Click acá para ir directamente al contenido
REPÚBLICA DE CHILE
DIARIO DE SESIONES DEL SENADO
PUBLICACIÓN OFICIAL
LEGISLATURA 358ª
Sesión 41ª, en martes 10 de agosto de 2010
Ordinaria
(De 16:19 a 18:43)
PRESIDENCIA DE LOS SEÑORES JORGE PIZARRO SOTO, PRESIDENTE,
Y CAMILO ESCALONA MEDINA, PRESIDENTE ACCIDENTAL
SECRETARIO, EL SEÑOR CARLOS HOFFMANN CONTRERAS, TITULAR
____________________
VERSIÓN TAQUIGRÁFICA
I. ASISTENCIA
Asistieron los señores:
--Allende Bussi, Isabel
--Alvear Valenzuela, Soledad
--Bianchi Chelech, Carlos
--Cantero Ojeda, Carlos
--Chadwick Piñera, Andrés
--Chahuán Chahuán, Francisco
--Coloma Correa, Juan Antonio
--Escalona Medina, Camilo
--Espina Otero, Alberto
--Frei Ruiz-Tagle, Eduardo
--García Ruminot, José
--Girardi Lavín, Guido
--Gómez Urrutia, José Antonio
--Horvath Kiss, Antonio
--Kuschel Silva, Carlos
--Lagos Weber, Ricardo
--Larraín Fernández, Hernán
--Letelier Morel, Juan Pablo
--Longueira Montes, Pablo
--Matthei Fornet, Evelyn
--Muñoz Aburto, Pedro
--Navarro Brain, Alejandro
--Novoa Vásquez, Jovino
--Orpis Bouchón, Jaime
--Pérez San Martín, Lily
--Pérez Varela, Víctor
--Pizarro Soto, Jorge
--Quintana Leal, Jaime
--Rincón González, Ximena
--Rossi Ciocca, Fulvio
--Ruiz-Esquide Jara, Mariano
--Sabag Castillo, Hosaín
--Tuma Zedán, Eugenio
--Walker Prieto, Ignacio
--Walker Prieto, Patricio
--Zaldívar Larraín, Andrés
Concurrió, además, el Ministro Secretario General de la Presidencia, señor Cristian Larroulet Vignau.
Actuó de Secretario el señor Carlos Hoffmann Contreras, y de Prosecretario, el señor José Luis Alliende Leiva.
II. APERTURA DE LA SESIÓN
--Se abrió la sesión a las 16:19, en presencia de 19 señores Senadores.
El señor PIZARRO (Presidente).- En el nombre de Dios, se abre la sesión.
III. TRAMITACIÓN DE ACTAS

El señor PIZARRO (Presidente).- Las actas de las sesiones 38ª, ordinaria, en 3 de agosto; 39ª, especial, y 40ª, ordinaria, ambas en 4 de agosto, todas del año en curso, se encuentran en Secretaría a disposición de los señores Senadores, hasta la sesión próxima, para su aprobación.
IV. CUENTA

El señor PIZARRO (Presidente).- Se va a dar cuenta de los asuntos que han llegado a Secretaría.

El señor ALLIENDE (Prosecretario).- Las siguientes son las comunicaciones recibidas:
Mensajes
Cuatro de Su Excelencia el Presidente de la República, con los que retira y hace presente la urgencia, calificada de "simple", respecto de las siguientes iniciativas:

1.- Proyecto de ley, en trámite de Comisión Mixta, que crea el Ministerio de Seguridad Pública y el Servicio Nacional para la Prevención del Consumo y Tráfico de Drogas (boletín N° 4.248-06).

2.- Proyecto de reforma constitucional, iniciado en moción de los Honorables señores Allamand, Cantero, Espina, García y Romero, que reconoce el aporte de los pueblos originarios a la conformación de la nación chilena y proyecto de reforma constitucional que reconoce a los pueblos indígenas de Chile (boletines números 5.324-07 y 5.522-07, refundidos).

3.- Proyecto de ley que crea el Tribunal Ambiental (boletín N° 6.747-12).

4.- Proyecto de ley sobre recuperación y continuidad en condiciones críticas y de emergencia del sistema público de telecomunicaciones (boletín N° 7.029-15).
--Quedan retiradas las urgencias, se tienen presentes las nuevas calificaciones y se manda agregar los documentos a sus antecedentes.
Oficios
De Su Excelencia el Presidente de la República, con el cual comunicó que se ausentaría del territorio nacional entre los días 5 y 8 de agosto en curso, ambos inclusive, en visita oficial a la ciudad de Quito, República del Ecuador, y para participar en la ceremonia de transmisión del mando presidencial en la ciudad de Bogotá, República de Colombia.
Informó, además, que durante su ausencia lo subrogaría, con el título de Vicepresidente de la República, el Ministro titular de la Cartera del Interior, señor Rodrigo Hinzpeter Kirberg.
--Se toma conocimiento.
Tres de la Honorable Cámara de Diputados:
Con los dos primeros comunica que ha aprobado las siguientes iniciativas:

1.- Proyecto que exceptúa a la Empresa Nacional del Petróleo (ENAP) de la aplicación del artículo 15 de la ley N° 20.402, que crea el Ministerio de Energía (con urgencia calificada de "suma") (boletín N° 7.022-08).
--Pasa a la Comisión de Minería y Energía.

2.- Proyecto de ley que evita el no pago de la tarifa en vehículos de la locomoción colectiva (con urgencia calificada de "suma") (boletín N° 6.948-15).
--Pasa a la Comisión de Transportes y Telecomunicaciones.
Con el tercero informa que determinó, previo acuerdo del Senado, el archivo de las siguientes iniciativas:

1.- Proyecto de ley, iniciado en moción de los Honorables señores Prokurica, Espina, García y Horvath y del entonces Senador señor Lavandero, que establece la obligación de consignar el significado en español de los nombres de origen de accidentes geográficos, ciudades, poblados y bienes nacionales de uso público (boletín Nº 3.302-04).

2.- Proyecto de ley, iniciado en moción de los Honorables señores Pizarro y Ruiz-Esquide, que modifica la Ley Orgánica Constitucional de Enseñanza, en materia de educación sexual (boletín Nº 4.514-04).

3.- Proyecto de ley, iniciado en moción de los entonces Senadores señores Gazmuri y Núñez, que modifica la Ley Orgánica Constitucional de Enseñanza, para incorporar el título profesional de geólogo entre aquellos que requieren el grado de licenciado universitario (boletín N° 5.037-04).
--Se accede a lo solicitado.
Dos de la Excelentísima Corte Suprema, con los cuales emite su parecer, de conformidad a lo dispuesto en el artículo 77 de la Constitución Política de la República, respecto de las siguientes iniciativas:

1.- Proyecto de ley, iniciado en moción del Honorable señor Allamand, en primer trámite constitucional, que regula la figura contractual denominada "acuerdo de vida en común" (boletín N° 7.011-07).

2.- Proyecto de ley que modifica el régimen jurídico del transporte público concesionado (boletín N° 7.085-15).
--Se toma conocimiento y se remiten los documentos junto a sus antecedentes.
Cinco del Excelentísimo Tribunal Constitucional:
Con los dos primeros remite igual número de copias autorizadas de las resoluciones dictadas en las acciones de inaplicabilidad por inconstitucionalidad de los artículos 7° de la ley N° 18.196; 7°, letra ñ), de la ley N° 18.755, y décimo, letra h), de la ley N° 20.285, sobre Acceso a la Información Pública.
--Se toma conocimiento y se remiten los documentos a la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento.
Con los tres siguientes remite igual número de copias autorizadas de las sentencias dictadas en las acciones de inaplicabilidad por inconstitucionalidad de los artículos único de la ley N° 20.028; 364 y 372 a 387 del Código Procesal Penal; 390 del Código Penal, y 38 de la ley N° 18.933.
--Se toma conocimiento y se manda archivar los documentos.
Dos del señor Ministro del Interior, con los cuales responde igual número de oficios enviados en nombre de la Honorable señora Rincón, referidos a información acerca de la situación laboral que indica en la Intendencia de la Región del Maule y las Gobernaciones Provinciales respectivas.
Del señor Ministro de Justicia, con el que contesta un oficio cursado en nombre de los Honorables señor Bianchi, señora Pérez (doña Lily) y señores Chahuán, Horvath y Prokurica, acerca de la posibilidad de enviar a tramitación legislativa un proyecto de ley que contemple las ideas contenidas en la moción que presentaron para exceptuar del principio de gratuidad de la Defensoría Penal Pública a los condenados que indica y otorgar a los organismos policiales la facultad de recabar determinados antecedentes de las empresas de transporte, la que fue declarada inadmisible por comprender una materia de la iniciativa exclusiva de Su Excelencia el Presidente de la República.
Del señor Ministro de Obras Públicas, con el que da respuesta a un oficio remitido en nombre del Honorable señor Frei, en relación con la necesidad de acelerar el proceso de concesión de la Ruta 5 Norte en el tramo La Serena-Vallenar.
De la señora Ministra de Bienes Nacionales, con el que contesta un oficio enviado en nombre del Honorable señor Horvath, respecto de la declaración de área de interés turístico del cerro San Lorenzo, en la Región de Aysén, y la posibilidad de denominarla con el nombre de Juan Steffen, explorador de la Patagonia Occidental.
Del señor Vicepresidente Ejecutivo de la Corporación de Fomento de la Producción, con el cual responde un oficio expedido en nombre del Honorable señor Navarro, en cuanto a los contratos de arriendo que dicha institución ha celebrado con la Asociación Chilena del Litio y SOQUIMICH para la explotación del litio.
Del señor Director de la Biblioteca del Congreso Nacional subrogante, con el que contesta un oficio cursado en nombre del Honorable señor Letelier, sobre diversos antecedentes relacionados con las pertenencias de la Corporación de Fomento de la Producción en el Salar de Atacama para explotar el litio.
--Quedan a disposición de los Honorables señores Senadores.
Informes
De la Comisión de Transportes y Telecomunicaciones, recaído en el proyecto de ley, en primer trámite constitucional, que modifica el régimen jurídico del transporte público concesionado (con urgencia calificada de "suma") (boletín N° 7.085-15).
De la Comisión de Derechos Humanos, Nacionalidad y Ciudadanía, recaído en el proyecto de ley, iniciado en moción de los Honorables señores Chahuán y Tuma, en primer trámite constitucional, que concede la nacionalidad chilena, por especial gracia, al señor Sergio Abad Antoun (boletín N° 7.042-07).
--Quedan para tabla.
Mociones
De los Honorables señores Tuma, Bianchi, Gómez, Horvath y Quintana, con la que inician un proyecto de ley que establece los derechos del usuario de servicios financieros (boletín N° 7.120-03).
--Pasa a la Comisión de Economía.
De los Honorables señores Chadwick, Coloma y Longueira, con la que dan inicio a un proyecto de ley que reconoce la calidad de legítimo ocupante de inmueble dañado a causa de la catástrofe del 27 de febrero (boletín N° 7.121-14).
--Pasa a la Comisión de Vivienda y Urbanismo.
De los Honorables señores Bianchi, Chahuán, Horvath y Tuma, con la que inician un proyecto de ley relativo al contrato de trabajador de temporada (boletín N° 7.122-13).
--Pasa a la Comisión de Trabajo y Previsión Social.
De los Honorables señores Chadwick, Allamand y Cantero, con la que inician un proyecto de ley sobre violencia escolar (boletín N° 7.123-04).
--Pasa a la Comisión de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología.
De los Honorables señor Bianchi, señora Rincón y señor Muñoz Aburto, con la que dan inicio a un proyecto de ley sobre responsabilidad de las personas naturales que componen una sociedad (boletín N° 7.124-07).
--Pasa a la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento.
El señor PIZARRO (Presidente).- Terminada la Cuenta.

PREOCUPACIÓN POR MINEROS ATRAMPADOS EN YACIMIENTO EN ATACAMA. OFICIO

El señor PIZARRO (Presidente).- Antes del homenaje en memoria del ex Senador señor Luis Corvalán, queremos expresar la permanente preocupación de esta Corporación por la situación que aqueja a nuestros compatriotas atrampados en la mina San José, de Copiapó.
Solicito el acuerdo de la Sala para enviar un saludo a sus compañeros de trabajo, a sus familiares.
Todos esperamos que se puedan obtener a la brevedad resultados positivos en las labores de rescate que se están efectuando. Lógicamente, acompañaremos tanto en el sentimiento como en todas y cada una de las tareas que se requieren para el éxito del esfuerzo desplegado, que todos los chilenos estamos presenciando con gran dolor y sufrimiento.
Tiene la palabra la Honorable señora Allende.

La señora ALLENDE.- Señor Presidente, en primer lugar, como Senadora de la Región de Atacama, le agradezco sus palabras.
Anoche regresamos con el Primer Mandatario después de haber acompañado cuatro días a los familiares, y solamente quiero atestiguar la grandeza, el estoicismo y la actitud ejemplar de esas personas.
El solo pensar en la realidad de los 33 mineros atrampados hace ya casi cinco días es en verdad dramático. Creo que se están viviendo las horas más complejas. Quiero que se sepa que el problema no es nada sencillo ni fácil; pero, como los mismos familiares lo dicen, no hay que perder la esperanza.
Así que, junto con un reconocimiento por sus expresiones, señor Presidente, y con adherirme a ellas, deseo dar este testimonio -repito-, porque me parece que realmente es preciso consignar el comportamiento a que hago referencia.
Y, por cierto, cabe manifestar que el Gobierno no ha escatimado recursos y que han prestado una colaboración enorme la empresa pública, la privada, las compañías mineras, la comunidad, toda la Región de Atacama, todo el país, haciéndose presentes en este momento, solidariamente, sea con maquinaria, sea con técnicos, sea con profesionales, sea con operadores, en todas las formas inimaginables.
La idea, por lo tanto, era que el Senado supiera lo anterior de buena fuente. Mi Honorable colega Prokurica se quedó allá. Y estimo legítimo, en nombre de la Región de Atacama, que representamos, dar a conocer aquí lo que he señalado y pedir, si es posible, que un proyecto de acuerdo en la materia no tenga que pasar a Comisión, para que ojalá pueda ser aprobado por la Sala.
He dicho.

El señor PIZARRO (Presidente).- Sin duda, ese texto, una vez presentado, se aprobará como corresponde, Su Señoría. No hay problema.
El Honorable señor García hizo llegar también la información relativa al Senador señor Prokurica, de la cual se deja expresa constancia.
Si no existen objeciones, se enviará un oficio en los términos expuestos por la Mesa.
--Así se acuerda.


HOMENAJE EN MEMORIA DE EX SENADOR SEÑOR LUIS CORVALÁN LÉPEZ

El señor PIZARRO (Presidente).- A continuación se llevará a cabo el homenaje en memoria del ex Senador señor Luis Corvalán Lépez.
Tiene la palabra el Honorable señor Navarro.

El señor NAVARRO.- Señor Presidente; señores Senadores; Diputados que nos acompañan; dirigentes del Partido Comunista de Chile presentes; familiares de don Luis Corvalán que nos honran con su presencia; señora Lily Castillo, viuda de don Luis Corvalán, gracias por estar aquí; compañeras y compañeros; señoras y señores:
He solicitado hacer uso de la palabra en esta Corporación para rendir homenaje a Luis Corvalán Lépez, quien falleció el pasado 21 de julio, no solo por tratarse de un ex Senador de la República, sino también, sin duda, de un actor relevante en muchas décadas de la política chilena y cuyo legado la historia sabrá recoger en muchas de sus páginas.
Y aun cuando lo lógico sería partir por hacer una reseña biográfica de su extensa y fructífera vida, describiendo algunos aspectos de su labor parlamentaria, como se usa en estos casos, o enumerando los múltiples hechos y momentos políticos en los cuales le tocó ser protagonista en nuestro país, la verdad es que, leyendo los numerosos antecedentes que he tenido a la vista, he preferido quedarme con el ser humano que fue hijo de Moisés y Adela, esposo, padre, profesor normalista, reportero, militante, dirigente y parlamentario a lo largo de envidiables casi 94 años.
Aunque en esta Corporación debiera destacar que Luis Corvalán fue Senador por la entonces Séptima Agrupación Provincial, que comprendía Ñuble, Concepción y Arauco, para el período 1961-1969 y después por la Tercera Agrupación Provincial, que consideraba Aconcagua y Valparaíso, para el período 1969 a 1977, prefiero decir que me he sentido honrado de saber que, si bien nació allá por 1916 en Pelluco, en la actual Región de Los Lagos, estudió en el Liceo de Tomé, donde fue profesor su padre, don Moisés Corvalán Urzúa, localidad aquella que tantas veces he visitado como parlamentario.
Diré que a partir de ahora, habiendo conocido antecedentes de su infancia y juventud, recordaré que don Luis y Renán Fuentealba jugaron, siendo aún niños, en los patios del Liceo de Tomé; que conoció y recorrió centenares de veces, como yo mismo lo he hecho, el cerro California, el cerro Estanque, Coliumo y Dichato, sectores tradicionales llenos de identidad, donde vive gente modesta, pero de mucho esfuerzo y trabajo.
En adelante, no olvidaré contarles a los jóvenes de Tomé que se empinan en los movimientos sociales, en la inquietud cívica, sindical y política, que un hombre de la talla de Luis Corvalán tomó la decisión de expresar sus ideales, valores y principios ingresando a militar al Partido Comunista de Chile, tras una reunión a la que asistió en esa comuna, a comienzos de 1932, invitado por un zapatero de apellido Palma, y que la primera manifestación en la que participó, instado por Manuel Cid, fue una marcha callejera y un mitin que se realizaron en Tomé el 26 de julio de 1931, día en que cayó el Gobierno de Carlos Ibáñez del Campo.
Podré contarles a los jóvenes de la provincia de Ñuble que Luis Corvalán se formó como maestro en la Escuela Normal de Chillán, la cual ocupaba entonces una manzana completa frente a la plaza Victoria, donde los jóvenes con vocación de enseñar no solo aprendían los mejores métodos de educación de la época, sino que también, por la alta probabilidad de tener que hacer clases en una escuela rural o campesina, debían dedicar un día de la semana a aprender y desarrollar tareas agrícolas en una parcela que el establecimiento tenía en Chillán Viejo. A esta última debieron trasladarse permanentemente luego de que el terremoto de 1939 derrumbara el edificio en la ciudad.
Por cierto, durante su estadía en Chillán, el joven Corvalán pudo conocer de cerca los efectos de la llamada "Gran Depresión capitalista" de 1929 y del cierre de las oficinas salitreras en el norte, que se tradujeron en cientos de familias completas que volvieron a sus tierras de origen buscando reinsertarse, pero que por mucho tiempo, como él mismo pudo constatarlo, concurrían diariamente hasta las puertas traseras de la Escuela Normal para recibir las sobras de la comida, lo que lo impresionaba y reafirmaba en sus convicciones fuertemente.
Como profesor, trabajó en la Escuela Santa María, de Iquique, la misma en que se había perpetrado la matanza de la cual se conmemora más de un siglo; luego, en Valdivia, y más tarde nuevamente en Iquique, esta vez en la Escuela Centenario N° 6, construida con los aportes de la numerosa colonia china de esa ciudad.
Tras haberse desempeñado en el vespertino "Frente Popular" y haber sido secretario personal del entonces Secretario General del Partido Comunista, Carlos Contreras Labarca, se integró a las labores periodísticas en el diario "El Siglo", del que más tarde llegaría a ser su director.
El 1950 fue elegido por primera vez como miembro del Comité Central de su Partido, del que también fue Encargado Nacional de Propaganda, para ser más tarde, entre 1959 y 1989, su Secretario General, es decir, por 30 años.
Tras asumir como Senador por la que actualmente es la Región del Biobío, que hoy me honro en representar, integró las entonces Comisiones de Economía y Comercio, de Educación Pública y Mixta de Presupuestos.
En la Sala del Senado alzó su voz en muchas ocasiones, tanto para plantear asuntos y problemas de la Región, como para fijar posición sobre diversas cuestiones de interés nacional, muchas de las cuales siguen siendo motivo de preocupación.
Entre sus primeras intervenciones, lo vemos:
-Rindiendo homenaje a Lenka Franulic, tras su deceso.
-Reclamando por la represión de Carabineros en contra de una manifestación estudiantil.
-Hablando sobre el nuevo Gobierno instalado en Cuba, tras la Revolución.
-Refiriéndose a la modificación de las leyes sobre sueldos del personal de las Fuerzas Armadas y Carabineros.
-Haciendo presente la situación de los damnificados por el terremoto de 1960.
-Manifestándose acerca de los problemas de las provincias de Ñuble, Concepción y Arauco; las dificultades de los arroceros de Ñiquén; la constitución de sindicatos agrícolas; la jubilación de los obreros mineros; las infracciones a la justicia social; la situación de la Escuela Normal de Chillán y la Unificada de San Carlos; la maquila ante los compradores de molino; las rentas del Magisterio nacional; la rebaja de pasajes en ferrocarriles y líneas aéreas a delegaciones deportivas.
-Expresando su parecer sobre la detención arbitraria de una persona en Curanilahue; el desalojo de mapuches en la reducción de Hueñalihuén, en Cautín, y la planta y los sueldos del personal del servicio de prisiones.
Tal vez han cambiado los nombres, pero muchas de esas problemáticas siguen vigentes.
También son muy recordadas, al menos, tres de sus intervenciones en la Sala del Senado:
-Cuando manifestó su posición crítica al proyecto de Reforma Agraria presentado por el Gobierno de don Jorge Alessandri.
-Al pronunciarse el 11 de julio de 1971 sobre la modificación constitucional que permitió la nacionalización de la explotación del cobre.
-Y cuando rindió homenaje en memoria del asesinado Presidente norteamericano John Kennedy.
Entre sus mociones más destacadas se hallan las que proponían nacionalizar la Compañía Chilena de Teléfonos, la Compañía Chilena de Electricidad y la industria salitrera nacional.
Otra iniciativa de su autoría buscaba introducir enmiendas a la Ley de Propaganda Electoral, a fin de beneficiar la transparencia del sistema electoral.
Aun cuando hoy le rendimos homenaje en su condición de ex Senador, lo más seguro es que Luis Corvalán será recordado por su dilatada trayectoria como dirigente del Partido Comunista de Chile, heredero del legado de Luis Emilio Recabarren y de Elías Lafferte.
Aprovecho la ocasión para decir a quienes fueron sus adversarios políticos y a algunos que todavía hoy podrían tener dicha calidad que Luis Corvalán no es la caricatura que han hecho quienes pretenden rebajar su tremenda calidad humana y su capacidad política al recordar que alguna vez le llamaron "Condorito", o quedándose en frases que en su momento fueron sacadas de contexto para tratar de justificar una represión dictatorial, como cuando anunció la política de rebelión popular de masas o cuando señaló, tras los hechos de Carrizal Bajo, que había que guardar algunos "fierros", por si las moscas.
Luis Corvalán fue un enorme dirigente político, quien en la génesis y en la dirección del proceso de la Unidad Popular fue un incansable e intransigente defensor de la línea que buscaba ampliar la base social y política del Gobierno del Presidente Allende, y quien, por sobre todas las cosas, siempre estuvo del lado de los que creían que el camino de la construcción del Socialismo chileno, o la vía chilena al Socialismo, estaba pavimentada por la democracia y la paz.
Tras el golpe militar, Corvalán fue detenido el 26 de septiembre camino a su casa de seguridad. Fue llevado a la Escuela de Telecomunicaciones de Antonio Varas y luego, a la Escuela Militar. También estuvo preso en la Escuela de Infantería de San Bernardo, en isla Dawson y en los campos de concentración de Ritoque y Tres Álamos, para ser finalmente expulsado del país el 18 de diciembre de 1976 y "canjeado", en Zurich, por el entonces disidente soviético -hoy candidato ruso- Vladimir Bukovski: don Luis se asiló en la Unión Soviética, mientras Bukovski partía a Estados Unidos.
Pese a todo lo vivido durante su detención, el peor de los golpes lo recibió cuando su esposa y una de sus hijas llegaron hasta Tres Álamos un día que no era de visita para hablar con él, por cinco minutos en el descanso de una escala, y comunicarle que su hijo Luis Alberto, de veintiocho años, ingeniero agrónomo, militante de las Juventudes Comunistas de Chile, había fallecido en Bulgaria.
¡Luis Alberto había sido detenido el 14 de septiembre de 1973 y recluido en el Estadio Nacional!, donde fue torturado con golpes y aplicación de electricidad, con especial crudeza el 17 de ese mes, según señalaron los testigos ante la Comisión Rettig. Posteriormente, fue trasladado al campo de concentración de Chacabuco y liberado el 30 de julio de 1974. Se radicó primero en México y luego, en Bulgaria. En este último país los médicos le indicaron que su salud se encontraba sumamente resentida. El informe Rettig dice, en su página 114, que la Comisión adquirió la convicción de que en su muerte tuvieron responsabilidad agentes estatales que le infligieron torturas durante su detención, las que constituyeron violación de sus derechos humanos y afectaron su salud.
Por eso, en noviembre del año pasado, don Luis, su esposa y sus familiares, junto a la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos, presentaron querellas por el caso de Luis Alberto y los de Arnoldo Flores Echeverría y Óscar Tapia Leyton, cuyas muertes aún siguen sin tener responsable ni sanciones.
Quienes conocieron la preocupación permanente de don Luis Corvalán por la verdad y la justicia saben que en las últimas semanas de su vida estuvo muy preocupado por la nueva ofensiva de búsqueda de impunidad para violadores de derechos humanos, suscitada a partir del debate sobre un eventual indulto general.
Él nunca estuvo por la revancha ni el odio, pero sí, por la justicia, por la verdad y, sobre todo, ¡contra la desmemoria!, que insiste en tratar de insertarse en nuestra sociedad.
La partida de Luis Corvalán ha sido noticia no solo en Chile, sino en gran parte del mundo, porque como líder de su Partido por tantos años, uno de los partidos comunistas más antiguos y arraigados del planeta, recorrió el globo entregando el mensaje de construcción del Socialismo chileno y solidarizando activamente con aquellos pueblos que luchaban por su materialización.
Por ese motivo, durante su detención en Chile recibió una enorme solidaridad internacional. Y en su dilatada vida se le dieron numerosas distinciones. Las enumero para testificarlo:
-Premio Lenin de la Paz, que entregó la Unión Soviética en 1974.
-Grado de Doctor Honoris Causa, que le confirió la Universidad Autónoma de Puebla, en junio de 1977.
-Medalla Julius Fucik, de la Organización Internacional de Periodistas.
-Orden Carlos Marx, de la República Democrática Alemana.
-Orden Playa Girón, de Cuba.
-Orden Jorge Dimitrov, de Bulgaria.
-Orden Clemente Gottwald, de Checoslovaquia.
-Orden de la Gran Estrella, de Hungría.
-Orden Tudor Vladimirescu, de Rumania.
-Orden Suje Bator, de Mongolia.
-Insignia de Honor del Komsomol, de la Unión Soviética.
-Medalla Artur Becker, de la Juventud Libre Alemana de la RDA.
-Medalla de la Federación Sindical Mundial.
-Medalla Joliot-Curie, del Consejo Mundial de la Paz.
-Medalla de la Federación Mundial de la Juventud Democrática.
-Medalla 17 de Noviembre, de la Unión Internacional de Estudiantes.
-Medallas de Honor de las ciudades de Bolonia y Parma, en Italia.
El pasado 6 de junio de este año su Partido le entregó su máxima distinción: la Medalla Luis Emilio Recabarren.
Y como no todo es política, el 30 de octubre de 2008 el Servicio Nacional del Adulto Mayor (SENAMA) también lo premió por su trayectoria pública.
Consecuente hasta el final, hace algunos años, en una entrevista que dio a la Biblioteca del Congreso Nacional, ante la pregunta: "¿Cuál es su legado?", en forma sencilla y natural respondió: "Luchar hasta el último día de mi vida". Y así fue.
Por eso hoy expreso mi saludo y respeto en memoria del ex Senador Luis Corvalán, los que transmito con afecto y cariño -como él prodigó durante toda su vida- a su compañera de siempre, a sus hijos, a su familia, a sus compañeros de Partido.
Como dijo Martí: "Se es más cuando se vive entre buenos y con cada bueno que se va se es menos". Tras la partida de don Lucho Corvalán -porque le decían "don Lucho"-, ciertamente somos un poco menos.
Por ello, en adelante, ante las múltiples tareas que deberá enfrentar la Izquierda chilena, su figura, al igual que la de Salvador Allende, de Gladys Marín, de Carlos Lorca, de Víctor Jara y de tantos otros, seguirá estando presente para acompañarnos en esos procesos, en los que seguramente le habría gustado participar.
Por eso, con cariño y cercanía, pero también con respeto, Luis Corvalán será recordado siempre como ¡don Lucho!, el compañero Corvalán.
Muchas gracias.
--(Aplausos en la Sala y en tribunas).

El señor PIZARRO (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable señor Escalona.

El señor ESCALONA.- Señor Presidente, estimados Senadores y Senadoras, Diputados del Partido Comunista que nos acompañan desde las tribunas, compañeras y compañeros que asisten a este homenaje solemne:
No cabe duda alguna de que Luis Corvalán fue un actor principal de la política chilena del siglo XX. Sería muy difícil imaginarse treinta o cuarenta años del acontecer nacional de mediados de esa centuria sin su presencia. La historia reconocerá su aporte como un organizador de excepción.
Seguramente, el Partido Comunista de Chile fue reconocido como una de las principales colectividades políticas "de Occidente" en la época de la Guerra Fría por las sobresalientes cualidades organizativas de Luis Corvalán, que transformó a aquel en una enorme fuerza política y social y -en lenguaje de ese entonces- en un gran partido de masas.
Y tampoco se explicaría la historia de Chile del siglo XX sin el aporte del Partido Comunista a la formación de la Unidad Popular y a la elección de Salvador Allende como Presidente de la República. Y, por cierto, el sello de Luis Corvalán ahí estuvo presente.
Su manera de hacer política -su estilo- era, para algunos, campechana; para otros, astuta, inteligente o hábil.
Fue uno de los factores que anudaron los entendimientos que posibilitaron que una diversidad significativa de partidos con origen en la Izquierda, pero más allá de ella, se transformara en una instancia capaz de ofrecer una alternativa de gobierno a Chile y ganara la primera mayoría relativa en las elecciones presidenciales de septiembre del año 70.
Y sin la capacidad de entendimiento de Luis Corvalán difícilmente la Unidad Popular de entonces habría logrado los acuerdos necesarios con la Democracia Cristiana para que Salvador Allende fuera ratificado por el Congreso Pleno como el Mandatario electo de la nación en octubre del año 70.
Dicho de otra manera, al homenajear a Luis Corvalán, estamos recordando mucho más que al Secretario General del Partido Comunista de Chile durante cerca de treinta años; estamos rememorando a una persona notable, de singulares capacidades políticas, de cualidades que tal vez ahora, en el vértigo de acontecimientos mediáticos que se suceden unos a otros sin ilación ni continuidad y en una marea confusa frente a la opinión pública, nos permitan reconocer en rigor una condición muy importante para una nación: la de dirigente político.
Porque Luis Corvalán nació, vivió y murió para la política: para una política de Izquierda y popular. Independiente de las diferencias que con él se hayan sostenido -porque las tuvimos-, hay que admitir que fue un político por excelencia.
Luis Corvalán no fue un simple agitador; no levantó demandas insensatas con fines de corto plazo. Su característica como jefe del PC chileno se puede perfectamente comparar con la de otros partidos comunistas del continente. Y sin lugar a dudas, se observa una diferencia notable. Con la sola excepción del que él dirigía, todos los partidos comunistas de la región eran fuerzas aisladas, arrinconadas y sin ninguna opción de ejercer una influencia real en la política de sus países. Si aquí ocurrió lo contrario, naturalmente no se debe única y exclusivamente a la persona de Luis Corvalán. Pero también se debe a él y a una mirada amplia, de país, que posibilitó que Chile fuera el primer lugar donde se intentó construir el Socialismo en democracia y libertad.
Por ese motivo, Salvador Allende tuvo en Luis Corvalán a uno de sus más activos colaboradores.
Las "Memorias" del Cardenal Raúl Silva Henríquez son elocuentes al señalar -además, constituyen un testimonio para la conciencia histórica de nuestro país- que, en el mes de agosto de 1973, ya desarrollada la crisis política que no logró una solución democrática y que, desafortunadamente para Chile, fracturó nuestro sistema de gobierno, el núcleo de la dirigencia del Partido Comunista, encabezado por Luis Corvalán, solicitó los oficios del Cardenal con el objeto de llevar adelante conversaciones, diálogos y consultas políticas que posibilitasen la exploración de alternativas que evitaran lo que fatalmente ocurrió: el golpe de Estado.
Más que cualquiera de nosotros, el Cardenal Raúl Silva Henríquez es un testimonio fidedigno de los esfuerzos de quienes pensaban que era indispensable impedir el golpe de Estado y la tragedia que sobre Chile se descargó. Como todos sabemos, tales conversaciones o diálogos no dieron ningún fruto.
Es posible que la consigna de "No a la guerra civil", planteada por el Partido Comunista en aquellos años, fuera en realidad inexacta. En Chile no estaba en discusión si habría o no una guerra civil. Eso -permítanme decirlo con mucha franqueza- no guardaba relación con la realidad. Lo que se hallaba en juego era si habría o no un golpe de Estado, si éramos o no capaces de sostener la democracia, de defender el régimen democrático. No existía relación de fuerzas entre unos y otros. Unos disponían del monopolio del uso de la fuerza, como quedó demostrado el 11 de septiembre de 1973, en perjuicio del propio Corvalán -quien, junto con los dirigentes de la Unidad Popular de entonces, fue relegado a la isla Dawson, encarcelado, maltratado y luego, exiliado-, y otros, por cierto, simplemente no la tenían.
El dilema era la defensa de la democracia.
Yo soy de los que siempre lamentan profundamente que el liderazgo político de la época careciera de la capacidad de comprender este dilema esencial.
Y así fue como, por la incomprensión del proceso histórico que se vivía, se derrumbó el régimen democrático en nuestro país. Y uno de los que más duramente sufrieron las consecuencias de ello fue Luis Corvalán y su hijo del mismo nombre, quien, por las secuelas de las torturas que recibió en el Estadio Nacional, murió dramáticamente pocos años después en el exilio.
A pesar de ello, Corvalán también debe ser reivindicado como un hombre valiente. Porque regresó a Chile; estuvo en la ilegalidad; buscó colaborar, desde su Partido, en la clandestinidad, por la recuperación de la democracia perdida.
No solo fue una persona que incitó a que otros se sacrificaran, sino que tuvo la consecuencia y lealtad consigo mismo y con los suyos de sacrificarse él también y de poner hasta la última gota de su energía en la búsqueda de recuperar para nuestro país la dignidad, la democracia y la libertad.
De manera que, independientemente de las opciones políticas que podamos tener, creo profundamente justo que el Senado de la República hoy le rinda homenaje, ya que no solo fue dirigente del Partido Comunista de Chile, sino que, desde mi punto de vista, fue un profundo representante de nuestra cultura, de la sabiduría popular, de nuestra condición de chilenos.
En consecuencia, ¡rindo homenaje a ese gran compatriota que se llamó Luis Corvalán!
He dicho.
--(Aplausos en la Sala y en tribunas).

El señor PIZARRO (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable señor Ruiz-Esquide.

El señor RUIZ-ESQUIDE.- Señor Presidente, señores Senadores, distinguida familia de nuestro ex colega don Luis Corvalán Lépez, señores representantes del Partido Comunista:
Vengo a esta Sala a rendir un homenaje y a despedir al que fuera Senador don Luis Corvalán. Lo hago en nombre de los Senadores de la Democracia Cristiana y a expresa petición del Vicepresidente de nuestra Corporación, Honorable señor Gómez.
Vengo a rememorar la zona de Ñuble, Arauco, Lota y Biobío, a las cuales hoy represento -al igual que el Senador señor Navarro-, como también lo hiciera aquel hace 40 años.
Vengo además a traer el recuerdo de sus camaradas de esa misma Región a quienes he conocido en mi ejercicio parlamentario.
Vengo a destacar aquí la visión de un hombre coherente y consecuente, con el cual nunca fuimos amigos cercanos, pero con el que mantuvimos respeto cuando nos tocó enfrentar momentos durísimos para Chile.
Era un hombre, como dicen en el sur, con quien se podía ir a la montaña, porque había certeza de que cumpliría los compromisos contraídos.
Vengo a dar testimonio de su inteligencia política. Cuando su Gobierno pasaba por momentos dificilísimos y ya temblaba, él luchaba por la racionalidad y para evitar el golpe militar que ambos queríamos detener.
Lo recuerdo en el último debate que sostuvimos en la radio de la Universidad de Chile el 9 de septiembre de 1973 en la noche, con un planteamiento fuerte y duro, pero con una fría racionalidad, tratando de llamar a la conversación que evitara que la sangre llegase al río.
Fue un debate muy duro. Nosotros, pese a estar en la Oposición, coincidimos permanentemente con él en cuanto a la necesidad de impedir a toda costa el golpe militar, porque este no mejoraría la circunstancia de nadie, sino que empeoraría la de todos.
Vengo a acompañar a sus camaradas -desde nuestra propia perspectiva- en su sufrimiento y en su dolor por la partida de su dirigente político, quien fuera un chileno notable.
Cual sea la respuesta que se tenga a las preguntas que sobre él se hacen, no cabe duda de que se trató de un hombre que hizo historia en Chile durante 30 años.
Ellos sufren hoy por alguien que se fue, como sufrimos todos en el Senado cuando una persona muy principal, o muy cercana o extremadamente importante para nuestras ideas, deja de estar entre nosotros.
Vengo a decirles también a los señores Senadores, sin otra razón que el haberlo conocido en esas circunstancias, que las aspiraciones que Luis Corvalán expresaba desde el Senado -hemos leído toda su bibliografía- se han ido construyendo prácticamente con el correr del tiempo. Pero aún muchas de ellas están inconclusas.
Materias relacionadas con la Región que representó siguen todavía pendientes. Y cuando uno lee sus oficios, pareciera que nada hubiera cambiado en el tiempo, sobre todo la obligación del Senado de corregirlas.
Vengo a expresar, en nombre de mi Partido y del Senador señor Gómez, mis respetos a su memoria, porque en su hoja de legislador no hubo proyectos, mociones, intervenciones, discursos que apuntaran a favorecer el dinero, sino a los trabajadores; a solicitar la opresión, sino la libertad; a luchar por mantener una sociedad que en su tiempo era tal vez más opresora que hoy, sino para hablar de libertad, de relaciones humanas, de avenimiento entre los partidos, las personas y las naciones, aunque pensáramos en aquel entonces, con toda razón y con mucha fuerza, que las naciones a las cuales adhería desde su punto de vista político no representaban lo que realmente él aspiraba como hombre. Lo comprobó más tarde y lo reconoció con extraordinaria hombría.
Vengo a decirles que quienes pensamos de manera distinta a la suya reconocemos en él el valor de la tenacidad para difundir sus ideas y su limpieza política en el debate.
Luis Corvalán Lépez, en medio del tráfago del quehacer político y, también, de sus grandezas, representó hasta su muerte el sacrificio y dolor para difundir sus ideas, a veces por represión, a veces por el no cumplimiento y por el sufrimiento de luchar sin esperanzas.
Luis Corvalán representó esa coherencia entre el pensar y el actuar: vivir, hablar y escribir de la misma manera, aunque estuviese equivocado.
Representó también una forma de ilusión, que todos soñábamos en nuestras propias perspectivas, por el cambio social, por una nueva sociedad, por la esperanza de transformar a Chile, por nuestras preocupaciones, por la juventud, por la necesidad de tener algo en qué pensar.
Desde su visión, las ideas que tenía las soñó con la misma fuerza que la de todos quienes estamos en esta Sala, tratando siempre de mejorar nuestro país y de convencer con nuestras ideas.
Representó también una época de profundos trastornos que rompieron la paz entre nosotros. Muchos, en el Senado, fueron sus amigos -como aquí se ha dicho-, y numerosos otros, detractores profundos. Sin embargo, todos reconocieron que su gran valor y su testimonio ante el país fueron su lucha por defender lo que consideraba justo, actuando siempre dentro del marco de su convicción política y filosófica.
Permítanme dar a conocer una experiencia personal y una visión en retrospectiva.
El quiebre de Chile, en mi concepto, fue responsabilidad de todos. No hay nadie que pueda sentir que no la tuvo. Quizás, quienes disponíamos de más recursos para actuar ostentábamos mayor responsabilidad que aquellos que no disponían de otra forma para expresar sus puntos de vista.
A veces deploro que los que estábamos de acuerdo en que no hubiera golpe militar ni opresión en Chile, y que deseábamos encauzar la vida política chilena de todos los sectores de manera distinta -dadas las divergencias existentes-, no hubiésemos alcanzado el consenso necesario para decir: "No más de esto, pero tampoco de lo otro, porque la guerra nada resuelve y la violencia solo engendra violencia".
Luis Corvalán logró victorias que lo llenaron de alegría, y fue -como dije- un hombre clave en el Gobierno y en la Unidad Popular, a la que condujo, ayudó y nutrió con una fría claridad para conseguir su triunfo.
Sin embargo, perdió en medio de una vorágine política, convirtiéndose en testimonio vivo del aprecio de sus amigos en el exterior.
Hoy día, en el lugar que esté, según su visión de la eternidad -como expresaba-, nosotros los católicos sabemos que lo volveremos a encontrar. Y también estamos ciertos de que, a pesar de las contingencias terrenales, con su persistencia y la intensidad con que trabajó luego de volver a Chile, fue capaz de lograr que el Partido Comunista tuviera parlamentarios, para así terminar con la desigualdad y la discriminación.
Permítanme, señores Senadores, dar lectura, por expresa petición del Presidente del Senado, a una nota que le enviara el ex Senador Alejandro Toro Herrera:
"Señor Presidente del Senado de la República
"Estimado Senador:
"En conocimiento que el próximo martes se realizará un homenaje al ex senador Luis Corvalán, le agradeceré haga llegar a dicha ceremonia el siguiente mensaje de adhesión:
"ADHESIÓN HOMENAJE EX SENADOR LUIS CORVALÁN LÉPEZ:
"ANTE EL SENSIBLE FALLECIMIENTO DEL EX SENADOR LUIS CORVALÁN LÉPEZ, EXPRESO MIS MÁS SENTIDAS CONDOLENCIAS A SU FAMILIA Y AL PARTIDO COMUNISTA.
"PARA MÍ CONSTITUYE UN HONOR Y ORGULLO HABER SIDO UNO DE LOS NUEVE SENADORES DE LA BANCADA COMUNISTA QUE ENCABEZÓ LUIS CORVALÁN.
"EXPRESO MI RECONOCIMIENTO A SU LEGADO POLÍTICO Y VALORO SU CONTRIBUCIÓN A LA DEMOCRACIA Y SU FRUCTÍFERO TRABAJO LEGISLATIVO.
"ALEJANDRO TORO HERRERA
"EX SENADOR DE LA REPÚBLICA
"DIRECTOR DEL CÍRCULO DE EX PARLAMENTARIOS DE CHILE.".
Señoras y señores, la muerte de alguien muy querido nos derrota y nos hace débiles. Pero cuando se trata de una figura tan importante para su familia y su Partido, o para cada uno de nosotros en particular, debemos mantenerla en nuestros recuerdos, honrarla y quererla por siempre.
Así, su esposa y su familia tienen el derecho y casi la obligación de amar por siempre al ex Senador, que vengo a saludar en nombre de los Senadores de la Democracia Cristiana y del Honorable señor Gómez.
He dicho.
--(Aplausos en la Sala y en tribunas).

El señor PIZARRO (Presidente).- Tiene la palabra la Senadora señora Allende.

La señora ALLENDE.- Señor Presidente, Honorables Senadores, querida familia de Luis Corvalán, compañeros de Partido, quiero esta tarde pronunciar algunas palabras en recuerdo de Luis Corvalán, no solo como Secretario General del Partido Comunista, sino en consideración al hombre que me tocó conocer muy de cerca por haber acompañado a mi padre en todas sus campañas, con quien recorrió el país región por región, pueblo tras pueblo, como una forma de dar testimonio del afecto entre ellos, de la lealtad con que Luis siempre participó en sus campañas, y de la nobleza con que lo apoyó durante todo el período de su Gobierno, incluso en los momentos más difíciles.
Deseo destacar a este profesor de enseñanza básica graduado en la Escuela Normal de Chillán; a este maestro de niños que se convirtió muy joven en un comprometido militante del Partido Comunista, del cual llegó a ser su máximo líder -como aquí ya se expresó- por más de 30 años.
Su trayectoria política es demostrativa de un hombre de excepción, consecuente con sus convicciones, que siempre trabajó de manera infatigable por los más postergados y construyó la unidad de los sectores progresistas que soñaban un Chile más justo y equitativo.
Asumió en plenitud su responsabilidad como militante comunista. Y él mismo decía: "Ser militante y cumplir todos los días con los deberes que ello implica, significa dedicar la vida entera a la lucha por los intereses de los trabajadores, luchar contra la pobreza y la injusticia y por una sociedad sin explotadores ni explotados en la cual todos tengan los mismos derechos. Una persona que dedica su vida a esta causa descubre que la felicidad está en la lucha".
A mi juicio, las palabras citadas lo reflejan plenamente.
Por cierto, siempre lo acompañó esa familia que supo crear con su querida esposa Lily -aquí presente- y con sus cuatro hijos. Lamentablemente, uno de ellos -como se mencionó- falleció a consecuencia de las graves torturas a que fuera sometido en el Estadio Nacional después del golpe de 1973.
Me gustaría hacer mención de las adversidades que vivió Luis Corvalán, como un reconocimiento más de lo que significa ser un militante consecuente:
-Fue expulsado del Magisterio por haber pronunciado un discurso en la plaza pública en apoyo del Frente Popular, que posteriormente triunfaría con Pedro Aguirre Cerda en la década de los treinta.
-Fue detenido en 1943 por proferir "injurias" a Hitler en el diario "El Siglo" -donde trabajó como periodista-, como consecuencia de una querella interpuesta por la Embajada de Alemania.
-En 1947 el Gobierno del Presidente González Videla le impuso la pena de relegación, producto de la ley que proscribió al Partido Comunista.
-En 1952 y 1957 fue recluido en los campos de concentración de Pitrufquén y Pisagua, respectivamente, bajo el Gobierno de Carlos Ibáñez.
-Fue detenido y deportado a la isla Dawson después del golpe de Estado de 1973, y posteriormente llevado a los campos de concentración de Ritoque y Tres Álamos sin ser sometido a juicio, por cierto. Quienes lo recuerdan como prisionero (sus compañeros en Dawson) siempre destacan su dignidad y entereza frente a los malos tratos, características que lo llevaron a recibir su apoyo solidario.
-Finalmente, fue expulsado del país en 1978, regresando de manera clandestina en 1983 para apoyar la organización de su Partido.
Por cierto, en el Senado -el cual integró- se preocupó de los trabajadores y de defender a quienes más lo necesitan.
Y no podemos dejar de señalar que, en una etapa compleja de nuestra historia política, a él le correspondió participar como máximo dirigente del Partido, en el triunfo de la Unidad Popular, en el quehacer de su Gobierno, bajo un clima de gran polarización y enfrentamiento que nos llevó, desgraciadamente, al golpe de Estado.
En ese período, nuestro querido Lucho y el Partido Comunista mostraron madurez política frente a las discrepancias incluso en el seno de la Izquierda, que muchas veces limitaron la unidad de la coalición y la propia capacidad de acción del Gobierno para frenar -lamentablemente- la ofensiva golpista de las fuerzas opositoras apoyadas por el Gobierno de Nixon.
En esa época, Luis Corvalán demostró sabiduría y profunda lealtad -una vez más- al Presidente Allende, y compartió con él a plenitud la estrategia de alcanzar el socialismo en democracia, pluralismo y libertad.
En aquel difícil momento, Lucho Corvalán con algunos parlamentarios y líderes políticos socialistas y democratacristianos, entre ellos Bernardo Leighton, Radomiro Tomic y el Senador Ruiz-Esquide -aquí presente-, intentaron imponer la racionalidad política y evitar el golpe de Estado, cuyas brutales consecuencias conocemos; pero lamentablemente sus esfuerzos se frustraron.
Por último, quiero destacar nuevamente la coherencia en el accionar político de Luis Corvalán, y, sobre todo, realzar a esa persona humana por su sencillez, dignidad y valentía; por el rigor con que ejerció sus cargos; por la unidad de la Izquierda chilena que siempre propició; por ser, como Senador, inclaudicable y comprometido con los trabajadores; por la convicción de que siempre es posible soñar con un Chile distinto, con un Chile mejor.
Deseo homenajear a ese Senador, a ese dirigente, a ese político que vivió momentos tan complejos y que siempre fue tan cercano al Presidente Allende. Incluso compartieron la noche del terremoto de 1971, que los pilló en una reunión en el Palacio de La Moneda.
Pienso que los ideales de justicia, de libertad, de igualdad que abrazó Luis Corvalán siguen teniendo vigencia en el marco de una sociedad moderna que, necesariamente, debe seguir bregando y levantando la voz por los trabajadores, pero que también debe incorporar la defensa del planeta en contra de sus depredadores.
Quiero hacerles llegar a Lily, a toda su familia y a sus compañeros de Partido mis sentimientos de pesar por la pérdida de don Luis Corvalán, lamentando no haber estado presente en esos días para haberlo acompañado, como lo hizo el resto de mi familia.
Pero les digo que nos quedaremos para siempre con el recuerdo de Lucho participando en las campañas, y con esa lealtad y ese cariño con que siempre lo vi cerca de mi padre.
Muchas gracias.
--(Aplausos en la Sala y en tribunas).

El señor PIZARRO (Presidente).- Tiene la palabra el Senador señor Lagos.

El señor LAGOS.- Señor Presidente, señores Senadores, señores Diputados y dirigentes del Partido Comunista de Chile que nos acompañan; familia de don Luis Corvalán Lépez, en especial su viuda Lily y su nieta -a quien diviso en las tribunas-; compañeros y compañeras:
Como representantes del Partido Por la Democracia hemos querido sumarnos a este homenaje, para entregar nuestro saludo y respeto en este día.
Don Luis Corvalán, como se ha mencionado acá, fue Senador por la zona de Ñuble, Concepción y Arauco y por esta Región, en representación de las provincias de Aconcagua y Valparaíso.
Quiero referirme a dos aspectos de su persona.
Primero, a su legado. El Senador señor Navarro hacía referencia a que al preguntarle hace no mucho tiempo a don Luis Corvalán acerca de su legado, él habló básicamente de seguir luchando hasta el final.
Y ahí caben distintas interpretaciones.
Al mirar su vida, para muchos de quienes pertenecen a una generación más joven su figura oscilaba entre un personaje mítico y uno real; una persona a la que pintaban con sombras, y una que representaba una fuerza importante en Chile.
Para el Senador que habla, "luchar hasta el final" es ser coherente. Y la coherencia de don Luis Corvalán radicaba en ser alguien que creyó, a su manera, en un norte: superar desigualdades, pensar en los trabajadores, en los campesinos, en los que tienen poco, en los abusados.
Pero esa coherencia también la demostró desde un Partido, desde lo colectivo -no solo lo individual-, en un país marcado por una realidad que no es la de hoy.
Un Chile donde entre los años 30 y 70 ocurrieron cosas; un Chile en que se levantó la voz; un Chile que tuvo Presidentes progresistas y de derecha; un Chile con una democracia particular y muy peculiar que permitió esa alternancia con menos traumas que los de hoy, en la cual bastaba "tener una mayoría relativa" para ser Presidente y tratar de llevar a cabo un cambio social; y un Chile donde una fuerza política como el Partido Comunista estaba representada en el Senado.
Entonces, al hablar de un homenaje a la coherencia, debo decir que para mí esta no solo se trata de defender una causa común, sino también de poseer la capacidad de arribar a entendimientos y acuerdos. Esa fue la democracia chilena durante mucho tiempo; esas fueron las fuerzas progresistas en Chile. Y ello, a ratos, se echa de menos.
Cuando escucho a personas que tuvieron más participación que yo -el Honorable señor Ruiz-Esquide mencionaba la crisis constitucional y el golpe de Estado- pienso en la incapacidad de llegar a acuerdos.
Muchos de quienes nos hallamos en este Hemiciclo pertenecemos a una generación que heredó lo dejado por aquellos que tuvieron incapacidad de ver lo que iba a ocurrir. Y si tomo por ciertas las palabras que aquí he escuchado, quiere decir que don Luis hizo lo posible -tal vez no lo suficiente- para evitar algo que algunos intuían que sería dramático y doloroso; como lo fue.
Termino diciendo que el recuerdo de don Luis Corvalán permanecerá en muchas personas, gente joven de distintos partidos y colores políticos. Porque la coherencia en política posee un valor: uno cree en ideas y empuja en esa dirección. Y eso trató de hacer don Luis Corvalán, al igual que otros dirigentes.
Es de esperar que cuando rindamos el próximo homenaje a algún dirigente político chileno contemos con una Sala donde las ideas de don Luis Corvalán estén representadas. El año 1973, el Partido Comunista tenía 25 Diputados y 9 Senadores. Hoy, producto de un sistema electoral que no nos satisface, ese conglomerado solo dispone de 3 Diputados y ningún Senador.
Por las razones expuestas, hemos querido rendir el presente homenaje.
En segundo término, algo importante de destacar en un político progresista de izquierda es el impresionante valor que le asignaba a su familia. En las no muchas instancias -debo confesarlo- que tuve oportunidad de intercambiar opiniones con don Luis Corvalán, este tema fue fundamental.
Ello demuestra y reafirma que los afectos y las convicciones en ciertos asuntos también resultan primordiales a la hora de hablar de coherencia.
He dicho.

El señor PIZARRO (Presidente).- De esta manera, el Senado de la República de Chile ha rendido homenaje en memoria del ex Senador don Luis Corvalán Lépez.
Agradezco la presencia de familiares y amigos, y de Diputados, dirigentes, militantes y simpatizantes del Partido Comunista de Chile.

Se suspende la sesión por cinco minutos para despedirlos.
______________
--Se suspendió a las 17:22.
--Se reanudó a las 17:26.
______________

El señor PIZARRO (Presidente).- Continúa la sesión.
Tiene la palabra el señor Secretario General.

El señor HOFFMANN (Secretario General).- En este momento han llegado a la Mesa los siguientes documentos:
Proyecto de acuerdo
De la Senadora señora Allende, mediante el cual pide constituir una mesa de diálogo social minero, adoptar medidas respecto a los trabajadores de la Compañía Minera San Esteban y reestructurar el SERNAGEOMIN (boletín Nº S 1.281-12).
--Queda para el Tiempo de Votaciones de la presente sesión.
Permiso constitucional
La Honorable señora Allende solicita autorización para ausentarse del país a contar del 11 de agosto del año en curso.
--Se accede a lo solicitado.
______________

El señor LETELIER.- Pido la palabra.

El señor PIZARRO (Presidente).- Puede hacer uso de ella, Su Señoría.

El señor LETELIER.- Señor Presidente, quiero pedir que la moción que presentamos junto con la Senadora Allende y otros colegas a fin de cambiar la frase que se usa para abrir la sesión sea vista directamente por la Sala.
Creo que resulta inoficioso realizar todo el trámite de informe de Comisión.

El señor PIZARRO (Presidente).- Ya pasó a la Comisión de Constitución.
Lo que cabría es pedirle a la Honorable señora Alvear que procure que su despacho sea rápido.
A quienes lo han consultado, el Senador señor Letelier se refiere a la moción que modifica el Reglamento en materia de apertura de la sesión, con el objeto de agregar después de las palabras "En el nombre de Dios" la frase "y de la patria".

El señor LETELIER.- Muchas gracias.

El señor NAVARRO.- ¿Me permite, señor Presidente?

El señor PIZARRO (Presidente).- Tiene la palabra el Senador señor Navarro.

El señor NAVARRO.- Señor Presidente, solo deseo recordar, a propósito de ese cambio, que desde mi primer año como Senador he insistido en que la frase con la cual nos tratamos no sea "Honorable Senador" sino "Ciudadano Senador".
Ello, dado que la honorabilidad no se gana por una elección sino por una conducta de vida. Creo que es mucho más cercano el concepto de "Ciudadano Senador".
Esa iniciativa se encuentra en la Comisión de Constitución hace ya varios años. Por lo tanto, solicito que a lo menos se pueda llevar adelante su debate.

El señor PIZARRO (Presidente).- No vamos a abrir la discusión ahora. Claramente, hay puntos de vista distintos.

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).- Señor Presidente, podríamos tratar ese asunto en Comisión en lugar de debatirlo ahora en la Sala.

El señor NAVARRO.- Ya está allí.

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).- Me parece bien, porque tenemos muchas ideas.
El señor PIZARRO (Presidente).- Señor Senador, ya se encuentra en Comisión.
V. ORDEN DEL DÍA



MODIFICACIÓN DE CÓDIGO SANITARIO EN MATERIA DE REGULACIÓN DE FARMACIAS Y MEDICAMENTOS


El señor PIZARRO (Presidente).- Proyecto de ley, iniciado en mociones de los Senadores señora Alvear y señores Girardi, Muñoz Aburto y Ruiz-Esquide y del entonces Senador señor Ominami, sobre modificación del Código Sanitario en materia de regulación de las farmacias y los medicamentos, con informe de la Comisión de Salud.
--Los antecedentes sobre el proyecto (6523-11, 6037-11 y 6331-11, refundidos) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican:
Proyecto de ley: (mociones de los Senadores señora Alvear y señores Girardi, Muñoz Aburto, Ominami y Ruiz-Esquide).
En primer trámite:
1) Sesión 19ª, en 19 de mayo de 2009.
2) Sesión 45ª, en 19 de agosto de 2008.
3) Sesión 82ª, en 6 de enero de 2009.
Informe de Comisión:
Salud, sesión 40ª, en 4 de agosto de 2010.

El señor PIZARRO (Presidente).- Tiene la palabra el señor Secretario General.

El señor HOFFMANN (Secretario General).- Los objetivos principales de la iniciativa son los siguientes:
1) Regular el número de farmacéuticos o químicos farmacéuticos con que deben contar las farmacias.
2) Establecer mecanismos eficaces de información y comparación de precios de los medicamentos.
3) Impedir la integración vertical, prohibiendo la propiedad y administración de laboratorios y farmacias en manos de las mismas personas.
4) Prohibir los incentivos para la venta de determinados medicamentos.
5) Sancionar penalmente el comercio no autorizado de remedios y el uso indebido o malicioso de una receta médica.
Cabe recordar que la Comisión de Salud, en sesión de 30 de junio del año pasado, solicitó autorización a la Sala para discutir en general y en particular en el primer informe tres proyectos en conjunto, que corresponden a mociones de los Honorables señores Girardi y Ruiz-Esquide y del ex Senador señor Ominami; del Honorable señor Muñoz Aburto, y de los Senadores señora Alvear y señor Ruiz-Esquide.
Esas tres iniciativas se aprobaron en general por tres votos a favor (de los Honorables señores Girardi y Ruiz-Esquide y del ex Senador señor Ominami) y un voto en contra (del Honorable señor Kuschel).
En cuanto a la discusión en particular, la Comisión de Salud refundió los tres proyectos ya mencionados, y el texto resultante se puede consultar en la parte pertinente del informe de la Comisión.
La letra a) y el inciso final de la letra b) del artículo 1º se aprobaron por mayoría de votos. En el caso de la letra a), relativa al número de farmacéuticos, con el voto en contra del Senador señor Kuschel. Y el inciso final de la letra b) se aprobó con su abstención.
Corresponde señalar que la letra c) del artículo 1º, referida a la incompatibilidad entre la propiedad y administración de una farmacia o droguería con la de un laboratorio, fue aprobada por tres votos a favor (de los Honorables señora Rincón y señores Girardi y Rossi) y uno en contra (del Senador señor Novoa).
El Honorable señor Chahuán dejó constancia de su posición contraria a las normas que pretenden impedir la integración vertical.
La Senadora señora Matthei formuló cuestión de constitucionalidad respecto de la letra c) del artículo 1º, pues, a su juicio, en otras áreas de la economía la integración vertical se encuentra permitida.
El señor PIZARRO (Presidente).- En discusión general.

Tiene la palabra la Honorable señora Alvear.

La señora ALVEAR.- Señor Presidente, quiero referirme al proyecto que presentamos junto con el Senador señor Ruiz-Esquide y que, como muy bien señaló el señor Secretario, se refundió con otras iniciativas que el Honorable señor Girardi (Presidente de la Comisión) y el Senador señor Ruiz-Esquide podrán explicar en toda su integridad.
Elaboramos la moción con la colaboración de los químicos farmacéuticos de la Quinta Región. Esta busca impedir todo tipo de incentivos, tanto para vendedores como para pacientes-clientes, a la venta de productos farmacéuticos que requieren receta médica.
Creemos firmemente que el ejercicio de estas prácticas se ha transformado en un problema de salud pública relevante que requiere una regulación para restringirlas y prohibirlas, antes de que una tragedia nos haga tomar conciencia de la necesidad de legislar.
Todos conocemos, estimados colegas, la costumbre que tenemos los chilenos de autorrecetarnos o de compartir los beneficios de algún medicamento con un vecino, familiar o amigo, sin pasar previamente por una decisión médica.
Y quiero subrayar un solo ejemplo, señor Presidente, que me parece pertinente al respecto.
Regularmente, cuando uno concurre a una farmacia observa que existe una oferta del mes o la llamada "oferta dos por uno" de un fármaco como el migranol, que se utiliza en el tratamiento de la jaqueca o los dolores de cabeza y que parece inofensivo. Sin embargo, dicho medicamento debería venderse siempre bajo receta médica y de ninguna manera ofrecerse en el mesón, menos aún aprovechando la posibilidad de llevar dos al precio de uno.
El consumo excesivo de migranol -como he recogido de médicos y especialistas en el tema- puede provocar serios trastornos a la salud. En personas con antecedentes de dolencias cardíacas y accidentes vasculares, aumenta la posibilidad de producir obstrucciones de las arterias cerebrales o cardíacas, ocasionando infartos o incluso la muerte. De ahí el peligro de vender en las farmacias un producto en oferta "dos por uno", sin necesidad de receta médica alguna.
Asimismo, mediante el proyecto en debate quisimos relevar el rol del farmacéutico. Este es un profesional especializado que cumple una función significativa en la orientación de los pacientes-clientes y muchas veces se convierte en un verdadero protector público de la salud de las personas.
Sin embargo, dichos especialistas no solo han debido asumir su importantísimo desempeño profesional, sino que, muy por el contrario, su labor ha quedado en un segundo plano, debido a que hoy en la gran mayoría de las farmacias deben asumir como administradores o gerentes.
Soy Senadora de la Región Metropolitana, conozco la situación de las farmacias de mi circunscripción, que generalmente pertenecen a cadenas farmacéuticas, y he podido apreciar cómo las personas, cada vez que recurren al farmacéutico, tienen que esperar un largo rato, dado que esos profesionales deben desempeñarse simultáneamente como gerentes o administradores, en circunstancias de que esa función no es propia de ellos, quienes solo debieran preocuparse de velar por la protección de la salud de los pacientes.
Por tal motivo, nos parece insuficiente, dada la doble labor que desarrollan estos profesionales en establecimientos con altos volúmenes de ventas, contar con uno solo de ellos en cada recinto, tal como exige la normativa vigente. Somos partidarios de separar las funciones de administración y gerencia de una farmacia con las que debe cumplir un químico farmacéutico.
Por las razones anteriormente enunciadas, valoro que la Comisión de Salud haya analizado el proyecto y, desde ya, anuncio mi voto favorable a la idea de legislar.
He dicho.
)-------------(

El señor PIZARRO (Presidente).- Aprovecho esta oportunidad para saludar a un grupo de adultos mayores de la comuna de Quilpué, pertenecientes a TURQUILAM (Turismo Quilpué del Adulto Mayor), que se encuentran en las tribunas.
Les damos la bienvenida a esta Alta Corporación y les agradecemos que nos acompañen hoy día.
--(Aplausos en la Sala y en tribunas).

El señor PIZARRO (Presidente).- Tiene la palabra el Senador señor Girardi.

El señor GIRARDI.- Señor Presidente, el proyecto en debate es muy importante y nació de una situación dramática que vivió la sociedad chilena. Esta, en determinado momento, se vio enfrentada a la colusión de ciertos monopolios, los cuales representan cerca del 95 por ciento de los puntos de venta de medicamentos en el país y que -tal como se demostró- se coludieron para subir los precios de algunos fármacos hasta en un mil por ciento.
Esa práctica anómala provocó que una receta de medicamentos de uso corriente, que normalmente debiera costar alrededor de cinco mil pesos, superara los 20 mil pesos. Por ejemplo, un niño que padecía una bronquitis obstructiva y necesitaba dos inhaladores: el Salbutamol, cuyo costo se acerca a los mil 300 pesos, alcanzó un precio aproximado de 10 mil pesos; y el Inflammide, que vale cerca de 4 mil pesos, subió, más o menos, a 15 mil pesos.
Además, los precios de otros productos como los antibióticos se incrementaron de manera absolutamente excesiva. O sea, un tratamiento farmacológico de uso corriente se transformó en algo inaccesible. Igual situación quedó en evidencia con los hipotensores, los anticonceptivos, etcétera.
Por ello, algunos parlamentarios presentes en este Hemiciclo recurrimos a la Fiscalía Nacional Económica para interponer una denuncia que fue acogida por dicho organismo. Incluso algunas farmacias reconocieron posteriormente que fueron parte de la colusión y de ese fraude. Hoy día esa presentación todavía se encuentra en investigación e incluso introdujimos acciones penales.
La iniciativa legal que formulamos con los Senadores Soledad Alvear, Mariano Ruiz-Esquide, Pedro Muñoz Aburto, Fulvio Rossi y el que habla pretende establecer una prevención permanente y no ocasional a esta situación, y apunta a terminar, de una vez por todas, con estas prácticas inadecuadas.
Por ejemplo, el proyecto consagra y reitera una obligación. Las farmacias no tienen listas de precios. Nosotros acudimos a los tribunales e interpusimos acciones legales, con el fin de que fueran sancionadas por ello. Pero estas, de manera absolutamente reactiva, recurrieron a la Corte de Apelaciones sin pagar las multas que les fueron exigidas.
Toda actividad comercial requiere listas de precios. Las farmacias son las únicas instituciones del país donde los consumidores no pueden comparar los valores de los medicamentos.
Si ustedes, señores Senadores, desean comprar un paracetamol, les venderán el que el dependiente quiere y no les mostrarán el conjunto de denominaciones o marcas de paracetamoles para que puedan elegir de acuerdo a sus precios.
Por otro lado, tenemos el problema de que los precios no figuran en el envase de los medicamentos, razón por la cual se pueden modificar de manera oportunista dado que nadie conoce el valor verdadero, salvo el encargado de venderlos.
Asimismo, aspiramos a establecer una definición de "receta médica", porque hoy día ese documento se ha convertido en un amplio espectro de situaciones distintas y consideramos fundamental establecer con claridad su definición. Y, al mismo tiempo, queremos impedir que la receta médica sea sustituida en función de las ventajas o intereses que persiguen las farmacias o de los convenios que suscriben con un determinado laboratorio, mediante el cual pueden rentar más por cierto medicamento y no por otro.
Los colegas Senadores saben muy bien que dentro de las denuncias que presentamos se mostraba el point of sale (POS) de una farmacia, esto es, el computador que tiene a la vista el dependiente. Con ello -y a veces esto sigue ocurriendo-, el vendedor no solamente tiene acceso al listado de medicamentos alternativos -por ejemplo, en lo que respecta a un paracetamol obtiene las distintas marcas con sus respectivos precios-, sino que además puede conocer la "cometa" que le entregarán. Es decir, si el dependiente vendía un paracetamol que estaba fuera del convenio ganaba 5 pesos por unidad vendida; en cambio, si ofrecía el producto que se encontraba en comisión obtenía 200 pesos por cada una.
Entonces, resulta evidente que ese trabajador, quien más encima debe hacerse su remuneración ofreciendo esos productos, prefería vender el fármaco que le abonaba los 200 pesos y no el más barato, el cual muchas veces resultaba más caro para el paciente.
Por lo tanto, este proyecto de ley sanciona y prohíbe el pago de "cometas", pero -¡por favor!- no solamente al dependiente y a la farmacia en que labora, sino también a los médicos que indiquen medicamentos en virtud de algún tipo de estímulos que les ofrezcan los laboratorios.
En consecuencia, queremos abordar toda la cadena del proceso, no que el hilo se corte por lo más delgado. Por eso, el fin de los incentivos es una cuestión muy importante para nosotros.
Al mismo tiempo, disponemos que si el médico prescribe en su receta el medicamento de marca debe poner a la vez el alternativo genérico para darle la posibilidad al paciente de hacer las sustituciones del caso. Por ejemplo, si a una persona le recetan un antibiótico cuyo costo asciende a 30 mil pesos y existe el genérico con un valor inferior a 5 mil pesos, él podrá solicitar el fármaco más económico. Pero, lo que no resulta admisible es que el dependiente le cambie el medicamento caro por otro de similar precio; por último, debe ofrecerle solo el genérico.
El objetivo de esa norma es garantizar que el cambio en la receta vaya en beneficio del paciente y no en su contra.
Además, cabe recalcar que el proyecto prohíbe, entre otras cosas, la comercialización ilegal de medicamentos. En nuestro país hay ferias que son verdaderas farmacias, lo cual tiene que ver con un problema de acceso a los remedios. Sabemos que la gente a veces no tiene dinero, pero es muy peligroso vender medicamentos en esas condiciones, pues ignoramos lo que contienen. Algunos están vencidos; otros, cuando se exponen al sol pierden su característica farmacológica. Y eso, evidentemente, configura una situación compleja.
Se sanciona también el uso malicioso de la receta. Muchas veces se falsifican tales documentos para adquirir psicotrópicos, drogas; pero las sanciones son menores. También queremos regular esta materia.
Y algo muy importante. Se crea -con el común acuerdo del Ejecutivo anterior y del actual- la llamada "receta médica electrónica".
Así como estamos avanzando en la licencia médica electrónica, propiciamos que exista en Chile la receta médica electrónica, que permita a los facultativos habilitados para extender ese documento, contar con un instrumento más ágil, menos burocrático, más transparente y sin el problema de la letra ilegible de nosotros, los médicos, que con frecuencia dificulta el acceso a su comprensión por parte del paciente. Además, genera nuevos canales de distribución y de venta. Y existirán mañana farmacias virtuales, que contribuirán a que haya más y mejor competencia.
También se consigna algo muy trascendente: la confidencialidad de los actos médicos.
Sabemos que hay farmacias que violan el derecho a la información sensible de los pacientes -es una práctica común hoy día-, porque fotocopian la receta, donde aparece el nombre del médico, y se la envían a una empresa. Esta la codifica, efectúa un análisis de ella y le hace llegar a los laboratorios la información de lo que recetó dicho profesional. Ello, para que después aquellos puedan hacer -por así decir- un lobby dirigido al médico diciéndole: "Usted está recetando mucho -o muy poco- tal medicamento".
A nuestro parecer, eso constituye un uso abusivo de la información; un uso ilegal de una información sensible. Por lo tanto, se dispone la prohibición de utilizar información confidencial para cualquier otro fin que no sea el del interés del paciente.
Ello no obsta a que las farmacias den a conocer tal información para usos estadísticos; pero no podrá llevar el nombre del paciente ni el del médico.
Lo anterior es válido, igualmente, para los exámenes de laboratorios clínicos.
Además de las materias a las cuales se refirió la Senadora señora Alvear, a nuestro juicio, la iniciativa reviste gran trascendencia, dado que ayudará a prevenir irregularidades y a defender los derechos de los pacientes. Esto queda de manifiesto en el hecho de que actualmente las farmacias no cuentan ni siquiera con el elemento más simbólico: la lista de precios.
Por último, deseamos reafirmar nuestra decisión de regularizar las condiciones laborales en las farmacias, donde todavía existe mucha precariedad. Por ejemplo, el no cumplimiento de los horarios ahonda el problema y a menudo induce a irregularidades y hechos injustos cuya comisión no deseamos.
En ese sentido, se requerirá -tal vez no en la ley- el apoyo de otras reparticiones o Ministerios, con el propósito de establecer un mercado transparente, no solo para los usuarios en cuanto a que no les suban los precios, sino también para los trabajadores de las farmacias.
He dicho.

El señor PIZARRO (Presidente).- Se me ha pedido abrir la votación.

El señor NAVARRO.- Pero conservando el tiempo normal para las intervenciones.

El señor PIZARRO (Presidente).- Por supuesto.
Si le parece a la Sala, se procederá en la forma indicada.
--Así se acuerda.

El señor PIZARRO (Presidente).- En votación.
--(Durante la votación).

El señor PIZARRO (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable señor Bianchi.

El señor BIANCHI.- Señor Presidente, hace algunos momentos escuché a la Senadora señora Alvear manifestar que cuando un químico farmacéutico se desempeña a la vez como administrador o gerente de una farmacia se produce tardanza en la atención al público.
Tal vez eso suceda en algún lugar del territorio, pero no es una realidad en el resto del país.
Pienso que debiéramos avanzar hacia una mayor modernidad con respecto al trabajo que realizan los químico farmacéuticos. Lo señalo porque, afortunadamente, Chile no es solo Santiago, donde existe una enorme cantidad de farmacias, que funcionan, por la competencia misma, las 24 horas del día.
En Regiones esa situación no ocurre. Y no solo no ocurre sino que hay localidades aisladas, como Tierra del Fuego o Puerto Porvenir, que cuentan con una sola farmacia, ubicada al interior del único hospital público que ahí existe, que atiende 2 a 3 horas diarias, de lunes a viernes. No abre los domingos ni los festivos. Y esto se repite, sin lugar a dudas, en diversas partes.
Por eso, señor Presidente, quiero valerme de este proyecto de ley -entiendo que en su texto se refundieron tres mociones (entre otras, de los Senadores señor Muñoz Aburto, señora Alvear y señor Girardi)- para proponer una apertura hacia la modernidad: establecer el servicio de químico farmacéutico on line solo en lugares apartados, donde no pueda llegar uno de dichos profesionales a ejercer su función por resultar económicamente inconveniente para determinada cadena de farmacias.
Este tipo de situación se presenta hoy en numerosas otras áreas. Se creó, por ejemplo, el sistema de firma electrónica, o el de estudios e-learning on line, donde uno puede perfectamente seguir una carrera, incluso profesional.
Entonces, por qué no basarnos en esa modernidad para instaurar el servicio de químico farmacéutico on line, a fin de que esta prestación se entregue en todo el país y no solamente en la Capital, donde, por lo que he escuchado en intervenciones anteriores, la gente se queja de demora en la atención, producto de que el químico farmacéutico, simplemente, cumple también otras funciones.
Ojalá el Ejecutivo pudiera acoger la idea que he planteado, ya que en zonas apartadas, como Tierra del Fuego, Juan Fernández, Isla de Pascua, a las cuales, con enorme esfuerzo -según entiendo-, las cadenas de farmacias han destinado un químico farmacéutico, muchas veces este profesional no puede radicarse allí, con su familia, por no ser rentable para aquellas.
Por otra parte, señor Presidente, deseo aprovechar la oportunidad para solicitarle al Gobierno, al Estado de Chile, que de una buena vez haga algo por los adultos mayores que no pueden acceder a la compra de medicamentos cuando estos no se encuentran en el servicio público.
Al respecto, es necesario -lo hemos expresado en innúmeras oportunidades- eliminar el IVA a los remedios para la diabetes, la hipertensión o afecciones cardiovasculares. Se trata de medicamentos especiales destinados a tratar, fundamentalmente, enfermedades que están más orientadas a la población de adultos mayores.
Se requiere la mano interventora del Estado para suprimir, de una vez por todas, el impuesto al valor agregado a los remedios de uso diario -que los encarece- para pacientes del segmento de adultos mayores.
Anuncio que aprobaré en general la iniciativa, que, como dije, refunde tres proyectos, por cuanto, aunque no es un gran paso, constituye un avance importante.
Y reitero la necesidad de abrirse a la discusión en el sentido de generar mucho más modernidad con relación al trabajo de los químico farmacéuticos.
He dicho.

El señor PIZARRO (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable señor Chahuán.

El señor CHAHUÁN.- Señor Presidente, el proyecto de ley que nos ocupa, como bien han señalado los señores Senadores que me antecedieron, refunde tres mociones sobre la materia y fue motivo de un amplio debate en la Comisión de Salud de esta Corporación, donde se escucharon versadas opiniones de los representantes de distintos sectores relacionados con el tema farmacéutico.
Entrando en la materia sobre la cual recae la iniciativa, debo expresar, en primer término, que los medicamentos no son un producto comercial cualquiera. Cuando hablamos de fármacos o remedios, como comúnmente se les denomina, debemos conjugar necesariamente los términos de calidad y seguridad.
Y si hablamos de salud pública, es preciso armonizar los riesgos del autoconsumo en la población, el costo social, el mayor gasto que significa asistir a quienes se intoxiquen y el fracaso del Estado en cumplir su deber primordial de tutelar la vida y la salud de todos los habitantes del país, obligación que, por lo demás, está expresamente establecida en la Constitución Política.
Los medicamentos, por su propia naturaleza o sus condiciones de su uso, llevan implícita la posibilidad de causar daño, eventualidad que no siempre se encuentra en la mayoría de los demás bienes que se venden y consumen ordinariamente en el país.
Los riesgos sanitarios para la población al no existir una venta asistida son, entre otros, los siguientes: aumento de las intoxicaciones; riesgos en la interacción de los fármacos; robo de estos, y pérdida de la función de asistencia en su adquisición.
En los países donde se han producido estas situaciones, las intoxicaciones y el gasto en salud pública se incrementaron dramáticamente. De ahí la necesidad de relevar efectivamente la importancia de los químico farmacéuticos, en particular en la atención al público cuando se hallan a cargo de este tipo de establecimientos.
Entonces, no podemos sino estar de acuerdo con la obligación que se consigna en el proyecto en orden a establecer una asistencia profesional farmacéutica en el expendio de medicamentos, salvo las excepciones calificadas que la misma disposición contempla.
De igual modo, concordamos con la obligación que se impone en el sentido de informar debidamente al público consumidor respecto del precio de los fármacos, en forma clara y transparente, como asimismo de las normas que rigen su venta, de modo que puedan ser entendibles plenamente por aquel.
También, compartimos absolutamente la disposición que obliga al expendio de medicamentos sobre la base de receta extendida por un profesional de la salud, en forma legible, cuyo contenido ha de ser reservado y revelable solo con consentimiento expreso del paciente, dado por escrito. Esto, atendidas fundamentalmente denuncias formuladas sobre el particular y que se han hecho públicas.
Concordamos igualmente con la responsabilidad solidaria que se atribuye al propietario del establecimiento farmacéutico, a su director técnico y al auxiliar que hayan provocado daños a la salud por venta de medicamentos sin receta no obstante tener que hacerlo bajo prescripción contenida en ella. Todo esto, sin perjuicio de la responsabilidad sanitaria que proceda.
Además, estamos contestes en que debe sancionarse penalmente la importación, fabricación, adquisición o almacenamiento de productos farmacéuticos sin la respectiva autorización sanitaria, o la comercialización de ellos.
Por último, compartimos el texto del artículo 319 bis, nuevo, que se introduce al Código Penal, norma que sanciona corporalmente el uso indebido o malicioso de recetas médicas, sin perjuicio de las sanciones penales que correspondiere aplicar a causa de la muerte o lesiones que derivaren de tales hechos dolosos.
Como se puede apreciar, este proyecto de ley conjuga una serie de disposiciones que van en el sentido correcto. Por tanto, estamos plenamente de acuerdo con la idea de legislar respecto a esta materia tan sensible.
En tal virtud, compartimos la mayor parte de su texto, por cuanto es menester incorporar las normas ya referidas tanto al Código Sanitario como al Código Penal.
Sin embargo, al igual que la Senadora Evelyn Matthei, quien forma parte de la Comisión de Salud, hago expresa reserva de constitucionalidad sobre lo establecido en el nuevo inciso que se incorpora al artículo 126 del Código Sanitario, pues la integración vertical a que se refiere dicho precepto no es necesariamente negativa. Y si se dan malas prácticas o abusos, hay otros mecanismos legales destinados a corregirlos, los cuales se encuentran contenidos en distintos cuerpos legales, como la Ley de Libre Competencia o la Ley de Protección al Consumidor.
Por otra parte, todos sabemos que en otras áreas de la economía la integración vertical sí es plenamente permitida, porque, al igual que en este caso, existen los resguardos legales para evitar abusos o malas prácticas.
Por las razones expuestas, daré mi respaldo a este proyecto de ley. Y, de acuerdo a lo dispuesto en el artículo 164 del Reglamento del Senado, solicito votación dividida para la letra c) del artículo 1° de esta iniciativa refundida, a la vez que reitero mi reserva de constitucionalidad en cuanto al nuevo inciso que se incorpora al artículo 126 del Código Sanitario en lo concerniente a la integración vertical.
He dicho.

El señor PIZARRO (Presidente).- Tiene la palabra el Senador señor Ruiz-Esquide.

El señor RUIZ-ESQUIDE.- Señor Presidente, vamos a aprobar en general, creo yo (y me alegro de eso), el proyecto en debate. Y nosotros, sus autores, por supuesto que lo respaldaremos con mucha fuerza, porque surgió de un esfuerzo que se hizo en la Comisión de Salud para unir tres iniciativas que abordaban distintos aspectos relacionados con la misma materia.
El punto central de las modificaciones radica en, primero, tener conciencia de que la farmacia; el despacho y la distribución de medicamentos; las recetas médicas, la observancia de ellas y su privacidad son elementos esenciales para las personas en el manejo de las enfermedades.
En esta Sala hemos hablado varias veces de que a lo largo de casi 30 años en Chile se ha ido haciendo fuerte la tendencia a comunicarse entre el médico, los laboratorios, las farmacias y algunas entidades económicas y financieras para saber quién es quién en el despacho de las recetas; conocer la verdadera realidad, y, a partir de esa relación, sacar conclusiones francamente inadmisibles, pues las recetas, al igual que las licencias médicas, deben ser, a nuestro juicio, esencialmente privadas.
Por eso, refundimos todo lo que venía en proyectos separados y discutimos sobre aquello en lo que creímos posible avanzar.
Nos quedan cuestiones esenciales. Por ejemplo, la de la colusión, que en este momento se halla en la justicia; por lo tanto, no podemos intervenir a su respecto.
De otra parte, parece absolutamente inadecuada la integración que hoy se observa entre laboratorios, recetas, médicos y pacientes. Todos se coluden, y de alguna manera se termina haciendo de la receta médica el elemento más caro que existe ahora en la red o en la cadena de salud o de mejoramiento de las personas. Y esto nos ha llevado a un encarecimiento casi inaceptable de los medicamentos.
En la actualidad, de todos los actos de la medicina, probablemente el de la receta médica y los fármacos es el más caro para el paciente. La receta es la parte más onerosa. Después vienen los exámenes; luego, la atención médica especializada; en seguida, la medicina general, y por último, todo lo relativo a prevención, en circunstancias de que, en una adecuación razonable de los tiempos, debería ser justamente al revés.
Señor Presidente, en este proyecto hay tres o cuatro cosas a las que deseo referirme. Las otras ya fueron colocadas en el debate.
Primero, la existencia de un farmacéutico o químico farmacéutico para la atención a los usuarios no es un afán inútil. No se trata de un encarecimiento innecesario, contrariamente a lo que algunos podrían pensar. Se requiere esa participación en las farmacias porque la experiencia indica que en determinado momento personajes insólitos despachan recetas a personas que no tienen un alto nivel educacional, a las que les pasan gato por liebre -por decir lo menos-, o las inducen a comprar lo más caro, o les hacen cambios -a veces son necesarios- sin ninguna cultura farmacéutica o bioquímica.
En consecuencia, a nuestro entender, debe mantenerse la exigencia que se impone sobre el particular.
Aunque de un ámbito distinto, hay otro aspecto que consideramos de la mayor relevancia: la incorporación en el artículo 123 bis de la obligación de informar claramente el valor de cada medicamento. Alguien citó diversos casos para justificar tal exigencia. Pero la verdad es que basta ir de una farmacia a otra para ver que la diferencia de precios es abismante.
Ahora bien, se ha discutido y rechazado aquí, en el Senado, la idea de la integración. Eso está relacionado con los dos aspectos anteriores: precio y despacho de los fármacos correspondientes y adecuados.
La primera manera de comprender aquello pasa necesariamente por entender que el expendio de medicamentos tiene una connotación distinta de cualquier otra venta, de la naturaleza que sea. Es posible intercambiar cigarrillos, en fin. Pero comercializar fármacos a través de una persona carente de conocimientos es altamente inconveniente, insano, aparte implicar uso arbitrario de un derecho que no se les ha conferido a las farmacias.
Esa materia -no recuerdo bien si viene o no aquí; me parece que sí- dice relación también a algunas de las propuestas que se han traído al debate, en el sentido de hacer posible la venta de medicamentos en otros lugares; por ejemplo, en los supermercados.
Considero, señor Presidente -lo digo con franqueza-, que estamos en pañales en cuanto al control a las farmacias.
Desde los tiempos muy lejanos en que yo ejercía la medicina, ha pasado mucha agua bajo los puentes. Pero, a decir verdad, en aquellos años teníamos una exigencia muy grande en materia de vigilancia a las farmacias. El médico era del todo responsable; y el farmacéutico, también.
En la vieja farmacia de barrio, ahora tan preteritada, obviamente era más fácil exigir ese control. Hoy día, no obstante, existen carencias a tal efecto, pues las farmacias, constituidas en cadenas, han ido sobrepasando la ética esencial, sin la cual nunca podremos controlar ni el problema de los medicamentos, ni el de la salud, ni el de la atención, a menos que se impartan sobre el particular clases obligatorias en todas las escuelas.
Si ya tenemos dificultades con lo que se hace hoy en las farmacias, donde existe un profesional de la salud -por lo tanto, una persona que cuando jura se compromete a dar cumplimiento a las normas éticas-, ¡Dios nos pille confesados frente a lo que pueda ocurrir en los supermercados...!
Sé que algunos señores Senadores sostienen: "Mientras más abramos la venta a los supermercados, más posibilidades de que haya abaratamiento de los fármacos".
En mi concepto, al abrir uno el mercado da lugar a grandes cadenas que igual terminan encareciendo los medicamentos, sobre todo cuando se necesita un remedio de urgencia a las doce de la noche y se paga por él lo que cobre la farmacia.
Se dice: "Si tiene algún problema para comprar un fármaco, busque, rebusque".
Yo quiero saber una sola cosa: si para atender a una persona que enfrenta en la noche una urgencia cardiológica o de cualquier otra naturaleza se necesita un medicamento por el que una farmacia cobra determinado precio, ¿se encontrarán abiertos a las dos de la mañana otros establecimientos donde se pueda buscar un costo alternativo menor?
Desgraciadamente, el Gobierno terminó sacándole la característica de ley a otro proyecto que tenemos, en materia de turnos de farmacias. Así, para este efecto, únicamente se necesita, al parecer, un decreto o una ordenanza del Ministerio de Salud. Pero lo cierto es que ahora no hay farmacias de turno, pues, según sus propietarios, ¡no sale a cuenta...!
Entonces, señor Presidente, estamos tergiversando el sentido de los medicamentos.
Finalmente, en el minuto que me queda, quiero hacer hincapié en que el inciso sexto del artículo 127 de reemplazo que se propone para el Código Sanitario dispone, como cosa esencial, que "Las recetas médicas, los análisis y exámenes de laboratorios clínicos y los servicios relacionados con la salud son reservados...".
Como ya lo mencioné, la circunstancia de que no haya reserva a ese respecto termina repercutiendo económicamente. Porque hoy los bancos aprovechan las conexiones que tienen con las isapres, con el FONASA, con los laboratorios y con las farmacias para saber si le dan o no un préstamo a determinada persona.
Por eso, aprobaré la idea de legislar. Y todavía existe la chance de introducir en la discusión particular algunas modificaciones que me parecen convenientes.
He dicho.

El señor PIZARRO (Presidente).- Tiene la palabra el Senador señor Rossi.

El señor ROSSI.- Señor Presidente, aquí se han enumerado los aspectos más importantes de este proyecto, que hoy se votará en general.
Quiero recalcar que se trata de una iniciativa trascendente. No resuelve todos los problemas que hay en el mercado farmacéutico. Empero, indudablemente, regula y ayuda a corregir varias imperfecciones que existen en un mercado bastante asimétrico.
A quienes no hayan leído su texto en detalle debo señalarles que la ley en proyecto -despejaré una duda- no tiene ninguna relación con la venta de medicamentos OTC o medicamentos para cuya venta en supermercados u otros lugares distintos de las farmacias no se requiere receta. Estoy de acuerdo con esto último. De hecho, comentábamos con el Senador Tuma que hoy las farmacias parecen supermercados, porque a veces expenden de todo, menos fármacos.
Ahora, el proyecto en debate nació -ya lo expresaba el Presidente de la Comisión de Salud- cuando se produjo la colusión o el cartel de las grandes cadenas farmacéuticas, lo que finalmente se tradujo en la fijación de precios y en un abuso contra los consumidores y la gente modesta que concurre a las farmacias en busca de un tratamiento.
Por eso yo resalto, quizá como los más relevantes, justamente los aspectos que no le gustan demasiado al colega Chahuán: los relacionados con la prohibición de la integración vertical.
Esta iniciativa -y en la Comisión hubo votación dividida al respecto- prohíbe que el dueño de una farmacia lo sea además de un laboratorio.
Creo que el daño que causa el cartel o la integración horizontal es muy similar al que provoca la integración vertical en cuanto a la forma como afecta al consumidor o al usuario de la farmacia respecto del precio del medicamento. Y lo hemos visto en reiteradas ocasiones en muchas cadenas farmacéuticas que a la vez son dueñas de laboratorios y, además, se coluden transversalmente y venden a precio preferencial cierto fármaco o genérico que producen.
Otro aspecto importante de la iniciativa es el establecimiento del respeto a la receta médica, que finalmente es el respeto a la prescripción del médico y al paciente en cuanto a que reciba el tratamiento que corresponde.
Los medicamentos son cambiados en la farmacia muchas veces por un incentivo, por la famosa "canela" que se paga al dependiente, al auxiliar, al director técnico e incluso al propietario de aquella.
Por consiguiente, este proyecto, con relación a la receta, solo permite el cambio al genérico.
Es relevante destacar aquello, porque se consagra la obligatoriedad de colocar en la receta médica no solo el nombre de fantasía o el medicamento marca registrada, sino también el principio activo, el fármaco genérico (recordemos que 40 por ciento de los remedios que se venden y consumen en Chile son genéricos, y de muy buena calidad, por lo demás).
Eso, sin duda alguna, le va a significar al paciente, al momento de ir con su receta a la farmacia, la posibilidad de experimentar un ahorro notable. El genérico es bastante más barato.
Está igualmente la libertad del paciente para elegir entre un medicamento de marca y el genérico. Pero la farmacia tendrá la obligación de venderle este último. Y el médico deberá establecer el fármaco genérico en la receta, junto al nombre de fantasía, y de manera legible, con letra de imprenta, en una receta foliada o electrónica, para evitar su mal uso, el cual, por lo demás, se sanciona también en esta iniciativa.
Asimismo, me parece importante resaltar lo concerniente a la confidencialidad de la receta. Porque los datos que figuran en ella, tanto el nombre del médico que prescribe el medicamento cuanto el del paciente, son íntimos, sensibles, confidenciales, y, por tanto, no pueden ser utilizados ni por la farmacia ni por la isapre que tenga algún convenio con ella.
Hace algún tiempo denunciamos la existencia de un convenio entre dos isapres y una cadena farmacéutica que vulneraba la confidencialidad de la información en comento.
Otro aspecto bastante significativo del proyecto tiene que ver con la obligación de las farmacias de contar permanentemente, mientras estén abiertas, con un químico farmacéutico.
Sé que algunos Senadores han manifestado preocupación por localidades pequeñas donde se dificulta el acceso de los pacientes a los fármacos. En este sentido, la iniciativa faculta a la autoridad sanitaria para permitir el funcionamiento de una farmacia, en esas circunstancias extraordinarias, sin un químico farmacéutico.
Por último, también se obliga a las farmacias a tener una lista de precios a la que se pueda acceder sin intervención de terceros, lo que permite comparar y transparentar el mercado farmacéutico en beneficio de los pacientes.
Estamos ante un proyecto relevante; no resuelve -insisto- todos los problemas existentes en el mercado farmacéutico, pero, sin duda, constituye un avance.
He dicho.

El señor PIZARRO (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable señor Orpis.

El señor ORPIS.- Señor Presidente, nuestra bancada aprobará la idea de legislar en torno a la iniciativa en debate.
Desde nuestro punto de vista, mediante ella se abordan bien diversas cuestiones que a la larga pueden constituirse en incentivos perversos a la hora en que el usuario debe decidir respecto, particularmente, a los medicamentos.
Y, desde ese punto de vista, estimamos tremendamente acertado abordar, en el artículo 127 que se contempla, la idea de que el profesional que extienda la receta, al margen de hacerlo con letra imprenta legible, debe indicar la denominación genérica, para que, en definitiva, el usuario disponga de una alternativa.
Complementario con lo anterior, señor Presidente, también es sumamente importante, para evitar distorsiones que se pueden traducir en un mayor costo para el usuario, la prohibición de incentivos de distinta naturaleza para profesionales, dependientes o consumidores.
Y, desde ese punto de vista, asimismo estimamos correcto que, respecto de algunos de los dependientes que trabajen en una farmacia, se castigue como delito, en definitiva, la entrega de un medicamento distinto del que indica la receta.
Pero, con relación a esta norma en particular, quisiera hacer una reserva de constitucionalidad, porque, en el ámbito penal, no existe la responsabilidad objetiva, sino una de carácter personal. Y el inciso quinto del artículo citado expresa, a la letra: "El propietario, el director técnico y el auxiliar de la farmacia en que se expenda un medicamento diferente del indicado en la receta". Evidentemente, es válido establecer como delito precisamente esta acción, pero la responsabilidad penal consiguiente no puede extenderse -repito- a otros. Esta última significa que media un dolo, una intención.
Por lo tanto, hago una reserva de constitucionalidad respecto de la materia. No puede existir una responsabilidad objetiva, en efecto, sino responsabilidades personales, cuando el delito se halla tipificado.
Quisiera referirme igualmente a la integración vertical.
En verdad, señor Presidente, hemos creado toda una institucionalidad en relación con la libre competencia. Existen una Fiscalía Nacional Económica, para investigar los delitos en ese campo, y un Tribunal de Defensa de la Libre Competencia. En consecuencia, esas son las instancias para establecer o no si se registran problemas de esa índole.
Y, desde ese punto de vista, impedir la integración per se no nos parece lógico. Tendrá que intervenir dicho Tribunal o llevarse a cabo una investigación por la Fiscalía.
Ahora, si eventualmente se cometen delitos en las relaciones que pueden registrarse, estos ya se encuentran tipificados y sancionados. Pero no porque se establezca la integración vertical se va a resolver el asunto. Son cuestiones de distinta índole. Es decir, la colusión o cualquier ilícito en que se incurra en materia económica siempre va a ser investigado y sancionado por la Fiscalía y el Tribunal de la Libre Competencia.
Y creo, además, que la situación se minimiza bastante a raíz del contenido del proyecto de ley. Es decir, el hecho de que el usuario tenga la alternativa del genérico, en primer lugar; de que no existan incentivos, en seguida, y de obligarse a cualquiera que trabaje en la farmacia -al dependiente, al profesional- a entregar efectivamente el medicamento indicado en la receta, por último, va impidiendo un conjunto de prácticas.
Estamos de acuerdo con lo planteado por mi Honorable colega Chahuán, entonces, en términos de hacer reserva de constitucionalidad respecto del artículo ya mencionado.
Sin perjuicio de lo anterior, señor Presidente, juzgamos que el proyecto de ley contiene elementos valiosos como el que indiqué y vamos a aprobar la idea de legislar, sin perjuicio de abocarnos en la discusión particular a los aspectos que he expuesto en orden a perfeccionarlo.
He dicho.

El señor PIZARRO (Presidente).- Tiene la palabra el Senador señor Navarro.

El señor NAVARRO.- Señor Presidente, esta es una iniciativa que refleja una altísima preocupación ciudadana en relación con la forma como en las farmacias se logra vender y hacer llegar hoy diversos medicamentos a los usuarios y consumidores, registrándose situaciones muy complejas que ponen en riesgo hasta la vida de quienes desean conseguirlos.
Debo consignar que el llamado "escándalo de colusión" lo denuncié en la Fiscalía Nacional Económica en su debida oportunidad. Los delincuentes de cuello y corbata que se apropiaron de 25 mil millones de pesos en dos años, coludidos respecto de más de 220 medicamentos y generándoles un mayor costo a enfermos crónicos -por cierto, los más vulnerables-, se permitieron devolver, por iniciativa propia, 2 mil 500 millones, o sea, solo 10 por ciento de lo defraudado.
La ley actual permite, en un caso semejante, que alguien sorprendido robando y a quien se le va a incautar el vehículo, por ejemplo, diga: "Me quedo con todo el auto, pero restituyo los neumáticos". Esa es la garantía que exhibe hoy día la situación de las farmacias.
La acción de la Fiscalía Nacional Económica o del Tribunal de la Libre Competencia no ha logrado resolver la cuestión. Han pasado largos meses, años, y ninguno de los coludidos se encuentra preso. Por el contrario, en general se han radicado en otros empleos, y, por lo pronto, los dueños de las farmacias han comprado supermercados.
Ahora nos comunica el señor Mañalich, Ministro de Salud, que quiere que estos últimos establecimientos también vendan medicamentos. Y se trata de los mismos dueños. Farmacias Ahumada y otros retails como Falabella poseen acciones compartidas. Por lo tanto, se presenta una debilidad en la protección del usuario, del consumidor, de los enfermos, con ocasión de la venta de dichos productos, frente a tres cadenas que han comprado todas las esquinas del país y que, en definitiva, han matado a los más pequeños en el rubro.
Por mi parte, he sostenido la necesidad de dictar una legislación que permita resguardar la posibilidad de una mayor competencia, de que los químicos farmacéuticos puedan tener farmacias alternativas y de que estas no sean destruidas por las otras.
El proyecto apunta, en ese sentido, a un avance en la protección. Quiero dejar establecido que me voy a oponer a todo lo que signifique, impulsado por el señor Ministro o por quien fuere, vender medicamentos en los supermercados. A mi juicio, esa es una situación altamente negativa.
Lo anterior ha sido dicho por todos los especialistas, en particular por el doctor Humberto Guajardo, Director de la Unidad de Adicciones de la Universidad de Santiago: "Todo medicamento puede producir un efecto negativo". Y ha advertido que la venta de ellos, sin receta, en las góndolas de los establecimientos podría aumentar la automedicación, habiéndose registrado efectos perversos en países como los Estados Unidos y Argentina.
Cabe agregar que más de 180 personas son recluidas en la Clínica Las Condes por este concepto. No solamente se medican los pobres, sino también los ricos, los ABC 1, quienes llegan por intoxicaciones debidas a automedicación, es decir, porque compran y toman remedios sin una receta. El proyecto tiende a que exista siempre esta última y, por cierto, a regular la venta.
En este sentido, señor Presidente, pienso que la figura de los auxiliares de farmacia debe cobrar una mayor relevancia. Los trabajadores de las empresas del rubro farmacéutico y de venta de medicamentos han denunciado una situación extraordinariamente apremiante -el Senador Girardi ya la mencionó-, porque, en contravención al más mínimo y elemental criterio de servicio público en materia de salud poblacional, se registran presiones indebidas en el cumplimiento de metas impuestas por la venta de medicamentos. Y al que no las logra se le amenaza en su estabilidad laboral.
Es un factor de precariedad en el empleo del auxiliar de farmacia, además, la multiplicidad de funciones que debe asumir. ¡Qué tal! Es preciso ofrecer tarjetas de crédito, cargar celulares, hacer aseo, revisar el vencimiento de productos, reponer medicamentos, solicitar aportes para instituciones de beneficencia y revisar pedidos.
Siempre me he preguntado adónde van las platas que se donan, señor Presidente. Por mi parte, siempre aporto, no sin alguna reticencia. Porque informan: "Va a tal hogar". Ojalá pudiéramos tener claridad sobre el particular y hubiera una especie de cuenta.
Pero todo lo que he señalado lo hace el auxiliar de farmacia, además de entregar la boleta.
En contravención a las normas sobre remuneración y los criterios de un empleo decente, los medicamentos vencidos y los inventarios negativos son descontados a los trabajadores, al igual que los bomberos, en las estaciones de servicio, tienen que pagar el cheque que sale protestado. El abuso es tal que, en el caso de medicamentos vencidos o de un inventario negativo -o sea, si faltan productos-, se hace el descuento respectivo en las liquidaciones de sueldo.
En ese aspecto, estas últimas no contienen el detalle de las ventas y solo señalan el pago de comisiones no especificadas. La cuestión es clara, porque la consignación de ese primer dato daría una cuenta inequívoca de la existencia de laboratorios privilegiados, de que opera el sistema del incentivo.
Es importante que los auxiliares de farmacia reconocidos por el Ministerio de Salud puedan acceder a la capacitación adecuada, figura que, por lo tanto, es preciso fortalecer. No media hoy día una alta exigencia para desempeñar el cargo, sino solo requisitos muy diversos. Tendríamos que poner especial interés en una mayor especialización. El servicio de Salud debiera contemplar ese factor.
Comparto por completo la determinación de una responsabilidad solidaria para los responsables de daños a la salud por el consumo de medicamentos que se suministren sin receta. Entonces, estamos discutiendo un proyecto de ley que aplica sanciones por ese concepto y nos encontramos con una iniciativa del señor Ministro de Salud respecto de tales productos, quien quiere ponerlos en góndolas.
Aquí tenemos que efectuar un debate mayor, señor Presidente.
En la Comisión se registraron votos en contra -entiendo que las objeciones de constitucionalidad del Senador señor Orpis algo tienen que ver con eso-, pero resulta claro que aquí es preciso legislar a favor de los enfermos, de los usuarios, de los consumidores. Porque, además, creo que las farmacias ya cuentan con suficientes abogados y defensa.
Ojalá que esta Corporación pueda legislar a favor de los débiles y no de los poderosos, porque estos no han pagado un peso. Ninguno de ellos se encuentra preso, a pesar del tremendo abuso cometido con motivo de la colusión de las farmacias.
El proyecto apunta a normar una situación muy desregulada y a beneficiar, por cierto, a las personas que hacen un uso intensivo de los medicamentos y a los consumidores, en general.
Por mi parte, voy a votar a favor de la iniciativa. Cabe discutir aspectos que pudieran ser revisados, pero manifiesto desde ya mi total oposición a que sea posible vender medicamentos en los supermercados, máxime cuando sus dueños son los mismos de las farmacias.
He dicho.
¡Patagonia sin represas, señor Presidente!

El señor PIZARRO (Presidente).- Pido al Honorable señor Escalona que presida por un momento.
Tiene la palabra el Senador señor Tuma.

El señor TUMA.- Señor Presidente, en mi opinión, estamos discutiendo el proyecto con quince años de atraso. Recuerdo que en 1994 se constituyó en la Cámara de Diputados una Comisión Investigadora respecto del mercado de los medicamentos. Y ahí están las conclusiones. Ya en ese tiempo se afirmaba que existía un monopolio, un dominio absoluto de algunos poseedores de acciones de varias farmacias. En ese tiempo no se habían formado mucho todavía las cadenas. Sin embargo, se preveía que era un sector cada día más controlado por pocas manos.
Se conocía también la vinculación "incestuosa", en mi opinión, de propiedad entre los dueños de los laboratorios y los de las farmacias. Y, naturalmente, las pequeñas "boticas", como eran llamadas en ese tiempo, tendieron a cerrar, porque los descuentos a las cadenas vinculadas a la propiedad del laboratorio hacían absolutamente inviable la continuidad de la prestación de servicios y la competencia.
Fue así como las grandes empresas compraron...

El señor NAVARRO.- ¡Las esquinas...!

El señor TUMA.- No solamente las esquinas, sino también el establecimiento completo, muchas veces con el personal incluido. Y se fueron instalando en todo el territorio nacional, hasta quedar en muy pocas manos 90 por ciento de la oferta de medicamentos, sobre la base de la vinculación de propiedad vertical con los productores, que son los laboratorios.
Ese es el mercado que tenemos hoy día y lo que ocurrió un par de años atrás, cuando se descubrió una concertación de precios y la burla a los más débiles, a los más enfermos, a muchos chilenos que, mes a mes, cada vez que reciben su pensión, van a dejar una parte importante de ella a la farmacia, con el propósito de ceñirse a una receta que prescribe un consumo permanente.
Cuando hacemos referencia al mercado de los medicamentos, entonces, aludimos a la salud, a la vida. No se trata de cualquier producto. Es algo que tiene que ver con la existencia de las personas. Y, por eso, es un ámbito que debe ser considerado con mucha cautela para el efecto de regularlo, de establecer condiciones para garantizar la salud y, al mismo tiempo, el acceso a esta.
Porque, curiosamente, a algunos señores parlamentarios que son médicos, respetables, les he escuchado exponer la necesidad -y con razón- de que todo cuente con receta y de que al facultativo se le garantice que un paciente siempre recurrirá a sus servicios para luego ir a la farmacia. Pero, al mismo tiempo, debemos garantizarles a todos los pacientes, de cualquier nivel de ingresos, el acceso a un médico. Una cantidad importante de ellos, varios miles, se hallan en espera de una consulta de especialidad, y si no pueden ser atendidos por el profesional, no lograrán ni la receta ni el medicamento. Entonces, la cuestión tiene que ver con la forma como se establecen las medidas para asegurar que los sectores más vulnerables, los de menos recursos, junto con cautelarles la salud, accedan a esta.
Voy a votar a favor del proyecto, porque apunta precisamente a las conclusiones que en la Cámara de Diputados recomendábamos hace 15 años respecto del control de la propiedad de estos servicios y de los laboratorios y su relación con las farmacias.
Creo que también debemos asegurar la reserva de los antecedentes médicos. En la Comisión de Economía estamos trabajando en un proyecto marco que tiene que ver con la manera de manejar los datos de las personas para garantizar que su titular es el dueño, sin cuya autorización nadie va a poder usar, administrar ni mucho menos difundir esa información, en especial si se trata de algo sensible.
A mi juicio, el proyecto es un avance mientras no se cuenta con una ley que proteja ese contenido de la privacidad. En particular, creo que reviste ese carácter al resguardar al menos lo concerniente a la salud de las personas y mantenerlo en reserva.
Luego, con relación al químico farmacéutico, no me parece que el acceso al medicamento, en el caso de una localidad pequeña o aislada, tenga que exceptuarse de la participación de ese profesional. Todos han señalado aquí la importancia que reviste. Si es tan indispensable, entonces ni siquiera en los pueblos apartados se puede omitir su intervención. Pero ¿qué hacemos si no es posible financiarlo; si no es posible garantizar que en pequeñas localidades esté presente las 24 horas del día o mientras funcione la farmacia?
Más bien, lo que haría el Senador que habla es modernizar y considerar la historia de la ley. Cuando se estableció la obligación de que esos establecimientos contaran con un químico farmacéutico, era la época en que los medicamentos se preparaban detrás del mostrador o por el propio profesional. Pero hoy día recorro las farmacias y la verdad es que no tengo memoria, en los últimos veinte años, de haber visto a algunos de ellos en una labor de esa naturaleza. Su presencia es importante, sin embargo, porque los consumidores necesitan consultarle. Si es así, ¿por qué tengo que obligar, a través de una ley, a que el local disponga de un químico farmacéutico durante las 24 horas, en circunstancias de que es posible comunicarse por la vía virtual, en línea o telefónica?
¿Por qué no establecemos en la ley que todas las farmacias deberán garantizar algún modo de comunicación inmediata, directa, con el cliente? Así evitaríamos lo planteado por la Senadora señora Alvear: que los químico farmacéuticos hagan de todo -administrar, revisar los stocks, gerentear, ir al banco, financiar- menos cumplir con lo que señaló el legislador cuando consagró la obligación de que las farmacias contaran con dicho profesional.
Yo soy partidario de modernizar dicho servicio. Presentaré indicaciones en su oportunidad para los efectos de que todas las farmacias del país dispongan de algún otro sistema. Las que quieran funcionar con la presencia de un químico farmacéutico, bueno, lo podrán hacer. Y verán la reacción del público frente a esa ventaja respecto de la competencia. Pero otras podrán decir: "Nosotros habilitaremos un call center, una plataforma a través de la cual se garantizará a todos los clientes la comunicación directa con el químico farmacéutico, quien resolverá todas las consultas que se le formulen".
Porque hoy día no se cumple la función que se fijó en la legislación, que -como dije- obligaba a tener un químico farmacéutico presente en cada farmacia.
De hecho, sugeriría capacitar y dar mayor relevancia a los auxiliares de farmacia, quienes debieran jugar un papel más importante en la orientación de los pacientes.
Señor Presidente, el proyecto apunta en la dirección correcta; por tanto, voto favorablemente la idea de legislar. Espero, sí, que en la discusión particular se acojan las indicaciones que tiendan a modernizar ese sector de la economía.

El señor ESCALONA (Presidente accidental).- Tiene la palabra el Senador señor Sabag.

El señor SABAG.- Señor Presidente, desde luego, anuncio mi voto favorable a este proyecto, que refunde tres mociones de colegas Senadores y que, en mi opinión, va en la dirección adecuada.
Como es natural, los medicamentos, sobre todo los con receta retenida, deben ser proporcionados por los químico farmacéuticos. Ello me parece absolutamente correcto y constituye un resguardo para toda la ciudadanía.
En todo caso, estaremos muy atentos para presentar indicaciones en el plazo que se fije, porque hay que introducir algunos perfeccionamientos a la iniciativa.
Intervengo, señor Presidente, más que nada para advertir de algo que ya nos ha pasado en otros proyectos de ley: que Comisiones especializadas en un área se inmiscuyen en ámbitos propios de otras. Tiempo atrás vimos cómo la Comisión de Transportes propuso modificaciones al Código Penal. Ahora sucede una situación similar: la Comisión de Salud, en el artículo 2°, plantea agregar dos artículos -el 319 y el 319 bis- a ese mismo Código, materia que es competencia de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento.
En consecuencia, solicito que la iniciativa también sea conocida por este último órgano técnico, a fin de que revise la incorporación de esas dos normas al Código Penal.
Recuerdo a los colegas que hace algún tiempo, en el mes de noviembre del año pasado, la Comisión de Transportes sugirió una enmienda terrible a dicho cuerpo legal, que, afortunadamente, paramos en la Sala. Espero que lo mismo pase con el referido artículo 2º.

El señor ESCALONA (Presidente accidental).- Tiene la palabra el Senador señor Muñoz Aburto.

El señor MUÑOZ ABURTO.- Señor Presidente, la salud y, por ende, la atención sanitaria de la población es un derecho humano esencial y debe ocupar el mayor cuidado de las autoridades.
El éxito de las acciones que se realizan con dicho fin pasa por la provisión suficiente, oportuna y a precios adecuados de las atenciones médicas, de los exámenes y tratamientos, y de las medicinas indispensables para la recuperación de los pacientes.
En este último ámbito, la ciudadanía fue testigo de cómo tres cadenas de farmacias, que concentran buena parte del mercado nacional, utilizaron su posición comercial privilegiada para establecer acuerdos sobre los precios de los medicamentos más solicitados, afectando con ello la competencia y perjudicando gravemente a los usuarios.
La Fiscalía Nacional Económica formuló la denuncia correspondiente al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia, y el litigio se encuentra en avanzado estado tras la confesión de una de las partes involucradas.
El hecho motivó la enorme preocupación y, por cierto, la indignación de la comunidad y de diversos sectores del quehacer nacional, ya que se trata de un ámbito demasiado sensible para la población.
Fruto de ello, la normativa protectora de la libre competencia ya experimentó modificaciones importantes.
Sin embargo, con el objeto de evitar que situaciones tan reprochables puedan reiterarse en el futuro, diversos parlamentarios han propuesto soluciones legislativas que buscan brindar una mayor transparencia, específicamente, al mercado farmacéutico.
Entre ellas, me parece una contribución la que impone a los distribuidores de medicamentos la obligación de señalar claramente en los envases el precio de los remedios. Así se evitan acciones inescrupulosas que, valiéndose de la desinformación, buscan impedir que la ciudadanía adquiera los de menor valor.
Hasta ahora, lamentablemente, los mostradores de las farmacias, más que un lugar para acceder a una solución económica y eficaz al problema de salud, son el escenario de una cuasi guerra, en que los dependientes, a causa de las políticas de incentivo, tratan de influir en la decisión de los compradores al instarlos a preferir determinados productos. La transparencia, la solidaridad y la preocupación fundamental por la recuperación de la salud pasan a segundo plano en este tira y afloja, donde muchas veces también la prescripción médica es desatendida.
Considero que el proyecto a que ha arribado la Comisión, que es el resultado de tres mociones parlamentarias, constituye un importante aporte para que nunca más volvamos a tener hechos tan vergonzosos como los vividos con la colusión de esas cadenas.
Por ello, voto a favor.

El señor ESCALONA (Presidente accidental).- Había pedido la palabra para fundar su voto el Senador señor Letelier, pero no se encuentra ahora en la Sala.

El señor HOFFMANN (Secretario General).- ¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

El señor ESCALONA (Presidente accidental).- Terminada la votación.

--Se aprueba en general el proyecto (29 votos a favor, 1 en contra y un pareo).
Votaron por la afirmativa las señoras Alvear, Pérez (doña Lily) y Rincón, y los señores Bianchi, Cantero, Chahuán, Coloma, Escalona, Espina, Frei (don Eduardo), Girardi, Gómez, Horvath, Larraín, Letelier, Longueira, Muñoz Aburto, Navarro, Novoa, Orpis, Pérez Varela, Pizarro, Rossi, Ruiz-Esquide, Sabag, Tuma, Walker (don Ignacio), Walker (don Patricio) y Zaldívar (don Andrés).
Votó por la negativa el señor Kuschel.
No votó, por estar pareado, el señor Lagos.


El señor HOFFMANN (Secretario General).- Por desgracia, señores Senadores, no contamos con quórum para fijar plazo de indicaciones.

El señor ESCALONA (Presidente accidental).- Tiene la palabra el Senador señor Zaldívar.

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).- Efectivamente, no hay quórum, por lo que tendría que darse por terminada la sesión.
En todo caso, pido que quede resuelta la solicitud que hice llegar a la Mesa a efectos de remitir el proyecto también a la Comisión de Constitución.

El señor ESCALONA (Presidente accidental).- Ello también quedará pendiente para mañana, señor Senador.
El señor ZALDÍVAR (don Andrés).- Conforme.

El señor ESCALONA (Presidente accidental).- Como no existe quórum suficiente para tomar acuerdos, se levantará la sesión, pero antes daremos curso a los oficios requeridos.
PETICIONES DE OFICIOS

El señor HOFFMANN (Secretario General).- Han llegado a la Mesa diversas peticiones de oficios.

El señor ESCALONA (Presidente accidental).- Se les dará curso en la forma reglamentaria.
)------------(
--Los oficios cuyo envío se anuncia son los siguientes:
De la señora ALVEAR:
Al señor Ministro de Obras Públicas, para que informe sobre DIVERSOS ASPECTOS DE PROYECTO DE CONSTRUCCIÓN DE AUTOPISTA "COSTANERA CENTRAL".
Del señor HORVATH:
A la señora Ministra del Medio Ambiente, solicitándole REVISIÓN DE PROYECTO DE CENTRAL TERMOELÉCTRICA CASTILLA.
Del señor KUSCHEL:
Al señor Ministro de Educación, requiriéndole antecedentes acerca de AVANCE DE PROYECTOS DE CONSTRUCCIÓN DE ESCUELAS Y LICEOS EN REGIÓN DE LOS LAGOS, y al señor Alcalde de Castro, pidiéndole informar sobre REPARACIÓN Y MEJORAMIENTO DE CAMINO A TEN-TEN.
De la señora RINCÓN:
Al señor Ministro de Educación, para que informe respecto a TRAMITACIÓN DE EXPEDIENTE SOBRE SUBVENCIÓN PARA ESCUELA RURAL DE LENGUAJE "MUNDO INFANTIL", DE CHADA (Región Metropolitana).
Del señor ROSSI:
A los señores Intendente y Contralor de Arica y Parinacota, solicitándoles INFORME SOBRE MOTIVOS DE PETICIÓN DE ANTECEDENTES A SEREMIS EN RAZÓN DE ÚLTIMO MENSAJE PRESIDENCIAL, CON INDIVIDUALIZACIÓN DE FUNCIONARIO REQUIRENTE.
)---------------(

El señor ESCALONA (Presidente accidental).- Se levanta la sesión.
--Se levantó a las 18:43.
Manuel Ocaña Vergara,
Jefe de la Redacción