está realizando en cuanto a que ahora se propondrá al Presidente de la República la Política Nacional de la Niñez y su Plan de Acción.
Y la Política Nacional de la Niñez, señor Presidente, no va dirigida solo a los niños cuyos derechos han sido vulnerados, sino a todos los niños.
Una de las consultas que se hicieron fue por qué no se creaba un ministerio de la niñez y se alojaba el tema de la niñez en una subsecretaría, dentro del Ministerio de Desarrollo Social. La respuesta fue que esta Secretaría de Estado se preocupa de distintos grupos de personas, entre ellos el de los adultos mayores, y que, por tanto, era más lógico situarlo ahí.
Yo siempre me he hecho una pregunta, tanto a propósito del Sistema de Garantías de Derechos de la Niñez como con motivo de la Subsecretaría que se crea. Acá se establece una gran institucionalidad, a nivel central, global, y en otra iniciativa se instauran diversas garantías. Sin embargo, ello no se traduce en ninguna acción real. De hecho, esta institucionalidad no llega al territorio, no llega donde están las familias cuyos niños quizás tienen problemas. A mí me da la sensación de que se hace una institucionalidad a nivel central, pero que ella no se va a traducir en un cambio real en la vida de los niños que hoy día lo están pasando mal.
Ni la Subsecretaría ni el sistema de garantías de los derechos de la niñez, como instituciones del Estado -es una de las críticas que se hace reiteradamente-, tendrán llegada donde están los niños que hoy día lo están pasando mal, donde están siendo vulnerados en sus derechos -en el SENAME, por ejemplo-, o en familias que están teniendo problemas, lugares todos en que no se está interviniendo de manera correcta, para poder prevenir antes de pasar a una situación en que los niños deban ser separados de sus parientes más cercanos.
Ninguno de los dos proyectos, ni el que crea la Subsecretaría ni el de garantías de la niñez, se hace cargo de tal situación. Son iniciativas globales, con una institucionalidad centralizada y grande, pero que no llegan al territorio.
Nosotros planteamos ese punto, y además un segundo que paso a exponer a continuación.
A nuestro juicio, está bien que el Estado cuente con instituciones que se preocupen por los niños, pero siempre debe primar la familia. Por eso, insistimos en el respeto al derecho preferente de los padres a educar a sus hijos, que el Estado no puede pasar a llevar, y en que debe existir una preocupación especial por la familia como el mejor lugar donde pueden estar los niños, salvo que tengan que ser separados de sus padres o incluso de una familia extendida.
Por eso, señor Presidente, después de efectuar varios cambios para introducir el derecho preferente de los padres a educar a sus hijos, votamos a favor de este proyecto de ley. Sin embargo, insisto en que, en nuestra opinión, la Subsecretaría no va a solucionar los problemas de los niños que hoy día están siendo vulnerados en sus derechos ni tampoco los de quienes son víctimas de un cuadro de violencia dentro de su familia.
Creemos que faltan proyectos que realmente hagan carne estas políticas, que son muy generales y no se hacen cargo de la situación real, directa, de los niños cuyos derechos están siendo vulnerados en la actualidad, tanto en el SENAME como quizás también territorialmente, en familias que no están preocupándose como corresponde de sus niños.
He dicho.
El señor ZALDÍVAR, don Andrés (Presidente).- Tiene la palabra el Senador señor Patricio Walker.


El señor WALKER (don Patricio).- Señor Presidente, primero quiero valorar el hecho de estar votando en particular este proyecto de ley.
Ya se ha dicho acá: en Chile tenemos una tremenda deuda con los niños.
Se hizo un estudio por parte del SENAME -cuya realización valoro- que dio cuenta de torturas, muertes, negligencias y una serie de situaciones que han provocado que algunos de nuestros niños y niñas hayan sufrido grave vulneración en sus derechos.
Por eso es tan importante tener respuesta a la problemática que estamos viviendo.
Hoy, por ejemplo, sabemos del reclamo de las instituciones colaboradoras del SENAME, las que, más allá de que unas sean mejores que otras -y así es-, atienden a más de ocho mil niños. Algunas son muy buenas (María Ayuda, el Hogar de Cristo, en fin), porque reciben aportes o donaciones de privados que representan dos tercios de su financiamiento. El tercio restante proviene de la subvención del Estado. Pero la mayoría no tienen comidas de beneficencia, donantes, personas que aporten recursos con descuento directo en sus cuentas corrientes, etcétera, y sobreviven en precarias condiciones, con personal no calificado, todo lo cual se traduce en que muchas veces caigan en negligencias. Uno recuerda el caso de la pequeña Lissette y otros que han provocado tanto dolor en el país.
Por eso, señor Presidente, es tan importante este proyecto de ley. Es cierto que no es el único. Cuando la Presidenta de la República anunció un aumento de 11 por ciento en el presupuesto de los CREAD (Centros de Reparación Especializada de Administración Directa), yo aplaudí. Me parece bien, porque ahí están los niños con más problemas, de los que nadie quiere hacerse cargo. Pero, ¿por qué no hacemos algo similar con las instituciones colaboradoras del SENAME, donde está el 95 por ciento de los niños?
Para ello necesitamos un organismo con más peso dentro de los gobiernos, para hacer valer la voz de los niños. Y por eso me parece importante la creación de la Subsecretaría de la Niñez, cuyo proyecto pasó por la Comisión de Gobierno y establece las instituciones encargadas, a nivel nacional, de la gestión estratégica del sistema, incorporando la obligación de velar por los derechos de los niños, con el fin de promover y proteger su ejercicio como un nuevo objeto del Ministerio de Desarrollo Social, e instituyendo al Comité Interministerial de Desarrollo de la Niñez como órgano rector de dicho sistema y de su articulación.
Pero no basta con la Subsecretaría. Necesitamos aprobar el proyecto, en segundo trámite -lo estamos discutiendo en nuestra Comisión, a la que concurre todas las semanas Estela Ortiz, con quien hemos trabajado en forma permanente-, sobre protección integral de los derechos de la infancia, que en realidad tiene un nombre un poquito más complicado (Sistema de Garantías de Derechos de la Niñez), el cual, básicamente, apunta a una protección universal -es decir, para todos los niños- e integral -en todos los ámbitos- de los niños en Chile.
Por otro lado, hay que derogar la Ley de Menores, del año 67, que tiene una visión paternalista: se preocupa de los niños en tanto y en cuanto se hallen en riesgo social. ¡Pero todos los niños tienen derechos, en todos los ámbitos! Es una mirada que está cambiando y que estamos trabajando en el proyecto sobre protección integral de los derechos de la infancia o Sistema de Garantías de Derechos de la Niñez.
¿Qué queremos? Que la instancia judicial, en que se separa a los niños de sus hogares en casos graves, sea la última; que haya instancias administrativas previas, para evitar que un niño vaya a un hogar de menores o a una residencia. Pero, para eso, en la ley marco, que estamos votando, necesitamos -lo dijo ayer la profesora Fabiola Lathrop- una acción tutelar de garantía y fortalecer los órganos administrativos, a fin de que efectivamente tengamos una protección cercana a esos niños, a nivel preventivo-administrativo, para evitar que vayan a tribunales y tengan que ser separados de sus hogares.
¡Hay que fortalecer a las familias de acogida, a las familias sustitutas!
¡Hay que terminar con la prohibición a las familias de acogida para adoptar a los niños!
¡Hay que apurar las adopciones en Chile!
¡Después de los tres años, es muy difícil que a un niño lo adopten!
Y esos compromisos, desgraciadamente, no se han cumplido.
Por eso, creo que también es importante el establecimiento del Defensor de los Derechos de la Niñez, que ya aprobamos en la Sala del Senado y en la Comisión de la Niñez, que integramos junto con la Senadora Von Baer y los Senadores Quintana, Letelier y Ossandón.
¿Por qué? Porque el Defensor va a ser autónomo: no deberá contar con el visto bueno del Gobierno de turno para decir dónde se vulneran los derechos de los niños y qué modificaciones legales y reglamentarias se requieren.
Y, por cierto, se necesitan más recursos. Si no, señor Presidente, esto va a ser insuficiente.
He dicho.
El señor ZALDÍVAR, don Andrés (Presidente).- Quiero recordarles a Sus Señorías que estamos en la discusión particular del proyecto.
El señor BIANCHI.- ¿Puede abrir la votación, señor Presidente?


El señor ZALDÍVAR, don Andrés (Presidente).- Habría que hacer varias votaciones.
En primer término, la Senadora señora Von Baer pidió votación separada de tres preceptos: los numerales 1), 3) y 5) del artículo primero transitorio.
En segundo lugar, hay normas que requieren quorum de ley orgánica constitucional para su aprobación, y podrían votarse en conjunto.
El señor WALKER (don Patricio).- ¡Eso!
El señor BIANCHI.- ¡Con mayor razón si son de quorum especial!
El señor ZALDÍVAR, don Andrés (Presidente).- Si hubiera acuerdo, se someterían a votación las normas de quorum especial y después las propuestas por la Senadora señora Von Baer, que son tres.
¿También en conjunto?
Las dejaríamos separadas para después.
El señor WALKER (don Patricio).- Las de quorum especial, "Si le parece".
La señora GOIC.- ¡Todas las de quorum especial!
El señor ZALDÍVAR, don Andrés (Presidente).- Honorable señora Von Baer, ¿cuál es su propuesta?

La señora VON BAER.- Señor Presidente, yo no tengo problema en que votemos juntas las disposiciones de quorum especial para economizar, y después aquellas en que solicité votación separada.
Pero sí le pido que no sea "Si le parece", sino que se voten.
El señor ZALDÍVAR, don Andrés (Presidente).- Entonces, en votación las normas que no fueron objeto de indicaciones ni de modificaciones y las enmiendas unánimes, incluido el artículo primero transitorio, con excepción de sus números 1), 3) y 5), respecto de los cuales la Senadora señora Von Baer pidió votación separada. De este modo se comprenden todos los preceptos de quorum especial.
--(Durante la votación).
El señor ZALDÍVAR, don Andrés (Presidente).- Tiene la palabra el Senador señor Navarro.


El señor NAVARRO.- Señor Presidente, está claro que, en cuanto al vacío enorme que existe respecto a la preocupación por los temas de la niñez, hoy habrá la oportunidad de reivindicarse.
Estamos en deuda profunda con los niños de Chile: los más abandonados, los más vulnerables. Y soy de los que afirman de manera categórica que el Estado de Chile ha vulnerado el derecho de los niños bajo su custodia.
El SENAME es la expresión más dramática y terrible de aquello.
La Comisión de Derechos Humanos, que presidía, estuvo en los hogares. Y se constató que no solo existe vulneración a los niños; también hay un tema profundo con los funcionarios: 25 por ciento de estos se encuentran con licencia cada día.
¡Más de mil funcionarios al día no trabajan por la carga laboral (20 días seguidos), por el estrés sicológico! Es decir, es una institución en crisis.
En el año 2012 formulamos en este mismo Senado denuncias profundas respecto de la violación de los derechos de los niños. Enviamos una carta al entonces Presidente Sebastián Piñera, denunciando un conjunto de hechos, que podría volver a mencionar ahora, que son terribles.
Se ha tomado la decisión de intervenir. El Estado lo ha asumido, y se han presentado al menos 5 proyectos de ley: los que crean el Sistema de Garantías de los Derechos de la Niñez; la Subsecretaría de la Niñez, en debate; la Defensoría de los Derechos de la Niñez; el sistema de protección especializada, que va a reemplazar al SENAME, y el Servicio Nacional de Reinserción Social Juvenil.
Yo quiero señalar, aprovechando la presencia del Gobierno en la Sala, que este proyecto solo da una estructura institucional y no se aboca al fondo de la crisis.
Hoy día tenemos una crisis profunda en los hogares del SENAME con las instituciones colaborantes.
Quiero mencionar que en el conjunto de sesiones que celebramos estuvo el Ministro de Hacienda.
¡No sabía cuánto gasta el Estado de Chile por niño cada año por la fragmentación y por la dispersión!
Y la pregunta es: ¿cuánto personal va a tener esta Subsecretaría? Son 56 funcionarios para 15 Regiones. O sea, un poco más de 3,7 funcionarios por Región.
La interrogante es si esto va a ser suficiente para superar el estado de crisis existente.
Nadie enseña a ser padre. Esta es una tarea fundamental. Y, cuando se protege el rol de los padres en la formación de los niños, hay que considerar que tenemos un problema en los hogares.
Los niños cuyas más diversas acciones hemos conocido -lamentables algunas de ellas- venían de hogares del SENAME.
Hay una cifra devastadora: uno de cada dos jóvenes encarcelados en las cárceles chilenas pasó por el SENAME.
¡Uno de cada dos! ¡Más del 50 por ciento!
El Estado abandonó su función. Hoy día la quiere retomar. Y espero que haya consenso no solo para aprobar este proyecto que crea la Subsecretaría de la Niñez, sino para aprobar los recursos a fin de año.
Y la pregunta que quiero formular a doña Estela Ortiz y a quien nos acompaña -por su intermedio, señor Presidente- es cuántos recursos vamos a tener para implementar esta Subsecretaría.
Sin recursos adicionales esto no va a funcionar. Los 56 funcionarios son, a todas luces, insuficientes, ¡absolutamente insuficientes!
Y Chile está en incumplimiento grave del artículo número 3 de la Convención sobre los Derechos del Niño, de la UNICEF. No ha asumido en propiedad y a cabalidad la función de la defensa de los niños.
Yo tengo dudas de si una Subsecretaría va a ser suficiente, pues esto requiere una política integral de todos los Ministerios: del Ministerio de Educación, del Ministerio de Salud. Porque, ¿cuál es la situación de los niños del SENAME? La Cartera de Salud se niega a asumir la realidad de los niños con problemas mentales, con problemas de estrés.
Y si el Ministerio de Salud no participa, vamos a dejar sola a la nueva Subsecretaría.
Se requiere una voluntad pública de la integralidad del Estado.
Vamos a votar a favor, por cierto. Porque efectivamente el Estado da una propuesta. No obstante, esto requiere recursos. Y yo aspiro a que en este Senado todos nos pongamos de acuerdo y exijamos más recursos. A los Ministros de Hacienda ya los conocemos: van a decir que hay restricción, que no hay plata.
¡Tiene que otorgarse dinero para enfrentar el problema de los niños en Chile! Y esto no es un tema de Estela Ortiz, de la Subsecretaría, sino de país, de Gobierno.
Y espero que haya coherencia entre aprobar hoy día esta institucionalidad y los recursos que pongamos este año a disposición de la protección de la niñez.
Voto a favor del proyecto, y esperamos ver cada una de las indicaciones y el articulado en particular.
El señor GIRARDI (Vicepresidente).- Tiene la palabra la Senadora señora Lily Pérez.


La señora PÉREZ (doña Lily).- Señor Presidente, recuerdo que a comienzos de este año el sicólogo Patricio Pino, de la Región del Libertador General Bernardo O'Higgins, de uno de los hogares del SENAME, hizo un crudo relato respecto a los sucesos al interior de ese Servicio a través de medios de comunicación.
La realidad del SENAME es terrible en numerosos lugares. Sin embargo, muchos de estos lamentables hechos no siempre se deben a la responsabilidad de sus funcionarios. En algunas ocasiones sí, pero en numerosas otras obedece a la falta de recursos, a la falta de especialistas, a la falta de gente que realmente ame a los niños y que esté a cargo de ellos.
Tener una Subsecretaría de la Niñez que se preocupe de implementar políticas públicas destinadas a los menores; tener una Subsecretaría que vele por que se lleven a cabo estas políticas públicas con éxito y, además, que trabaje fuertemente por tener más recursos y hacer buena gestión, me parece un imperativo moral.
Los países más desarrollados se miden siempre por tres cosas: cómo tratan a sus niños; cómo tratan a sus adultos mayores, y cómo mantienen a sus presos, sobre todo cuando son mayores, ancianos y enfermos.
En Chile estamos al debe en las tres áreas. Y la que nos ocupa ahora obviamente es muy significativa.
Pero si cuando venga la discusión del proyecto de Ley de Presupuestos no peleamos por que efectivamente tengamos más recursos y que estos se gestionen mejor, la creación de la Subsecretaría de la Niñez será un acto solamente simbólico.
Por eso, qué importante es lo que nosotros estamos haciendo legislativamente, qué importantes son todas las Comisiones que se han creado y sacar adelante estos proyectos. Pero qué importante también es seguir adelante y que esto sea un puntapié inicial para un cambio realmente efectivo en lo que dice relación con el cuidado de nuestros niños vulnerables; con mejorar los plazos de la ley de adopciones y los planes de salud de las mamás y los papás que adoptan menores, que muchas veces quedan fuera o son discriminados en esos planes porque no saben en qué minuto se los van a entregar.
Aquí se ha mencionado que a los niños con más de tres años de edad -creo que lo decía el Senador Patricio Walker- casi nadie los quiere adoptar.
Por lo mismo, es muy importante generar políticas públicas.
Todo el mundo dice: "Sí, ¡qué importante es!", pero no se entiende por qué, si hemos hecho modificaciones legales, estas no se concretan en mayor agilidad, en hacer las cosas de una manera distinta.
Por eso, señor Presidente, obviamente voto a favor, con la ilusión de que esta Subsecretaría realmente haga las cosas bien; de que ponga los acentos que hay que poner, y de que resguarde a la niñez en todos los ámbitos, partiendo por separar de una vez por todas al SENAME de quienes son infractores a la ley, porque son realidades absolutamente distintas, que no apuntan a lo mismo, que no tienen el mismo objetivo.
He dicho.
El señor GIRARDI (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Senador señor Quintana.


El señor QUINTANA.- Señor Presidente, me sumo a la valoración que se hace de esta discusión, y especialmente a la creación de esta Subsecretaría de la Niñez, porque, como ha señalado el Presidente de la Comisión de Infancia, el Senador Patricio Walker, estamos discutiendo en esa instancia el proyecto que crea un sistema de garantías de los derechos de la niñez.
Evidentemente lo que uno echa de menos -y así nos lo han manifestado distintas invitadas, destacadas magistradas expertas en derecho de infancia- tiene que ver con la necesidad de dotar de una mayor institucionalidad a todo este proceso, a todo este acompañamiento, que se refiere básicamente a las funciones administrativas, al Ejecutivo.
Uno podría haber pensado que algunas de las juezas que nos acompañaron reforzarían la acción jurisdiccional, pero fue al revés, señalaron la necesidad de actuar preventivamente, lo cual significa contar con una institucionalidad, un órgano rector (el Ministerio de Desarrollo Social), a través de esta Subsecretaría.
Eso sí, quiero decir que los miembros de la Comisión -también lo expresaba la Senadora Von Baer- hemos manifestado muchos reparos y dudas respecto de la iniciativa que crea un sistema de garantías de derechos. Resulta incomprensible sostener que no tendrá recursos. Es evidente que los va a requerir para hacer funcionar ese sistema, como bien se lo denomina, con una política a 10 años plazo.
Ayer el propio Ministerio de Desarrollo Social, junto con la Secretaria Ejecutiva del Consejo Nacional de la Infancia, la señora Estela Ortiz, y la Subsecretaria -a quienes saludo-, nos señalaba que el Gobierno va a reponer algunos Títulos que se cayeron en la discusión sobre el proyecto que crea un sistema de garantías en la Cámara de Diputados de manera, yo diría, muy irresponsable: el Título III, el Título IV, donde justamente se encuentra la parte robusta de esta nueva institucionalidad.
Vamos a reponer tanto la acción de tutela como la defensoría letrada, entre otras herramientas, para que no solo se trate de judicializar a los niños que viven en situación de calle, de desarraigo familiar, de desamparo filial, en fin.
Es bueno indicar, además, que como país contamos con una deficiente normativa en materia de infancia.
Tenemos la Convención sobre los Derechos del Niño, ratificada por Chile en 1990; una ley de menores, que deberá modificarse pronto, en el marco de esta discusión; la normativa referente a la responsabilidad penal juvenil, que poco ha contribuido -también lo decía el Senador Navarro- al propósito de la prevención en materia de niñez; y, por supuesto, las leyes de familia, que se utilizan un poco más.
La preocupación de los miembros de la Comisión de Infancia en esta discusión es que no estemos haciendo una legislación declarativa que genere expectativas en la ciudadanía, en los niños, sin que finalmente tengamos herramientas concretas para acompañar los derechos de que se trata.
O sea, no se busca solo contar con un catálogo de derechos, sino de ver cómo será su ejercicio.
Me preocupa, se lo hemos señalado también a la Directora Ejecutiva del Consejo de la Infancia, que el rol de la educación, de la parte formativa, no se encuentre muy visible, porque esta Subsecretaría tendrá un papel determinante en acompañar, en pesquisar dificultades antes de ir a tribunales, antes de derivarse los menores a familias de adopción.
Por consiguiente, no estamos hablando todavía de niños vulnerados, abandonados, sino de menores a quienes se les están conculcando sus derechos a pesar de estar en el colegio, en el sistema formal.
Nos preocupa también, entre otras cosas, cómo salió de la Cámara el rol preponderante de la familia. La verdad es que está absolutamente demostrado que gran parte de las transgresiones a la norma, de las distintas dificultades que presentan los niños, ocurren dentro del hogar.
Nos parece que esa defensoría letrada es fundamental, siempre que escuche a los niños, y no solo a los adultos que viven con ellos.
Por consiguiente, señor Presidente, consideramos que, aunque es un paso muy relevante, hay dudas bastante razonables acerca de lo que puede llegar a ser esta normativa: de que no solo sea para dar cumplimiento a las recomendaciones internacionales que permanentemente se le hacen a Chile, sino para avanzar efectivamente hacia una sociedad de derechos, en que programas y leyes que han funcionado bien, como Chile Crece Contigo, tengan un correlato importante en el rol rector del Ministerio de Desarrollo Social.
Viene también, como se ha señalado, la separación del SENAME, y esperamos que eso sea conocido prontamente por el Senado, tanto respecto al servicio de protección especializado como sobre los niños vulnerados.
Por todo lo anterior, con las dudas que hemos manifestado, que esperamos despejar en la discusión del proyecto que crea el sistema de garantías de la niñez; con la falta de una institucionalidad robusta en materia de infancia; con las prevenciones que hemos hecho en cuanto a que el Ministerio de Desarrollo Social carece de expertise para abordar este tema, nos parece que hay un importante paso que dar hoy: la aprobación en particular de esta iniciativa que crea la Subsecretaría de la Niñez.
He dicho.
El señor GIRARDI (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Senador señor Letelier.


El señor LETELIER.- Señor Presidente, una de las cosas por las cuales la Presidenta Bachelet va a pasar a la historia es que su Administración ha sido la única que ha propuesto hacer una política integral hacia la infancia desde el año 1990, cuando muchos de los que estábamos acá aprobamos la Convención sobre los Derechos del Niño.
Lo digo aunque le moleste a un Senador presente en la Sala, porque por primera vez se ha generado un debate acerca de tener una mirada sistémica de los temas de la infancia que plantee no solamente los derechos que una sociedad debe garantizar, sino también su institucionalidad, y que tiene a lo menos dos dimensiones: una se refiere a la Subsecretaría y la otra al drama (respecto al cual, si uno quiere ser muy sincero y honesto, todos somos corresponsables) vinculado con la institucionalidad del SENAME.
En cuanto a lo último tenemos una ley de menores muy muy antigua e inadecuada para las necesidades de hoy, en la que, además de lo planteado por los Senadores señora Von Baer y señor Quintana, necesitamos separar la institucionalidad.
Se precisa una mirada distinta en nuestro país acerca de la infancia, no solo de la vulnerada (por cierto, esto nos duele en el alma); no solo de cómo se cambian los paradigmas para garantizar la protección del Estado y la sociedad toda, sino también para ver cómo promovemos políticas para que todos los niños y las niñas de Chile tengan garantizados sus derechos.
Esta Subsecretaría debe ir a la par no solamente con la institucionalidad de un futuro organismo vinculado a la promoción de los derechos de la infancia y con hacerse cargo de los niños abandonados o vulnerados, que es un drama de nuestra sociedad, sino también con abordar la política de los menores infractores de ley.
Adicionalmente, señor Presidente, está la iniciativa de ley sobre la defensoría de los derechos de la niñez.
Por ende, hay una mirada sistémica por primera vez -¡por primera vez!- en nuestro país, de acuerdo a lo que ha sido la evolución de estas instituciones en otras naciones.
Es legítimo que tengamos diferentes miradas sobre cómo abordar el decálogo de los derechos de los niños o la ley que garantiza la promoción de esos derechos; acerca de cuáles son los mecanismos para asegurar tanto la protección como las medidas administrativas que garanticen tal protección y cuál debiera ser la institucionalidad que supervise aquello.
Podremos debatir -tal como lo planteó el Senador Quintana, que me antecedió en el uso de la palabra- la mejor manera de recuperar las materias que la Cámara de Diputados dejó afuera del proyecto. Pero lo que no está en discusión -creo yo- es la importancia de contar con una ley nacional sobre los derechos básicos de la niñez que serán cautelados por el Estado.
Por eso, señor Presidente, la ley en proyecto apunta a que todos los gobiernos tengan una institucionalidad que promueva las políticas de la infancia. Y yo espero que no sean políticas de gobierno, sino que se transformen crecientemente en políticas de Estado, con un gran consenso. Eso es una necesidad.
No tengo la menor duda acerca de la importancia de tener una Subsecretaría de la Niñez como la que se crea en esta iniciativa de ley, con un ámbito de responsabilidades que comprenda las catorce áreas que se indican. Y si bien los recursos que se le aportan en esta etapa solo están destinados a su proceso de instalación -lo cual es evidente-, espero que en los debates presupuestarios de fin de año logremos demostrar que el Congreso tiene un compromiso primario para crear esta institucionalidad, de manera que se entreguen los fondos a las instituciones que los requieran para superar crisis como la que hemos visto en el SENAME.
Señor Presidente, reitero que este es un paso necesario para una nueva institucionalidad, que viene acompañado de una visión integral sobre política, sobre defensoría, lo cual, en mi opinión, es muy relevante. La normativa en debate contempla la protección y defensa legal de los niños para garantizar sus derechos.
A mi juicio, nuestra sociedad estaba en deuda en esta materia. Las comisiones que han evaluado a nuestro país desde hace años nos han llamado la atención respecto del sistema promovido por las Naciones Unidas.
Con lo que ahora vamos a aprobar no solo nos pondremos al día, sino que pasaremos de los discursos a la acción, que es lo que les hace falta a los niños y niñas de nuestro país.
He dicho.
El señor GIRARDI (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Senador señor García.


El señor GARCÍA.- Señor Presidente, voy a votar a favor de la iniciativa en relación con las nuevas facultades, atribuciones y tareas que se le entregan al Ministerio de Desarrollo Social. Esa Cartera es la encargada de las políticas públicas para la superación de la pobreza, entre otras materias, y debo decir que en nuestra Región de La Araucanía tenemos ochenta mil niños -¡ochenta mil niños!- viviendo en condiciones de pobreza.
Por lo tanto, todo lo que podamos hacer para contribuir a que esas familias, esos niños puedan tener un mejor futuro, bienvenido sea.
Abrigo esperanzas de que la Subsecretaría de la Niñez que estamos creando pueda traducirse, a través de las instituciones pertinentes y contando con el trabajo de todo el Estado -será este el que tendrá la responsabilidad de implementar las políticas, sin duda con un esfuerzo multisectorial-, en que más niños -¡muchos más niños!- sean más felices.
Tengo la convicción de que para atender mejor la situación de nuestros niños, particularmente de los más vulnerables -en realidad, la de todos-, es sustantivo, fundamental y vital lo que ocurra con la familia. Nosotros tenemos que proteger la familia, tenemos que apoyarla, tenemos que contribuir a que pueda superar sus dificultades, porque, finalmente, cuando ella funciona bien, no me cabe ninguna duda de que los niños son más felices y pueden aspirar a una realización espiritual mucho mayor.
Yo siento que muchas veces aquí, en el Congreso, tomamos decisiones que van en sentido contrario. Y, finalmente, eso termina haciéndoles daño a la sociedad y a nuestros niños, a los mismos niños que hoy día intentamos proteger, a los mismos niños que hoy día, a través de esta Subsecretaría, buscamos que puedan desarrollarse, que puedan crecer en un ambiente mucho más favorable, de mayor acogida, de mayor felicidad.
En esa esperanza, voto a favor de la iniciativa.
El señor GIRARDI (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Senador señor Hernán Larraín.


El señor LARRAÍN.- Señor Presidente, yo también me voy a sumar con mi voto favorable al proyecto, sin perjuicio de que creo importante dejar constancia de algunas reflexiones.
He oído comentarios que me producen cierta inquietud. Al parecer, hay quienes piensan que con la sola creación de una Subsecretaría de esta naturaleza se van a resolver los problemas que enfrenta la niñez. Yo pienso que eso no es así.
Muchas veces son las políticas que los gobiernos impulsan y los recursos que se asignan los que terminan definiendo, finalmente, la prioridad que se tiene en esta materia. Así, por ejemplo, cuando el Gobierno propicia la gratuidad universal en el ámbito de la educación superior y busca recursos cuantiosos que terminan asignándose a sectores que pueden pagar la educación superior que reciben -en eso consiste la gratuidad universal- uno dice: "No se está priorizando la educación preescolar; no se está priorizando la niñez".
Es probable que esto ocurra porque las movilizaciones estudiantiles son muy fuertes y los niños carecen de esa capacidad para expresarse. Por lo mismo, la mayoría de estos recursos terminan siendo asignados a la educación superior y no a la niñez.
Cuando se dice "Queremos priorizar la niñez", pero la plata se asigna en la forma que he señalado, obviamente da lo mismo que haya o no una Subsecretaría de la Niñez. Estamos haciéndonos trampa en el solitario.
Si realmente hay compromiso con esta etapa de la vida humana, deberíamos acompañarlo no solo con la creación de infraestructura, de burocracia, sino con políticas que realmente valoricen y prioricen las materias propias de la niñez.
Tengo la convicción de que una de las principales fuentes de la desigualdad que hoy día existe en nuestro país se debe precisamente a que se han desatendido las políticas de la niñez. Porque, tal como ocurre con la educación superior -recién lo señalé-, también se han aportado recursos a otros niveles antes que a la infancia.
Si no nos preocupamos con convicción y fuerza de priorizar los recursos y las políticas públicas para que la niñez sea realmente la principal beneficiara, el niño que llegue a primero básico sin contar con el apoyo previo necesario no va a lograr equiparar a otro que sí contó con todo el respaldo gracias a las condiciones económicas de su familia.
Por eso, cuando miro a los niños de Linares y veo que no son prioritarios para que se les construyan buenas salas cuna, buenos jardines infantiles, ni cuentan con buenos apoyos en salud, en la entrega de complementos alimenticios y otros, me parece que estamos hablando en el desierto, ocupados en crear solo infraestructura mientras gastamos la plata en los alumnos de educación superior, que tienen el recurso más accesible y más fácil. No estamos corrigiendo las desigualdades, porque no estamos apoyando a los niños cuando lo necesitan.
Voy a respaldar el proyecto porque se ha incluido, en forma muy expresa, según he podido ver, gracias a la gestión de la Senadora Von Baer, el concepto del derecho a la educación preferente de los padres, que es también un deber al tenor de lo que dice la Constitución.
A mí me parece que cuando al Estado le damos roles de protección de la niñez, como aquí se hace y con mucha fuerza, tenemos que cautelar el derecho preferente de los padres.
Ese punto ha sido incorporado en el texto del proyecto. Y a mi juicio eso es esencial para asegurar que lo que se haga por los niños no vaya en desmedro del rol de los padres ni de la familia, la que siempre constituye el primer nivel al cual los menores deben estar sometidos. El Estado tiene que colaborar, ayudar a la tarea de los padres, a su obligación, como señala nuestra Carta Fundamental.
En ese sentido, aquí hay dos disposiciones que garantizan que esta normativa está subordinada a la Constitución Política. Me refiero al inciso segundo del número 1) y, también, al artículo 3° bis, letra e), que respeta en forma expresa el "derecho preferente" de los padres.
Por esa consideración, señor Presidente, creo que estamos dando un paso importante, pero que no garantiza que podamos avanzar. Ello no será posible mientras no exista coherencia entre las políticas públicas y las estructuras orgánicas y burocráticas que se creen. Y hasta ahora -lamento señalarlo- no la ha habido, pues la preocupación del Gobierno por la niñez no ha sido igual que en otros ámbitos, como, por ejemplo, el de la educación superior.
No obstante, porque se ha logrado establecer un principio que ordenará el funcionamiento de la Subsecretaría -es decir, políticas de Estado que ayudan a la labor de los padres en la educación de los hijos y no a sustituirlos o a remplazarlos-, voto que sí.
El señor GIRARDI (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Senador señor Chahuán.


El señor CHAHUÁN.- Señor Presidente, por supuesto que estamos frente a un cambio normativo de importancia.
La creación de una Subsecretaría de la Niñez, dependiente del Ministerio de Desarrollo Social, que tendrá la posibilidad de colaborar en forma directa en el diseño de políticas y planes; en la coordinación de acciones, prestaciones, sistemas de gestión; en la promoción de derechos; en el diseño, administración de instrumentos de prevención, de estudios e investigaciones, así como en la elaboración de informes para organismos internacionales muestra claramente que acá estamos frente a un cambio de paradigma.
¿Por qué es tan importante esto?
Porque en nuestro país -es necesario entenderlo- hay un envejecimiento progresivo de la población y una desigualdad evidente en materia de distribución del ingreso -la hemos calificado de "vergonzosa"- o de los accesos para poder lograr una verdadera igualdad de oportunidades.
Todo apunta a que debemos poner nuestro foco en generar una política nacional de la infancia.
La Política Nacional de la Niñez propuesta en el proyecto implica varias cosas.
Por supuesto, el acceso a una educación de calidad.
Por supuesto, la necesidad de establecer, en el marco de los primeros años, cuando se genera el desarrollo neurobiológico, condiciones propicias desde el punto de vista de la relación materno fetal, de las relaciones de apego y de las estimulaciones necesarias.
Cuando uno habla de la Política Nacional de la Niñez, habla de un contexto general:
No solamente de la necesidad de distinguir dentro del SENAME entre los menores infractores de ley y aquellos que han sido vulnerados en sus derechos, realidad que es evidente.
No solamente de las políticas relativas al maltrato infantil (hay cifras alarmantes que hablan de un 75 por ciento de niños maltratados en nuestro país).
No solamente de temas tan importantes como generar una sinergia entre las instituciones privadas y el Estado, en términos de impulsar una política que ponga el foco en los menores.
No solamente de permitir el acceso universal a los jardines infantiles y a las salas cuna, en lo cual también se ha avanzado en términos sustantivos en la primera Administración de la Presidenta Bachelet, en el Gobierno del Presidente Piñera y en esta segunda Administración de la Presidenta en ejercicio.
No solamente de la urgencia de poner también el foco en materias relevantes como, por ejemplo, las modificaciones a la Ley sobre Adopción de Menores, a fin de aminorar los plazos que toma hoy día la declaración de susceptibilidad o la posibilidad cierta de que los menores sean adoptados. Tenemos claro que los largos y latos plazos de la declaración de susceptibilidad finalmente hacen que los niños pierdan la oportunidad de acceder al derecho a tener una familia, reconocido en la Convención sobre los Derechos del Niño.
Y no solamente de la posibilidad de generar, en el marco del principio del interés superior del niño, las condiciones de ejercer su derecho a mantener las relaciones filiales.
Ciertamente, debemos seguir avanzando.
Estas modificaciones me parecen pertinentes, porque se crea un comité interministerial en que se conjuga la relación de las Carteras de Justicia y Derechos Humanos, del Deporte y de Desarrollo Social; porque se avanza al establecer nuevas facultades y atribuciones para el Ministerio de Desarrollo Social; y, también, porque están inspiradas en el propósito de impulsar una agenda de la niñez como política de Estado -no solo del gobierno de turno-, en términos de generar un sistema de garantías: la Subsecretaría, el Defensor del Niño, el Servicio de Reinserción Social Juvenil, en fin.
En este punto quiero quedarme unos minutos, simplemente para señalar que requerimos hacernos eco respecto de la situación de abandono en que se encuentran los menores de los hogares del SENAME, particularmente en la oferta rehabilitadora.
Cuando uno va al centro de internación de Limache, conocido como "ex Lihuén" -he tenido muy de cerca esa experiencia-, un recinto de régimen cerrado y semicerrado de nuestra Región, vemos las realidades concretas...
¿Me concede un minuto para poder concluir, señor Presidente?
El señor GIRARDI (Vicepresidente).- Continúe, señor Senador.
El señor CHAHUÁN.- Muchas gracias.
En ese recinto no hay oferta rehabilitadora y los funcionarios del SENAME actúan con precariedad, a pesar de entregar todo su esfuerzo.
Tenemos dificultades.
No hemos sido capaces, por ejemplo, de impedir el abuso al interior de los mismos recintos.
Por eso, creo que esto debiera servirnos para una modificación marco, para volver a generar el énfasis en la política nacional de la infancia.
Hace poco constituimos la Comisión Especial de Infancia y la bancada de Senadores por la infancia. Quienes hemos estado vinculados a estas materias hemos querido que esa sea la instancia para promover una agenda legislativa capaz de devolver la mirada a los temas que realmente importan, los que construyen futuro, y uno de ellos es la política nacional de la infancia.
El señor GIRARDI (Vicepresidente).- Tiene la palabra el Senador señor Horvath.


El señor HORVATH.- Señor Presidente, en primer lugar, debo reconocer que este proyecto obedece a una política consistente en el tiempo, en la cual se han destacado elementos muy importantes.
Sin embargo, como lo dijimos en la votación en general, uno no puede abstraerse de la situación de los niños que están en el Servicio Nacional de Menores, particularmente a la luz de los antecedentes emanados de las comisiones investigadoras de la Cámara de Diputados, que, dentro de sus facultades, han llegado a la conclusión de que este es un tema de la mayor urgencia.
Por eso, por su intermedio, señor Presidente, solicito formalmente a las autoridades que representan al Gobierno en este sensible e importante tema que nos digan de qué forma se va a tratar el nuevo Servicio Nacional de Menores, para resolver los problemas que arrastra desde hace muchos años a la fecha.
En segundo lugar, pido también que en la Región de Aisén exista una presencia efectiva y real del Instituto Nacional de Derechos Humanos, porque, desgraciadamente, tenemos allá problemas bastante graves, como se conoce a nivel nacional.
Por otro lado, es necesario velar no solo por el derecho de los niños, sino también por el de los adultos mayores y el de los privados de libertad. Y vemos cómo algunos dirigentes, que son observadores de derechos humanos y que se ocupan de estos temas -es el caso de Edilia Naiman-, finalmente quedan a la deriva y son llevados, incluso, a procesos judiciales.
Por esas razones, solicito a las autoridades que representan al Gobierno en esta importante materia que nos den una respuesta.
Gracias.
El señor GIRARDI (Vicepresidente).- Tiene la palabra el señor Secretario.
El señor LABBÉ (Secretario General).- ¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?
El señor GIRARDI (Vicepresidente).- Terminada la votación.
--Por 28 votos a favor y 2 abstenciones, se aprueban las normas que no fueron objeto de indicaciones ni de modificaciones y las enmiendas unánimes, incluido el artículo primero transitorio, con excepción de sus números 1), 3) y 5), dejándose constancia de que se reúne el quorum constitucional requerido.
Votaron por la afirmativa las señoras Goic, Muñoz, Lily Pérez y Von Baer y los señores Allamand, Araya, Bianchi, Chahuán, De Urresti, García, García-Huidobro, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Hernán Larraín, Letelier, Montes, Moreira, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.
Se abstuvieron la señora Van Rysselberghe y el señor Pérez Varela.

El señor LABBÉ (Secretario General).- Señores Senadores, hay que abocarse a las solicitudes de votación separada, que recaen en los números 1), 3) y 5) del artículo primero transitorio.
Al respecto se pidió aplazamiento de la votación.
El señor GIRARDI (Vicepresidente).- La discusión y el pronunciamiento de la Sala, por consiguiente, quedan pendientes hasta la próxima sesión. --Quedan pendientes la discusión y la votación particular del proyecto en la parte